Incansable, Enrielle saltaba de un lado a otro y encajaba los golpes de aquel bruto ya dispuesta a contraatacar con la Dragonlance cuando vio por el rabillo del ojo aquella sombra que crecía al fondo de la caverna. Se tuvo que detener un momento para observar cómo, por obra de Ailaserenth, pues estaba junto a ella, Bugambilia se transformaba rápidamente en el monstruo de muchas cabezas que casi se comió a Kylian.
Parpadeó varias veces estupefacta viendo cómo se acercaba, lanzando dentelladas a diestro y siniestro con aquellas cabezas que se asemejaban a las de serpientes gigantes. A la luz de su arco brillante, que yacía abandonado a los pies del dragón, le pareció aún más terrible y hasta creyó contar más de diez cabezas. Éstas siseaban y se lanzaban a morder a los enemigos con rapidez y ferocidad, y Enrielle no pudo hacer otra cosa que apartarse y contemplar impresionada cómo las dos bestias colosales se enzarzaban en una salvaje y cruel pugna.
Motivo: Lanzazo pa na 1
Tirada: 1d20
Resultado: 13(+16)=29 [13]
Motivo: Lanzazo pa na 2
Tirada: 1d20
Resultado: 19(+11)=30 [19]
Motivo: Daños pa na
Tirada: 2d8
Resultado: 1(+11)=12, 3(+11)=14 (Suma: 26)
Jefe, si por lo que sea el dragón sobrevive al overkill de la hidra de Ailaserenth (qué pasada, con eso y la nube asesina nos pasamos el juego xD), Enrielle en su turno le daría algún cutre lanzazo. Que será para nada, pero bueno dejo la tirada, a ver si me sale un crítico, sería lo típico xD
La acrecentada y monstruosa Bugambilia os observa a todos desde las alturas con sus diez pares de ojos antes de lanzarse sobre el ogro con sus fauces abiertas y arrancarle la cabeza de un solo bocado. El cuerpo decapitado estalla un segundo después, salpicando ácido y restos corporales en todas direcciones.
Libre de su atacante, Enrielle reacciona con rapidez dándose media vuelta y asestando dos feroces lanzadas al dragón ciego. Sus golpes son certeros y el arma sagrada parece hacer el resto, hundiéndose profundamente en la carne de la angustiada y moribunda criatura y arrojando andanadas de poder sagrado en su interior.
Kylian aprovecha la ocasión para emprenderla una vez a bastonazos contra su retaguardia. Y, enloquecido por el dolor, el dragón retrocede en su desesperación hasta quedar fuera del saliente rocoso.
Batiendo frenéticamente sus alas, queda suspendido durante un instante en el aire antes de vomitar su corrosivo aliento a la desesperada contra su último atacante y dejarse caer doce metros pared abajo; donde aterriza de forma desbaratada y torpe.
Motivo: Daño ácido
Tirada: 2d4
Resultado: 7 [3, 4]
Motivo: TS Ref. Klunurig
Tirada: 1d20
Dificultad: 19+
Resultado: 15(+3)=18 (Fracaso) [15]
Tirada oculta
Motivo: Daño ácido
Tirada: 10d4
Resultado: 22 [1, 1, 4, 1, 1, 4, 2, 3, 1, 4]
Tirada oculta
Motivo: Daño extra
Tirada: 8d6
Resultado: 24 [5, 3, 3, 5, 3, 2, 1, 2]
NOTA: Kylian y Ailas deben realizar un TS de Reflejos (CD 21), si fallan sufren 22 puntos de daño por ácido y si la superan, la mitad.
NOTA 2: El dragón agonizante está ahora 40' por debajo de donde os encontráis vosotros. Y, ahora mismo, Kylian es la única que puede verle.
