Subida por Morgian
Morg se dio muchas vueltas en la cama, no conseguía dormir, sentía que le faltaba aire para respirar, espacio para moverse sin toparse con su propio pelo y entonces lo vio claro: sus propios cabellos se estaban revelando; iban a por ella.
Primero intentó congeniar, consensuar y mediar con ellos utilizando productos para el cuidado del cabello que lo protegieran del sol y del calor del verano; a cambio solo pedía que en las horas de calor se mantuvieran dentro del lazo ya fuese una coleta, un moño o una trenza. No cumplieron.
Después intento separar sus fuerzas, peinarse con habitualidad evitando cualquier enredo, deshaciendo los nudos curiosamente alineados en los mechones como si se tratase de un mensaje en código Morse (...- . -. -.-. . .-. . -- --- ... .-.-. // ...- .- -- --- ... / .- / .--. --- .-. / - .. .-.-.).
Las declaraciones estaban hechas, así que Morg decidió que aquello había de acabar. Necesitaba espacio, necesitaba no morir ese verano asfixiada por su propio pelo que la aislaba de las brisas veraniegas. Tramó su plan para deshacerse de él aprovechando los momentos sordos bajo la protección del agua de la ducha o del aire del secador; estudio el camino más discreto a la peluquería cuando conseguía encerrar esa mata de pelo enrabiado bajo un gorro. Y finalmente lo hizo.
Se presentó a la peluquería, miró a su salvadora a los ojos y le dijo: “como siempre”. Ella ya sabía lo que debía hacer.
La peluquera cogió el peine e empezó a poner orden en la cabeza de Morg, una, dos, tres pasadas hacia un lado y hacia otro de la cabeza; después cogió las tijeras y las acercó a la punta del mechón que mantenía preso con su peine. Estaba a un milímetro y un latido más de ser cortado cuando Jez derribó la puerta de la peluquería al grito de “noooooooooo, Morg, nooooo”.
La rubia se giró hacia la morena: Este calor debe acabar, Jez.
-Pero primero…La trenza.
Tras esas épicas palabras ambas asintieron una única vez, se abrazaron y sus pelos se trenzaron en una trenza doble con cabellos rubios y morenos.
Después Morg consiguió cortarse su pelo, al fin y al cabo hacía calor. Mucho calor.
Detalle de la trenza:
Anécdota soñada y patrocinada por: Khat.
-Pero primero…La trenza.
Épicas palabras, sí señora!
PD: Morg, te hacía morena... supongo que es culpa de tus avatares XD
PD2: feliz estreno de Umbrionada!
Me costó un huevo y parte del otro que se estuvieran quietas para hacerles la jodida trenza, ja. Y luego para hacerles la foto.
Potty, quizá sea porque en la umbrionada del año pasado todavía me quedaba parte del negro que me había puesto en el pelo y a lo mejor recuerdas alguna foto de entonces. Me ha costado más de un año quitármelo de encima y empezar a vislumbrar mi color normal XD. Y eso que no era tinte, que era baño de color, pero se agarraba que no veas el jodío...
Rad, no te quejes encima, que nosotras éramos las que sufríamos con el cuello torcido y tardabais millones y... y nos dolía el cuello, y... y... ¿He dicho ya que teníamos el cuello torcido? o.o
La próxima vez, pedidle a la peluquera que os guarde el pelo cortado de gente rubia y morena y haceis una trenza con él ( a no ser que el pelo tenga que estar aún sujeto a la cabeza) Probablemente no tan divertido, pero menos dolor de cuello XD Y además, luego tendreis material para vuestro ejército de personas controladas mediante magia vudú.
Y además, luego tendreis material para vuestro ejército de personas controladas mediante magia vudú.
Mierda, nos han pillado.
Cita:
Ja! ya sabía yo que de algún lado tenía que salir el por qué. Ha de haber sido eso, que se me ha quedado tu imagen en morocha (y no que lo aluciné XDDDDDD)
Los tintes son un karma. Hace un par de años yo me teñí de negro y, no sólo no me duró más de dos semanas, si no que encima, la tintura, me decoloró el castaño dejándolo casi amarillo pajizo. Fracaso total u.u