En 2002, una panda formada por cuatro de los mayores tarugos de España fueron encarcelados por un delito que no habían cometido. No tardaron en fugarse en la prisión en que se encontraban recluidos, aprovechando que los funcionarios estaban comiéndose las uvas. Hoy, buscados todavía por el gobierno, sobreviven como soldados de y con fortuna. Si tiene usted algún problema y si los encuentra quizá pueda contratarlos, porque ellos son, el equipo JARL.
Cudillero, Reino Astur, en una realidad paralela donde las mascarillas solo se la ponen los dentistas y los atracadores.
Una mujer famosa que quiere cambiar el rumbo de su vida, dejar la farándula y ponerse a trabajar de una vez aterriza en Cudillero, donde compra un barco pesquero, al que pone de nombre libertad y empieza a dedicarse a la pesca de la lubina con cierto éxito. Hasta aquí todo bien, pero los paisanos de la cofradía non quieren furiatonas, ni mulleres y menos si son viellas, y ya si le traen al puerto a los carapijos de los paparazzis y fauna del salvame de luxe, cagonrós, esto no puede acabar bien. Así que, tras algunos sabotajes en las redes nuestra famosa llama al famoso equipo JARL.
El equipo Jarl, a bordo de su nissan vannette tuneada, cruzará el túnel del Nalón para cumplir su misión, darse una buena espicha, fumarse un puro y escapar antes de que la policía les encuentre. Es hora de que las balas silben, es hora de que los heroes entren en acción, es la hora del equipo JARL.
Partida eminentemente encaminada para echarse unas risas mientras se juega a rol. No queremos a tíos serios, cualquier tipo serio será obligado a grabarse en un video amorrándose a una botella de sidra y cantando el Asturias patria querida mientras se come un bollu preñau.
Sistema: Rápido y fácil, fichas pregeneradas, trasfondo del personaje libre.
Ritmo: Diario, fines de semana no obligatorios, pero si todos contestan yo sigo adelante....
Criterios de selección: 4 jugadores a elegir en base a experiencia en DMs, carismas, recomendaciones y sobre todo sobornos..... por un buen picadillo de jabalí hay plaza segura, de ahí para abajo todo es negociable, pero que no se enteré mi mujer que es la que lleva las cuentas en casa.