Ailas (7) → 27/33 [armadura de mago1, escudo5, retirada expeditiva8, bendecir10]
Ulfgar (5) → 75/96 [fatigado2, vestidura mágica3, bendecir10, resistir energía12, estremecido14, -6 SAB]
Klunurig (3) → 68/77 [protección vs energía6, bendecir10, forma salvaje: 0/3 usos diarios disponibles; cetro de prolongación: 1/3 usos diarios disponibles]
Drac1 (16) → muerto [-2 CON]
Bugambilia (16) → 23/31 [bendecir10, defensa total13, polimorfar16]
Enrielle (16) → 45/63 [luz4, bendecir10, resistir energía11, bolsa de supervivencia: 0/5 usos diarios disponibles]
Kylian (9) → 29/63 [poder de la justicia7, arma mágica9, bendecir10, arma espiritual15]
Dragón (8) → moribundo [casi ciego; -2 CON]
1: Armadura de mago (NL 10) [+4 de armadura a la CA, durante algo menos de 1 horas]
2: Fatigado [no puede correr, ni cargar, -2 FUE y -2 DES hasta que descanse 2 horas]
3: Vestidura mágica (NL 8) [su armadura obtiene un bonificador +2 de mejora a la CA, durante algo menos de 1 horas]
4: Luz (NL 2) [el arco de Enrielle emite luz brillante en un radio de 20' y luz tenue en otros 20', durante algo menos de 20 min]
5: Escudo (NL 10) [+4 de escudo a la CA, durante algo menos de 10 min]
6: Protección vs energía (ácido) (NL 9) [puede absorber hasta 82 puntos de daño por ácido; durante algo menos de 90 min]
7: Poder de la justicia (NL 9) [tamaño Mediano; +8 FUE, +4 CON, +4 armadura natural, RD 5/maligno, -1 CA, -1 atq, durante 4 asaltos]
8: Retirada expeditiva (NL 10) [velocidad terrestre +30', durante algo menos de 10 min]
9: Arma mágica [su bastón se convierte en un arma +1, durante 6 asaltos]
10: Bendecir (NL 2) [+1 de moral a las tiradas de ataque y TS vs miedo, durante algo menos de 2 min]
11: Resistir energía (NL 3) [RE 10 (ácido), durante algo menos de 30 min]
12: Resistir energía (NL 9) [RE 20 (ácido), durante algo menos de 90 min]
13: Defensa total [+4 de esquiva a la CA y no puede realizar otras acciones estándar, hasta que determine lo contrario]
14: Estremecido [-2 a las tiradas de ataque, pruebas de Característica y habilidad y TS, durante 16 asaltos]
15: Arma espiritual (NL 9) [bastón +9/+4 al ataque, 1d8+3 al daño de fuerza; durante 7 asaltos]
16: Polimorfar (NL 10) [hidra de 10 cabezas, +11 CA (armadura natural); durante algo menos de 10 min]
Mi último encantamiento tiene un resultado espectacular a pesar de que los efectos no solo eran esperados, sino premeditados. Ver a la transformada Bugambilia acabar con el drac-ogro de un solo bocado es una imagen que tardaré en olvidar.
Todavía estoy tratando de digerir esta visión cuando Flechas de Muerte acomete al wyrm Negro con la Dragonlance en un ataque fulgurante y mortífero. Cualquier otra arma apenas le hubiera causado daño alguno, pero la lanza de Huma en las manos de nuestra matadragones resulta decisiva.
Visiblemente malherido, a nuestro enceguecido enemigo no le queda más remedio que tratar de huir. No sin antes lanzar un última bocanada de su corrosivo aliento contra Kylian. Que yo me encuentre en su línea de impacto no es más que una desafortunada coincidencia que no tardo en lamentar.
El ácido desintegra mi blanca túnica allí donde la toca, consume mi carne y expone músculo e incluso hueso mientras yo aúllo, trastornado por el dolor. Sin embargo, puedo considerarme afortunado de que me haya alcanzado en el pecho y no la cabeza, o ahora mismo estaría muerto.
Cuando un instante después desaparece de mi vista, siento un repentino alivio de que se haya marchado. Pero ese alivio se desvanece al momento al reparar en que si el wyrm consigue huir lo perderemos para siempre a él y a su botín. Si yo fuera él, jamás regresaría a enfrentarme a unos enemigos a los que no puedo vencer y me aseguraría de que no se quedaran con mi tesoro. Lo que no pudiera llevar conmigo, lo echaría a las aguas y dejaría que la corriente lo arrastrara hasta el mar.
—¡Que no escape! —grito, angustiado, recordando la maldición de Maab y temiendo sus consecuencias si no conseguimos para ella lo que juramos llevarle.
Cada paso es una agonía mientras avanzo hacia el borde del saliente, mientras libero mi varita de proyectiles mágicos afianzada bajo mi cinturón. Arma en mano, me asomo y... caigo de rodillas a punto de echarme a llorar.
—No le veo... —le confieso con desesperación a nadie en particular. Mi aguda vista élfica es incapaz de ver al dragón negro situado tan abajo—. ¡Shirak!
