Los chicos parloteaban entorno a Era la que aún esperaba la respuesta que más le importaba, sin embargo o no respondieron a su crucial pregunta o simplemente estaba más entusiasmados hablando sobre cabañas y habitaciones como si todo fuese un feliz campamento, tal como esos campamentos de adolescentes, sin embargo, eso eran justamente, un puñado de adolescentes. La joven los observó pero hubo uno al que tomó especial atención.
– ¿y? – le preguntó simplemente a Takahashi que comenzó a hablar sobre el mantenerse con vida y la amenaza de criaturas que los podrían asesinar, ¿y?, era la forma más sencilla de cuestionar la relevancia de mantenerse con vida, a pesar de que racionalmente Erza sabía que debería sentir algo en especial sobre su propia existencia, pero en ese momento se le hacia exactamente igual el quedarse o el irse, total, de seguro el peligro era el mismo para ella. Siguió en silencio, su mirada se colocó en un punto muerto, con sus ojos a media asta, y Lou le habló.
– sólo necesito algo de comida y ropa, nada más – respondió secamente y comenzó a seguir a la chica, la joven Callin le había dicho lo que le había pasado a sus recuerdos, pero no hizo mayor reparo en eso, no le importaba a pesar de creer que debería importarle, ¿no era eso lo que sentían los humanos? ¿acaso había dejado de ser humana?, nunca lo había sido después de todo, pero ahora era menos humana que antes, ¿qué era?, y por fin pudo identificar algo en ella y eran solo dudas.
Mi ceño se frunció de inmediato, algo iba mal el instinto básico de supervivencia no existía en esta chica, según Cailin un dios le robo algo a Erza ¿el que? ¿tendría que ver con su comportamiento? Siendo ese el caso no podía dejarla abandonar el campamento así como así, no mientras no estuviera completa. Mas por ahora no ahora no hice ademán de querer intentar nada y mi expresión volvió a su neutralidad normal.
- Cailin, necesito que me cuentes todo lo que ha pasado... para averiguar que le pasa -hice un movimiento con la cabeza para señalar a Erza
Un viento fuerte empezó a soplar, algunas de las antorchas como la gran fogata del campamento empezaron a titilar, quizás a riesgo de extinguirse cosa extraña para muchos pues la gran fogata del campamento siempre estaba ardiendo ya que no necesitaba combustible ni maderos, ardía con la misma llama del Olimpo aquella que el titán Prometeo robo a los dioses y entrego a los hombres, algo no se sentía bien, por lo cual no fue extraño cuando Quirón tomo la palabra.
-Vuelvan a sus cabañas- dijo en tono preocupado – Capitanes reúnan a sus campistas y vuelvan dentro- pidió el centauro mientras el viento aumentaba de intensidad, era como si una risa imperceptible y atronadora se burlara de todos los chicos.
Tanto los sátiros como las arpías, dríadas y ninfas trataban de organizar todo, las voces de algunos capitanes empezaron a solicitar que los campistas regresarán, sin embargo Percy, Nico y Jasón se reunieron con el centauro.
Una tercer ráfaga de viento llego acompañada por el frio, las nubes se fueron tupiendo hasta ocultar la luna, ahora las pocas luces de las antorchas bailaban con el viento bajo la noche y lentamente todos fueron regresando a sus cabañas.
Solo tenía a Demian como campista, así que cumplir la orden no fue difícil, sin embargo al notar que otros se quedaban con Quirón no puede evitar hablar.
-Si hay algo que puedo hacer, avisenme, estaré en mi cabaña...- dije poco convencido de irme, sobretodo al sentir esa rafaga de viento, estaba claro que se trataba de una amenaza externa.
Un viento bastante molesto llegó pero cada ves aumentaba su fuerza parecía el inicio de un huracán seguí las órdenes del Quirón -TODOS LOS CAMPISTAS DE LA CABAÑA 5 VALLAN INMEDIATAMENTE A REFUGIARSE!!!- mire a Quirón preocupado y no pude evitar acercarme a hablar con el -¿Usted sabe que está sucediendo?.
