Subida por Tarachan
Anecdota:
Sí, queridos amigos, lo que estáis viendo abierto a 180º es LA EDICIÓN PRIMIGENIA DE LA LLAMADA DE CTHULHU.
La que está sujetando el libro con esos ojillos que se debaten entre la sorpresa y la más pueril inocencia con la que nuestro bien amado Urkel miraba a los Winslow y decía ese mítico: "¿He sido yo?" no es otra que aquí esta humilde servidora; la otra persona, aquel que mira con ojos desorbitados como su preciado libro está siendo profanado, ultrajado, torturado, y muchos más "-ados" que no son nada buenos, es mi señor novio, poseedor de tal manual.
Todo comenzó un día de verano que pasábamos juntos; sol, buen tiempo, poco ruido, calma, ¿qué podía ir mal? Qué poco se esperaba mi pobre novio que se acercase una sibilina umbriana que con voz dulce, pero con la peor de las intenciones, le dijera:
- Mi vida, cariño, mi amor... ¿has traído un manual? Lo necesito para una prueba...-aquí puse ojitos, da un +5 a Persuasión.
Y él, pueril, inocente, incauto, respondió:
- Sí, claro, me traje el de La llamada de Cthulhu, ¿qué necesitas?
En cuanto sus ojos desorbitados vieron como la mujer que amaba abría de par en par las páginas de su querido libro, algo dentro de él se quebró. Intentó recomponerse y superar la adversidad, pero no superó la tirada de cordura (¡quién podría superar tal dificultad!) y su rostro, desencajado por el horror y la traición, se puede ver retratado aquí en esta foto.
Queridos umbrianos, si después de esto no me dejó... Yo no sé lo que es el amor verdadero.
Asght, que prueba más cruel
Quién no ha tenido un jugador novato en mesa que mientras se hace la ficha le pasas el libro en plan "léete esto mientras-" y entonces lo ves con el libro abierto de par en par e incluso imaginas oyes como se rompe :'(