Un resplandor dorado ilumina el extremo de varita y creo ver, al fondo, una sombra borrosa que se retuerce y se arrastra por el suelo.
—¡Ahí, ahí, está ahí!
Motivo: TS de Reflejos
Tirada: 1d20
Dificultad: 21+
Resultado: 8(+6)=14 (Fracaso) [8]
Como ahora tengo una velocidad de movimiento de 60' me sobra para situarme al NO de Ulfgar y mirar hacia abajo. Pero entiendo que mi visión en la oscuridad de 30' no me permite ver al dragón con las actuales condiciones de luz que hay.
Uso mi acción estándar para lanzar "luz" en lugar de "proyectil mágico" :(
Motivo: TS REF
Tirada: 1d20
Dificultad: 21+
Resultado: 11(+9)=20 (Fracaso) [11]
Motivo: Bastón espíritual 1
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+9)=24 [15]
Motivo: Bastón espíritual 2
Tirada: 1d20
Resultado: 19(+4)=23 [19]
Motivo: Bastón 1
Tirada: 1d20
Resultado: 1(+13)=14 [1]
Motivo: Bastón 1 pifia
Tirada: 1d20
Resultado: 9(+13)=22 [9]
Motivo: Bastón 2
Tirada: 1d20
Resultado: 20(+13)=33 [20]
Motivo: Bastón 2 critico
Tirada: 1d20
Resultado: 20(+13)=33 [20]
Motivo: Bastón 3
Tirada: 1d20
Resultado: 20(+8)=28 [20]
Motivo: Bastón 3 crítico
Tirada: 1d20
Resultado: 11(+8)=19 [11]
Caos, muerte y destrucción, el Vendaval desatado en todo su esplendor, el dragón negro y todos aquellos esbirros que se habían visto obligados a acompañarle al combate sucumben. Una hidra arranca de un bocado la cabeza del ogro-dragón, que estalla en una explosión de ácido. Enrielle sentencia el destino del oscuro ser escamoso clavando la Dragonlance en su cuerpo. En sus últimos estertores el dragón reparte muerte con su aliento ácido, aunque por fortuna sus compañeros logran encajar los daños sin sucumbir.
No obstante el dragón negro cae fuera del abasto del grupo, moribundo pero todavía con un ápice de vida. Eso podría bastarle para huir y luchar otro día. Un enemigo jurado, lleno de recursos y de poder, más que capaz de acabar con cualquiera de los componentes del Vendaval en un duelo solitario. Había que poner fin a su vida en aquel momento y lugar. Por un momento Ulfgar pensó en utilizar el poder de las llamas de la fragua de Reorx, pero por desgracia esa invocación quedaba fuera de su abasto en ese momento, así que, decidido a no dejar huir a la criatura, utilizó la escasa distancia que tenía hasta el borde y saltó hacia el vacío. Sumido en la oscuridad, sus oscuras escamas le ocultarían a unos ojos humanos, pero Ulfgar era un orgulloso enano y su visión perforaba la oscuridad.
─¡Muere, engendro escamoso!
Ulfgar, martillo sagrado en mano, cayó con todo su peso, su voz llena de furia, incapaz de contener la fuerza de su pensamiento, de su convicción, de su fe.
Motivo: Ataque de toque (Flamear)
Tirada: 1d20
Resultado: 4(+6)=10 [4]
Motivo: Daño Flamear
Tirada: 1d6
Resultado: 6(+5)=11 [6]
Motivo: ¿Piruetas?
Tirada: 1d20
Resultado: 17 [17]
Motivo: Martillazo
Tirada: 1d20
Resultado: 6(+9)=15 [6]
(1) La visión en la oscuridad de los enanos llega a 60', 18m, así que se supone que debería verlo.
Aplico un +1 al ataque por posición elevada. No servirá de nada, pero tiene su gracia contra un dragón :-P
Seguro que me llevo daño por la caída... pero si caigo sobre el dragón ¡espero que él también reciba daño!
Decapitar de un mordisco al ogro fue una especie de resarcimiento por todo el daño que le habían hecho a la kender en el pasado, dándole una extraña y sádica satisfacción. Pero fue breve y enseguida dejó una sensación de vacío que necesitaba llenar con más sangre. La del dragón.
Bugambhidra movió su gigantesco cuerpo de serpiente hacia el borde del precipicio, asomándose con sus múltiples cabezas. La visión en la oscuridad que otorgaba su nueva forma le permitía ver al dragón allá abajo, pero lejos de su alcance. Siseó con todas ellas amenazadoramente.