Mis ojos de inmediato se desviaron a la fogata en cuanto sentí el viento... Eso no era normal, ¿verdad? Mis sospechas fueron confirmadas por la reacción de Quirón, algo malo pasaba y era algo grande. Debíamos escondernos mientras ellos se ocupaban de todo, nosotros poco podíamos hacer... eramos novatos sin entrenamiento y sin saber muy bien como usar sus poderes. Di media vuelta para volver a mi cabaña pero con la mirada fija en las dos chicas, Erza y Cailin. A la primera no le dije nada solo la vigilaba pero a la segunda me acerque e incluso me toma la libertad de agarrar su brazo pero sin fuerza ni nada por lo que podía soltarse muy fácilmente.
- Vamonos, aquí solo somos un estorbo y estamos en peligro.
-Si no hay de otra...pero... -dijo esto con aire un tanto enrarecido, observando el súbito clima tormentoso, pero no se movió de sitio.
-Pero si esto es una emergencia real...quizá deberíamos quedarnos y ver que sucede. La verdad...quizá sea mejor, al menos para mí. Realmente no siento que termine de encajar en este sitio. Simplemente se siente como un sueño extendido. "Podría ser peligroso" es una advertencia bastante vaporosa realmente...aunque ya vi un poco de eso cuando pasó lo del autobus.
-Tranquilos- el semblante del centauro intentaba mantener la calma- por el momento lo mejor que podemos hacer es descansar, el campamento esta protegido así que nada ocurrirá, solo ha sido un viento pesado- dijo el maestro de héroes con la mirada hacia el horizonte - Percy podrías hablar con tu padre, Jasón lo mismo pido en tu caso, Nico sería bueno tener información del inframundo, a veces los dioses son caprichosos con el ambiente- medito con una falsa tranquilidad.
-Bien chicos a sus cabañas, le pediré a algunos satiros que les lleven una merienda para la noche, en todo caso traten de dormir, las arpías y los ninfas doblarán su guardia- Quirón no se dio el lujo de retirarse por el contrario se dirigió a la armería y tomo su arco y flechas, el también montaría guardia.
Todos pueden continuar en sus cabañas, si alguno quiere ir de visita a una cabaña en particular por favor decirme cual.
Cailin aprovechó a cuchichear con Adolf, en voz baja y cuidando de que solo ellos se enteraran.
-Dime que no es solo a mi a quien no le convence para nada lo que está diciendo Quiron...digo, no mandas a tres sujetos importantes del campamento a hablar con sus padres solo porque sí. ¿Deberíamos tratar de investigar más a eso de la media noche?
Cailin momentáneamente se aparta de su grupo y antes de emprender camino a la cabaña, aprovecha a cuchichear con Adolf de forma familiar, en susurros.
Sin ganas de ponerme a discutir con Quirón en un momento así, decido despedirme del resto y tomar el camino de vuelta hacia la cabaña de Hécate junto a la mayoría de mis compañeras de cabaña.
Me dirigía a mi cabaña como Quirón ordenó la situación no me calmaba mucho incluso Quirón se había armado con arco y flecha para pelear de ser necesario pero tampoco parecía ser nada grave si no solo un poco de precaución.
Sentía que volver mi cabaña sería muy aburrido así que intenté llamar la atención de los chicos que había conocido el día de hoy en especial con Adolf -¿Qué les parece si nos reunimos en una cabaña para seguir con el ambiente tan alegre de hace poco?- tenía una sonrisa algo forzada pero se notaba también era sincera.
Ante las palabras de Cailin asiento.
-Vengan a la cabaña de Némesis más tarde, avisale también a Clarisse- comenté a Cyrus, estando reunidos de una forma social podríamos hablar tranquilos de todo.