Año 2165.
La humanidad creía que todo signo de violencia había sido erradicado completamente de su ya mancillada historia, llena de conflictos y guerras políticas sanguinarias guíadas por el hedonista deseo de sus líderes inmisericordes, logrando llegar a una paz absoluta que había juntado a todas las naciones en una sola bandera, que ondeaba con el poder del desarrollo por el bien de la raza humana. La tecnología dio un vertiginoso salto en su poderío, y la tierra se veía cada vez más y más en sincronía. El hambre fue erradicada, la sobrepoblación se controlaba meticulosamente y nadie en ninguna parte del mundo veía sentido a comenzar una guerra, no habían motivos suficientes. La paz era real, o al menos lo era entre los humanos.
La amenaza a lo desconocido se cernía siniestra sobre el horizonte de la tierra, recordándole a las personas qué eran las pesadillas, un reencuentro con la peor faceta de su subconsciente. De la nada, una figura titánica cayó desplomándose sobre Oceanía, sumergiéndola completamente en la miseria, una montaña con forma de cuerpo se derribó, arrasando todo signo de vida en el continente y dando comienzo al verdadero miedo de los humanos, lo que no podían vislumbrar fuera de sus límites. Los espectros cósmicos.
Seres intergalácticos hasta ahora desconocidos, monstruosas bestias que eran la mayor anti-tesis de la vida humana cuyo único fin era erradicar todo signo de vida con el que tuvieran contacto. Pero la humanidad no se quedó quieta, y bajo rigurosas investigaciones del cadáver del Espectro-01 "Abismo" se logró desarrollar un arma capacitada para enfrentar a los nuevos redentores de la humanidad. Salieron a la luz los Spectre's, robots mecanizados gigantes piloteados bajo una extraña tecnología denominada "Conexión artificial", que lograba enlazar los pensamientos del piloto con el sistema operativo del artefacto. El único problema era que, dado el enorme peso psicológico que suponía manejar uno, sus únicos posibles pilotos eran jóvenes de entre 12 y 20 años. Así la carrera armamentística comenzó para la humanidad, tratando desesperadamente de confiar en aquellas descomunales máquinas que parecían la única esperanza para la vida.
Tras la masacre dada en el primer combate a mano contra un Espectro Cósmico, la organización Sychlon está reclutando nuevos cadetes para asumir el cargo de Segador, piloto de las bestias biomecánicas que habían creado.
Se acaban las vacaciones de verano, y un año más la U.A. convoca las pruebas de acceso para que los mejores estudiantes del país puedan cruzar sus puertas y convertirse en la élite de la sociedad. Por supuesto, el más demandado es el aclamado curso de héroes, donde los jóvenes más determinados y ambiciosos pueden lucir sus singularidades para, el día de mañana, convertirse en la nueva gran generación de super-héroes.
Los personajes comenzarán como novatos a punto de tomar el examen de cazador, poco a poco irán ganando más y mas confianza en ellos mismos y mejorando sus habilidades hasta toparse con el Nen. La partida está pensada para un cupo sin límites, ya que irán muriendo seguramente a lo largo de la historia, pero una vez comenzada la partida NO se aceptarán más personas (quizás si como suplentes)
La partida cuenta con un medidor de perversión, lo que sumará o restará puntos a su personaje dependiendo de sus acciones en las distintas escenas. A la larga, esto llevará a sus personajes por un camino de maldad y locura, o uno de bondad y amor. Algo así como los juegos de Star Wars: Knights of the Old Republic.
La nueva Reina de Auradon ha hecho su proclama real: Dar una oportunidad a los hijos de los villanos más crueles de la historia para vivir en el Reino junto con los hijos de los héroes Disney. Sin embargo, los jóvenes malos se enfrentan a un dilema: ¿Deben seguir los pasos de sus padres nefastos y ayudar a todos los villanos a recuperar el poder o abrazar la bondad innata y salvar el reino?
Partida Sandbox +18