Me desplazo hacia el borde del acantilado para asomarme. Espero que no se derrumbe otra vez y Kylian vuelva a despeñarse, porque creo que como tenga una segunda de esas no lo cuenta xD
Klunuceronte se giró sobre sí mismo, muerto el engendro humanoide, con la intención de embestir al gusano-negro y acabar con él de una vez por todas. Por desgracia, el antinatural invasor del pantano se había escabullido por un desnivel, quedando fuera de la visión de Klunuceronte, quien solo alcanzó a ver al druanti-metálico arrojándose como un loco por el desnivel.
Aquella jornada parecía condenada, Klunurig sentía que todas sus decisiones llegaban a destiempo y eran de poca ayuda para sembrar la muerte. Miró con frustración hacia el precipicio. ¿Porqué le sucedía esto?
Miro y lloro xD
La exploradora de la Legión de Acero estaba maravillada. La lanza de Huma parecía tener vida propia e impulsarse sobrenaturalmente para perforar las duras escamas con una facilidad sorprendente. Estuvo convencida por un momento que el dragón sucumbiría a los dos lanzazos, pero el maldito consiguió apartarse y desaparecer por el borde.
Enrielle se cambió la lanza de mano preparada para echar a correr hacia allá, cuando de pronto vio a Ulfgar con evidentes intenciones de arrojarse al vacío martillo en mano.
—¡Ulfgar, no lo hagas! ¡Es una locura! — le gritó, pero ya era tarde. El enano ya no estaba allí.
Enrielle dudó por un momento. Ailaserenth iluminaba hacia abajo y gritaba que allí estaba. El dragón, entendía. Y ahora también Ulfgar. ¡Pero iba a escapar! Si Gurmoil escapaba por aquellos laberintos ella lo podría rastrear con facilidad, pero si se sumergía en el agua perdería su rastro. Y si lo perdían, con ellos quedaría la maldición de la maldita bruja hasta que lo encontrasen de nuevo. Los dioses sabrían si volverían a tener la oportunidad.
Tragó saliva. Era una locura, pero ya no era sólo era por ella, sino también por el loco de Ulfgar y Ailaserenth, malditos como ella. El recuerdo de arrojarse al agua con Jilhazí llegó a su cabeza. Decía de Klunurig, pero sin duda ella tenía que tener un tornillo flojo también si se le pasaban esas cosas por la cabeza de forma recurrente, y no le podía echar la culpa a ser un enano criado por bakalis, haber recibido un martillazo en la cabeza mientras estaba en la forja o tener el cerebro lavado por la más absoluta neutralidad.
—¡Por la Legión de Acero! ¡Por el Vendaval! ¡Por el pantano! ¡Por Huma Dragonbane! — enumeró apresuradamente y a pleno pulmón, echando a correr hacia el abismo — ¡No escaparás, Gurmoil-el-gusano-negro! ¡Muereeee! ¡Aaaaahh!
Al llegar al borde con la cabeza gacha y aferrada a la lanza, dio un pequeño salto y se precipitó al vacío, dejando atrás a sus estupefactos compañeros y su arco luminoso. En la vertiginosa caída hacia la oscuridad con su larga trenza azotando el viento, la Legionaria de Acero trató de apuntar la Dragonlance hacia abajo con la esperanza de acertar a la gran masa negra que se vislumbraba en el fondo de la dura caída que le esperaba.
Motivo: Salto de fe
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 3(+4)=7 (Fracaso) [3]
Motivo: Ataque volador descendente sorpresivo!! Muere Gurmoooooiiiiiiilll!!!!
Tirada: 1d20
Resultado: 19(+17)=36 [19]
Motivo: Daño
Tirada: 1d8
Resultado: 7(+11)=18 [7]
Motivo: Ocultación 20%, por favor no me jodáis dados umbrianos!
Tirada: 1d100
Dificultad: 21+
Resultado: 69 (Exito) [69]
El dragón no escapará! Vamos Ulfgar, no estás sólo xD
Esta vez, al contrario que cuando me tiré al agua aquella vez, he hecho los deberes:
- Tiro por Saltar a CD15 para amortiguar los primeros 10' y que sean de daño no letal. Fallo xD Así que espero que Gurmoil esté gordito y esponjoso xD
He tirado también la ocultación parcial, porque según mis cálculos y los del jefe Ailaserenth está iluminando desde el borde, así que el dragón debe tener ocultación parcial al estar en zona de penumbra. Que paso, menos mal xD
A pesar de sus terribles quemaduras por ácido, el mago Túnica Blanca echa a correr hacia el borde del abismo temiendo que vuestro enemigo consiga escaparse. Unos segundos después, la luz dorada que comienza a emitir su varita revela la ubicación del huidizo dragón, aterrizado entre los cascotes y los restos de la hidra que moraba aquí arriba.
