No es fácil sobrevivir después de la muerte.
Partida para el sábado por la tarde.
Una vez mueras, tu alma será recogida por unas misteriosas instalaciones que te permitirán improvisar una reencarnación. Convertido en una patética criatura y agrupado con otras extremadamente diferentes patéticas criaturas, habrás de esperar tu juicio final mientras haces lo posible por mejorar tus posibilidades de un veredicto satisfactorio.
Que lo sepas.
Cuando este juego no era más que un puñado de ideas mal desarrolladas, lo traje a la VI KDD nacional con un éxito que me sorprendió a mí más que a nadie.
Ahora sigue en pañales, pero se parece más a un juego de verdad.
Excepto en una cosa: sigue siendo una locura.