Partida Rol por web

El bosque se extiendo bajo la niebla fría y gris. Cae una fina llovizna que cala hasta los huesos. En algún lugar, montaña abajo, creeis que puede haber una carretera secundaria.

Al ver la carretera le digo a la muchacha intentando animarla:- Podemos seguir esa carretera. Bueno sera complicado, pero mejor que estar en el bosque seguro... ¿Por cierto como te llamas? Yo ya me he identificado, además parece que nos va a tocar estar cierto tiempo juntos-

 Miré al hombre - Mi nombre es Amanda - le comenté pensando en lo que me había contado - Yo venía en mi coche pero después de que me persiguiera aquella cosa me he quedado sin coche y sin arma ... no se si la carretera como tal es buena idea, si esa cosa sigue cerca nos perseguirá mas facilmente si no tiene arboles que le obstaculicen - me froté las manos - Aunque ... nos arranca de cuajo, nunca había visto algo así - le miré

- En mi opinión deberiamos efectivamente, buscar un sitio seco y seguro donde pasar la noche y por la mañana intentar ir a por tu furgoneta o a por mi coche si no está echo destrozado por ese yeti rojo - fije con frustración - ¿tienes algún arma? - le pregunté, aunque la posibilidad de que así fuera era mínima, los civiles no solían ir armados así porque sí 

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Busco en mi cinto de herramientas, colgada a mi espalda se encuentra una llave grifa. Seguramente no note el peso por la situación, saco mi llave grifa, pesada y contundente capaz de incrustarse en una cabeza si se le da a alguien muy fuerte con ella. la cojo con una mano y doy un golpe al aire. Miro a Amanda y le digo:- Creo que esto servira al menos en el cuerpo a cuerpo...-

 - Contra una de mi tamaño ... o como mucho del tuyo puede, contra algo como lo que me perseguía ... dudo que sirva, pero mejor eso que nada - le dije con una amarga sonrisa aunque con la oscuridad y el barro no sabía si iba a poder verla.

 - Será mejor que nos pongamos a caminar, yo he venido desde allí - señalo la pendiente - Lo mas lógico sería ir hacia allá - señalé en dirección contraria

 - ¿que opinas?

Me alzó de hombros y le contesto:- Lo que uste mande señorita, habra que empezar por algún lado...- Y avanzó con ella a donde indica.

 Miré al tipo - Así me gusta, hombres que no dudan a la hora de aceptar una petición femenina - traté de bromear para romper un poco el hielo aunque no sabía como se lo iba a tomar - Pues por aquí - comencé a caminar.

-Siendo ústed, puede mandar lo que haga falta, además siempre es bueno tener buenas vistas, entre tanto barro y arboles- Le digo picaramente, mientrás empieza a seguirla.

 - Si no es ... mucho pedir, prefiero que me trates de tú ... no soy tan mayor como para que Usted me suene bien - hice un intento por sonreír pero aún sentía la adrenalina por mi cuerpo esa maldita cosa me había llevado al borde de la locura - ¿Buenas vistas? - miré al frente - No creo que con esta luz podamos tener buenas vistas - aparté el pelo de mi cara.

 La verdad es que ... toda mi vida me había centrado solo en dos cosas, mis estudios y mi trabajo ... nunca había tenido tiempo para flirtear ni conocer chicos así que no conocía muy bien esos metodos que la gente usaba para mostrar interés uno por otro ...

 Yo solía ser bastante directa, me gustas, ¿nos acostamos? ... así que las indirectas solían pasar de largo ante mis ojos sin que me percatara de lo que realmente pasaba

Tras la adrenalina de la huida, el camino se vuelve más duro y más complicado. El viento y la oscuridad os impiden avanzar, mientras la niebla os cala los huesos. No sabéis cuánto pasa hasta que encontráis el camino, una pista de tierra, apenas unas rodadas llenas de charcos y barro. La oscuridad lechos de la niebla os rodea, y el viento hace rugir los árboles a vuestro alrededor.

Y algo que no son los árboles lanza un graznido roto y terrible que hace que la sangre se os congele en las venas. 

Conoces esa carretera. No pensabas que estuvieras tan cerca: A poco más de un kilómetro se encuentra Crook's End, la mansión del padre de Michaela Duffy. Quizás haya alguien allí. Al menos, habrá refugio, comida y un baño caliente. 

 - Espera - dije de pronto parándome - Conozco esta carretera - le dije a Guy - Por allí hay una casa, vive el padre de una ... "amiga" - le dije - Si nos damos prisa la alcancaremos pronto, seguro que allí podremos darnos un baño caliente y descansar un poco - le miré a los ojos - Por separado - aclaré notando como un pequeño fogonazo se encendía en mis mejillas - Tu en tu baño ... yo en el mio - yo siempre dejando las cosas claras ... aunque ...

" nada de aunques, estás frenetica aún por el yeti rojo ... no seas loba "

Me dije a mi misma

-Bueno, con tal de volver a tener ropa seca, lo que sea... tranquila, prefiero otros lugares donde pueda moverme más a mis anchas- y le guiño el ojo y sonrio. Necesito quitarme un poco el miedo de encima, pero al oir el ulular a lo lejos, me pongo en guardia y le digo con un susurro:- Vamos rapido... Este no es un buen sitio.-

 Reí, no sabía si divertida o nerviosa.

Empecé a caminar rapido junto a el, mientras antes llegaramos a la casa, antes estariamos a salvo y sobre todo, mas cómodos .... - Por aquí - dije guiandole por la carretera, esperaba estar haciendolo de forma correcta y no confundiéndome 

La oscuridad terminó de cerrarse. Ahora lo único que os orientaba eran los árboles, ir caminando hasta casi golpearse con ellos, mientras seguís caminando por los charcos embarrados del camino.

Y entonces apareció la verja de hierro, abierta.

Y, al otro lado de una amplia explanada de grava, un coche aparcado frente a una gran casa de contornos siniestros en mita de la noche. La luz se derramaba de la puerta principal entreabierta, líquida y nebulosa en la niebla cambiante.