A los agudos ojos de enano de Ulfgar les sobra la luz mágica invocada por Ailaserenth. Desde las alturas su visión infrarroja le permite percibir el calor que desprende el dragón, situado una docena de metros más abajo. Intenta rezarle a su dios para que incinere a la criatura, pero las palabras de la plegaria le son esquivas a su torturada mente y decide entonces lanzarse de cabeza tras él en un acto de fe ciega.
Con su martillo por delante, el clérigo de Reorx recorre la distancia que le separa de su enemigo en lo que dura un parpadeo, se estrella contra su escamoso cuerpo como quien lo haría contra una pared de roca y rueda hasta el suelo con algunas costillas fisuradas a causa de la fuerza del impacto. No cabe duda de que los efectos del encuentro anterior han afectado gravemente a su salud mental pero, por fortuna para él, todavía conserva buena parte de su portentosa entereza física.
El rinoceronte en el que se ha transformado Klunurig mira aquí y allá desconcertado. Donde un instante antes tenía a un enemigo frente a sí y otro a su espalda, ahora ya no tiene a ninguno. El ogro ha estallado y el dragón ha desaparecido. Lo que sí alcanza a ver, paralizado de asombro, es a Ulfgar lanzarse de cabeza por el precipicio y a Enrielle saltar tras él.
Empuñando la Dragonlance con ambas manos, la legionaria de acero se zambulle en un vertiginoso picado contra las sombras borrosas que ve moverse al fondo, tenuemente iluminadas por la varita del mago elfo. El arma sagrada parece tirar de su brazo hacia su enemigo, contra el que se estrella dolorosamente.
El aire escapa de sus pulmones por la fuerza del impacto, la lanza escapa de su mano y su cuerpo se desliza sobre el ala derecha del dragón hasta aterrizar dando vueltas en el pedregoso suelo.
Flechas de Muerte tarda unos segundos en recuperar el aliento y en conseguir incorporarse, contusionada y dolorida. Ulfgar está allí para ayudarla a levantase. También sigue allí el dragón, pero no se mueve. Tiene la Dragonlance hundida en su cerviz hasta la empuñadura, con el astil de metal estelar sobresaliéndole por el pecho y la punta clavada más de un palmo en la piedra.
No hay duda, está definitivamente muerto.
Motivo: Ulfgar. Daño no letal por caída
Tirada: 1d6
Resultado: 4(-2)=2 [4]
Motivo: Ulfgar. Daño letal por caída
Tirada: 3d6
Resultado: 11 [3, 4, 4]
Motivo: Enrielle. Daño letal por caída
Tirada: 4d6
Resultado: 16 [3, 6, 4, 3]
NOTA: Ulfgar no puede hacer prueba de "piruetas", pero le mantengo el resultado del dado para una tirada de "salto" y reducir así el primer 1d6 de daño por caída a "no letal". Considero también que está realizando un ataque en carga por el impulso que tiene pero ni por esas supera la CA del dragón.
NOTA 2: Bugambilia no tiene visión en la oscuridad (y "polimorfar" no se los otorga).
