Partida Rol por web

Me quedo petrificado al ver el mostruo que aparece tras la puerta. Doy un paso atrás asustado mientras veo como Yami, valiente, se lanza por el gran robot que parece querer derrumbar el techo. - Pero... ¿Qué hace?... ¡Está loco...! - Miro a ambos lados tratando de encontrar algo que nos ayude, pero no hay nada. Tan pronto como recupero el control de mis piernas me dirijo a los pasillos más cercanos para tratar de encontrar ayuda.

- ¡¡¡¡SOCORROOOOO!!!!.... ¡¡¡¡AYUDA, POR FAVOR!!!!

Al saltar sobre el descubres que su superficie es bastante resbaladiza y que es dificil matenerse de pie pero despues de mucho esfuerzo logras ver que en la parte de atras hay un boton rojo y otro azul, cual sera para apagarlo??

Al ver que nadie acude en mi ayuda salgo corriendo, tratando de vencer mi miedo, hacie el enorme monstruo de metal para tratar de ayudar a Yami.

Al llegar junto a él veo que mi compañero trata de escalarlo aunque con algunos problemillas.

- ¡¡Yami!!, ¡¿dónde vas?! ¡¿estás loco?!... -

No sé muy bien que hacer y miro a un lado y a otro tratando de buscar una solución. - Esta cosa es demasiado grande para nosotros solos.... -

Me encuentro en el dilema de que botón apretar mientras me esfuerzo por mantener la compostura y no caer del enorme robot. En ese momento, la voz de alguien -¿Komui?- llega a mis oídos justo antes de que decidiera empezar a golpear y arrancar todo lo que pueda del robot:

Cita:

- ¿El botón rojo? -Susurro para mi mismo mientras me muevo, lo más rápido que me permite la superficie, hacia él- ¡Aquí está, dos veces! -Concluyo dando dos golpes sobre el botón y saltando hacia atrás para volver a pisar el suelo por si el robot decide desmoronarse o desmontarse al apagarse.

Nada más terminar de hablar escucho unas palabras provinientes del piso superior indicando lo que debemos hacer.

- Esa voz me suena.... -

Un ligero despiste y, tras recuperar la consciencia, repaso con la mirada y tan rápido como puedo todo el robot tratando de encontrar el botón indicado. Pero es demasiado tarde, Yami lo tiene localizado y ha cumplido rápidamente la orden. Me quedo a la espera de lo que tenga que ocurrir mientras doy un paso atrás preventivo.

Ante los apretones de Yami el boton pareció temblar todo el como apunto de estallar... pero el temblor decayo quedandose en una levisima vibracion del suelo...para finalmente acayarse

En ese momento llega la chica que os habia llevado hasta alli

-mmmm....pues vaya, si que era facil apagarlo, de haberlo sabido antes yo misma lo hubiera hecho... os sonrie como si no hubiera pasado nada mientras intenta alejarse de alli dando saltitos alegre

Finalmente Yami consiguió para a la bestia mecánica antes de que esta acabe con todo el edificio. Alberto tomó aire profundamente y lo soltó de golpe, relajando todos los músculos de su cuerpo. En ese momento la chica que los había conducido hasta allí volvió a hacer acto de presencia y se marchó riendo como si nada. Alberto la miró extrñado sin saber bien que pensar de ella. De lo que sí estaba seguro era de que no volvería a confiar en un renacuajo como ese.

Al poco unos gritos procedente de la sala de arriba llamaron su atención, ordenándoles subir. El chico se acercó al robot donde se encontraba su compañero ciego y le extendió la mano asegurándose de que este la encontraba para ayudarle a bajar de aquella mole. - Vamos. Parece que nos equivocamos de sala. - Comentó buscando de reojo a la niña.

Tras apagar el robot me giro hacia la peculiar chica, recuperando la compostura.

- Si, muy fácil... lástima que no lo supieras... -Digo con tono sarcástico.

Al marcharse Konata, como si nada, me giro hacia mi compañero y sujeto con firmeza la mano que me tiende.

- Si, eso parece -Respondo a Alberto tirando de él con fuerza- Pero creo que es más rápido si vamos por la brecha del techo.

La brecha del techo es demasiado pequeña para que un cuerpo pase por aqui, es una grita en la juntura de la pared, si quereis subir por ahi quizas tengais que hacer un agujero mas grande...y tal y como estaba komui...quizas no sea la mejor opcion, aunque vuestro es el momento y la decision

Alberto se sorprende cuando Yami trata de tirar de él hacia arriba para pasar por la apertura del techo. En un principio, y debido a la sorpresa, el chico no puede hacer más que dar un par de pasos hacia arriba por el robot para no caer debido al tirón. Pero cuando la situación llega a su conciencia, clava los talones entre dos junturas de la maquína deteniendo a Yami.

- Vaya, se mueve con mucha soltura, pero no cabe duda de que está ciego de cojones. Es imposible que entremos por ahí. - Ambos quedaron un momento en silencio hasta que Alberto habló calamdamente instando a su compañero a bajar y se guir el camino normal. - Esto... creo que mejor subimos por las escaleras de fuera. No creo que pueda pasar por esa grieta... -