- Es increíble... Después de este curso lo más seguro es que tomemos caminos muy diferentes y no nos volvamos a ver. Tengo miedo de perderos, chicos...
+ No exageres, siempre nos quedarán los mensajes, internet y esas cosas.
- Ya, pero no es lo mismo...
= Chicos, no dramaticéis. Encontré en internet un hechizo para que las almas de los amigos no se separen nunca, ¿por qué no lo intentamos? No perdemos nada por ello...
Fundados e infundados rumores apuntan a que la Camarilla está planeando algo, claro que quizá los garou también aprovechen la ocasión... Se habla de una vampiresa mutilada y de la llegada de cierta... cávala? Y qué es eso de vampiros vistos en compañía de lupinos?
Y dentro de este marcado e inestable entorno estás tú, un vampiro que acaba de llegar a la ciudad... Decidirás formar parte de este complejo intrincado de intrigas? Una guerra sobrenatural? O quizá te conformes con... no recibir la muerte decinitiva? Qué harás? Si es que puedes decidir...
Los héroes son miembros de un poblado llamado Trundheim, situado en algún lugar del gélido norte. Son saqueadores y guerreros, pero es la estación de invierno, donde pasan los duros días y noches disfrutando de sus ganancias mal logradas con sus familias y amigos.
Tras una noche tranquila, con las primeras luces del alba, un cuerno de alarma despierta a los habitantes de Trundheim.
Ikoma Toroku leía el papel traído por el mensajero. A cada frase que leía su semblante se volvía cada vez más en una máscara impenetrable.
-Una familia...en Hima.- dijo por fin mirando gravemente al hombre, que arrodillado ante su señor, había traído el mensaje.
-Avísales.-
El mensajero saludó con un movimiento de cabeza y salió corriendo para obedecer las órdenes de su señor.