Kylian (9) → 7/63 [poder de la justicia7, arma mágica9, bendecir10, arma espiritual15]
Dragón (8) → muerto
Ailas (7) → 5/33 [armadura de mago1, escudo5, retirada expeditiva8, bendecir10, luz17]
Ulfgar (5) → 64/96 [fatigado2, vestidura mágica3, bendecir10, resistir energía12, estremecido14, -6 SAB, 2 daño no-letal]
Klunurig (3) → 68/77 [protección vs energía6, bendecir10, forma salvaje: 0/3 usos diarios disponibles; cetro de prolongación: 1/3 usos diarios disponibles]
Bugambilia (16) → 23/31 [bendecir10, defensa total13, polimorfar16]
Enrielle (16) → 29/63 [luz4, bendecir10, resistir energía11, bolsa de supervivencia: 0/5 usos diarios disponibles]
1: Armadura de mago (NL 10) [+4 de armadura a la CA, durante algo menos de 1 horas]
2: Fatigado [no puede correr, ni cargar, -2 FUE y -2 DES hasta que descanse 2 horas]
3: Vestidura mágica (NL 8) [su armadura obtiene un bonificador +2 de mejora a la CA, durante algo menos de 1 horas]
4: Luz (NL 2) [el arco de Enrielle emite luz brillante en un radio de 20' y luz tenue en otros 20', durante algo menos de 20 min]
5: Escudo (NL 10) [+4 de escudo a la CA, durante algo menos de 10 min]
6: Protección vs energía (ácido) (NL 9) [puede absorber hasta 82 puntos de daño por ácido; durante algo menos de 90 min]
7: Poder de la justicia (NL 9) [tamaño Mediano; +8 FUE, +4 CON, +4 armadura natural, RD 5/maligno, -1 CA, -1 atq, durante 3 asaltos]
8: Retirada expeditiva (NL 10) [velocidad terrestre +30', durante algo menos de 10 min]
9: Arma mágica [su bastón se convierte en un arma +1, durante 5 asaltos]
10: Bendecir (NL 2) [+1 de moral a las tiradas de ataque y TS vs miedo, durante algo menos de 2 min]
11: Resistir energía (NL 3) [RE 10 (ácido), durante algo menos de 30 min]
12: Resistir energía (NL 9) [RE 20 (ácido), durante algo menos de 90 min]
13: Defensa total [+4 de esquiva a la CA y no puede realizar otras acciones estándar, hasta que determine lo contrario]
14: Estremecido [-2 a las tiradas de ataque, pruebas de Característica y habilidad y TS, durante 15 asaltos]
15: Arma espiritual (NL 9) [bastón +9/+4 al ataque, 1d8+3 al daño de fuerza; durante 6 asaltos]
16: Polimorfar (NL 10) [hidra de 10 cabezas, +11 CA (armadura natural); durante algo menos de 10 min]
17: Luz (NL 10) [la varita de Ailas emite luz brillante en un radio de 20' y luz tenue en otros 20', durante algo menos de 100 min]
El wyrm Negro se nos escapa pero mis valientes compañeros no están dispuestos a permitírselo, les cueste lo que les cueste. Aunque su temeridad me hiela la sangre, también siento un secreto orgullo de formar parte de esta gesta y haber podido contribuir en la medida de mis posibilidades a un nuevo éxito de los Héroes de la Desolación.
—¿Maese Ulfgar? ¿Flechas de Muerte? —pregunto, moviendo mi iluminada varita en un intento de cerciorarme de que se encuentran con vida—. ¿Estáis bien ahí abajo?
Desde esta altura resulta difícil precisar cómo de graves son sus heridas. Mis quemaduras y las de Kylian sin duda lo son, pero estamos vivos y eso es más de lo que pueden decir nuestros enemigos.
Si conseguimos mantener esta posición unas pocas horas más, a pesar de haber perdido nuestro refugio, confío en que el divino Solinari me permitirá localizar el cubil del dragón donde guarda sus tesoros. Entonces podremos salir de aquí con nuestro botín, regresar a Shrentak y entregarle a la vieja Túnica Negra lo que nos pidió a cambio de librarnos de su maldición.
Caer de 12 metros de altura tenía la costumbre de matar o al menos incapacitar a los humanos, pero Ulfgar no estaba hecho de esa pasta. Ni siquiera impactar contra las duras escamas del dragón supuso un contratiempo serio. Sí lo era la formidable armadura natural de Gurmoil. El martillazo que le propinó el Yunque Poderoso volvió a ser inútil. No sucedió lo mismo, en cambio, con la llegada de Enrielle a la liza desde las alturas. ¿Cómo podía serlo si portaba la Dragonlance?
─Creo que has perdido algo ─dijo el magullado enano, jocoso, mientras ayudaba a reincorporarse a la humana─ Por suerte ese te la guarda ─añadió señalando el arma clavada en el dragón.
Flechas, la que por méritos propios había logrado cegar al monstruo escamoso, ahora, intencionada o accidentalmente, había empalado a Gurmoil.
─¡Victoria! ¡Jajajajajá! ─exclamó alzando su martillo sagrado sobre su cabeza.
El enano, exultante, no pudo contener más su profunda y reverberante risa, riéndose a carcajadas. Una reacción absolutamente diferente de la que hubieran podido esperar del habitualmente comedido y sosegado ingeniero.
