Os presento este experimento social en el que hombres y mujeres solteros buscan el amor y se comprometen... ¡antes de conocerse! ¿Es el amor verdaderamente ciego?
Sólo vosotros sabéis el motivo por el que os presentasteis voluntarios para cuidar y mantener el faro. Es un trabajo que nadie quiere, pero os permitirá alejaros de vuestros problemas. Seréis el siguiente relevo durante un año completo, en aquel gélido islote.
"Cualquier persona puede hacer este trabajo" os dijeron. Pero no todo el mundo está preparado para mantener la compostura ante la soledad.