─Vamos, te ayudo a sacarla de ahí, me parece que no va a ser fácil ─le confesó entre risas a Enrielle.
Pero la suya no era la única voz que inundaba las cavernas en esos momentos. Ailas, cuya piel y ropas habían vivido tiempos mejores, estaba asomado al pequeño abismo interesándose por ellos.
─¡Estamos bien, Gurmoil ha muerto, esperad un momento y volveremos con vosotros! ─gritó sin atisbo de moderación en su voz.
Al fin y al cabo habían acabado con el depredador máximo de aquel lugar, ningún ser se atrevería a enfrentárseles en aquella guarida. Y ahora, una vez libres del dragón negro, quedaba la parte siempre soñada por cualquier enano que se preciara de serlo: ¡saquear el tesoro de un dragón!
Con 6 puntos menos de Sabiduría está claro que Ulfgar no podía comportarse como de costumbre.
En otro orden de cosas, creo que sería conveniente que descansáramos de una vez, no vaya a ser que haya alguna estúpida trampa y uno (o más) de los PJs muera de manera absolutamente anticlimática.
Y poder recuperar mi fatiga y los hechizos de "alto" nivel tampoco estaría de más.
Asomándose con parsimonia al borde de abismo, Klunuceronte observó con satisfacción que aquel gusano-negro había sido finalmente exterminado. El palo-de-metal que portaba Enrielle-flechamuerte lo había atravesado sin piedad, terminando el trabajo que habían empezado días antes. Klunurig sabía que su intervención no había sido importante en aquella ocasión. Algo ocurría, el depredador llegaba tarde a por la presa, la lluvia no caía del modo en que debía para alimentar al árbol que deseaba crecer. ¿Era aquel su declive, el declive del pueblo bakali? ¿O quizá Krik'k lettz confiaba ahora en otras fuerzas para su misión? Klunurig no lo sabía, pero no importaba. Miraba con orgullo de rinoceronte a Enrielle-flechamuerte. Puede que no comprendiese cómo pedir la ayuda de Krik'k lettz, pero sin duda contaba con la bendición de la diosa.
Observó durante unos momentos desde lo alto, para luego retirarse lentamente. Bajaría por la rampa, y descansaría, por fin, para que las fuerzas retornasen a él y la bendición de la diosa cobrase fuerza de nuevo.
Por mi parte descansamos, no creo que quede ya mucho más que matar en la cueva roñosa esta xD.
Mi idea es dormir en forma de rinoceronte, por si acaso. Entiendo que podría hacerlo (dura 9h) y recuperar mis usos de forma salvaje para el día siguiente, ¿no? Es solo por si nos emboscan, luego ya retornaría a forma normal.
Enrielle tosió, recuperando la respiración. Sin apenas ver, pues la oscuridad era casi total, intentó incorporarse sin éxito hasta que las recias manos de Ulfgar la levantaron. Apoyándose en el sólido apoyo que siempre era un enano, Enrielle miró hacia donde le señalaba aún desorientada por el golpe. Y allí la vio. La Dragonlance, con su tenue resplandor, atravesando al monstruo. Lo habían conseguido. Sonrió a Ulfgar, extrañada de su reacción, pero pronto estalló en risas junto a él.
—¡Por los dioses Ulfgar, estás loco! — le dijo dándole un puñetazo de camaradería en el hombro entre risas. Desde que conoció al enano lo había visto con ese aire de sosegada sabiduría ancestral que su trato hacia él había sido siempre muy correcto, pero ahora lo veía diferente —¿Cómo se te ocurre saltar? Aunque reconozco que si no llegas a hacerlo tú primero yo no me hubiera atrevido.
Al escuchar la voz de Ailaserenth, Enrielle miró hacia arriba y vio su luz agitarse de un lado a otro. Gracias a su luz había conseguido acertar al dragón en el momento clave y no destrozarse contra el suelo sin conseguir nada. No sabía si lo había escuchado de la boca de Klunurig o era que a veces ya pensaba como él, pero ciertamente cuando el Vendaval de Muerte soplaba unido era imparable.
—¡Estamos bien! ¡Lo hemos conseguido! — gritó agitando una mano, y luego se giró hacia Ulfgar —Sí, ayúdame a sacar la lanza, que todavía nos queda trepar de vuelta arriba.
- Bien... - Pensó Kylian satisfecho y orgulloso del Vendaval. - El equilibrio ha sido restablecido. - Fue su sentencia.
Cada vez se mantenía más al margen, siendo su intervención menos necesaria. Incluso su guía, sus instrucciones y sus sermones habían ido menguando en número. El Vendaval de Muerte ya seguía la senda por inercia y los que en su momento no fueron más que meros aprendices, ahora se estaban convirtiendo en guías.
Una lágrima resbaló por la mejilla de la goblin. Su trabajo estaba estaba llegando a su final. El grupo se valía por si mismo y su papel como líder era residual. Incluso cuando no hacían caso a sus sabios consejos, era para seguir la senda.
Aquella lágrima no era por pena de sentirse prescindible, sino porque su obra estaba alcanzando cotas insospechadas. Las gestas que estaban realizando entre todos, habían pasado de ser unas meras proezas de un simple grupo de mortales, a algo que perduraría para siempre. Se estaban conviertiendo en una leyenda.
- Hemos transcendido. - Dijo de forma enigmática el bibliotecario. - Todos y cada uno de nosotros no somos importantes de forma individual, pero en nuestro conjunto... - Sonrió. - Nadie recordará nuestros nombres, pero si nuestros actos. Los recordarán con miedo y esperanza, con alegría y melancolía. ¿Os dais cuenta? - Tomó aire. Allí dentro estaba viciado, pero no le importó, estaba pletórico. - Somos el Vendaval de la Muerte y la Senda guía nuestros pasos hacia el Divino Equilibrio. - Se puso de rodillas y alzó los brazos mirando al infinito. - ¡Oh Gilean, gracias por velar por nosotros! - Agradeció a su dios patrón.
Las siguientes horas transcurren sin sobresaltos, turnándoos para montar guardias tranquilas hasta que os encontráis descansados.
La magia curativa de Kylian y Klunurig se ocupa de restañar la mayor parte de vuestras heridas físicas, pero las secuelas mentales de Ulfgar todavía persisten a pesar de los esfuerzos de la sacerdotisa de Gilean por sanarle. Hace falta una ofrenda adecuada1 para atraer sobre el enano la intercesión que necesite y por el momento no contáis con ella.
Es por eso que Ailaserenth envía frente a vosotros su invisible sensor mágico, con la esperanza de hallar entre los tesoros del dragón un sacrificio que satisfaga al Patriarca de la Neutralidad. De este modo recorréis el laberinto de túneles subterráneos sin extravíos ni más encuentros desagradables y llegáis hasta la guarida de Gurmoil y Umrayr.
Lo que descubrís allí excede con creces vuestros más estrafalarios sueños. Las monedas de acero, plata y cobre se cuentan por docenas de miles, formando brillantes promontorios entre los que asoman piedras preciosas, obras de arte y objetos de toda índole que brillan con las auras de la magia para aquellos que saben leerlas.
Enrielle se ve obligada a extraer tantas mulas como puede de su bolsa mágica y, aun así, necesitáis unos cuantos viajes totalmente cargados para conseguir sacar de aquí todo el botín ganado y llevarlo al castillo. Afortunadamente, encontráis una salida secundaria que conduce de vuelta al pantano sin necesidad de tener que sumergiros nuevamente en las turbias aguas. Esto reduce en varias jornadas vuestro saqueo del lugar, con la ayuda de la carreta y de los guardias elfos que esperaban impacientes vuestro regreso.
Cientos de kilos en monedas y utensilios varios se van amontonando en la planta baja de la barbacana. Y, mientras algunos de vosotros sudáis pensando en el tiempo que os llevará contar el botín, otros os sentís entusiasmados ante la perspectiva de catalogarlo todo y descubrir las propiedades mágicas de aquello que con tanto esfuerzo os habéis ganado.
1: "Restablecimiento menor" no cura a Ulfgar. "Restablecimiento" requiere polvo de diamante por valor de 100 pa. Y "restablecimiento mayor" Kylian todavía no puede lanzarlo.
Tesoro
DINERO: 11708 pa; 39023 pp; 33970 pc (1694 lb ~768 kg);
BIENES: 1x lienzo negro con grietas blancas y rojas + 3x zafiro negro + 1x rubí estrella + 1x corona de plata con ópalos incrustados + 3x perla negra + 1x aguamarina + 1x tapiz de lino con una escena de dragones sobrevolando una ciudad + 3x pintura al óleo de una familia noble de enanos + capa de terciopelo con plumas de águila + 2x tapiz de lana negra de un bosque + 2x estatuilla de mármol de un atleta minotauro + 3x perla blanca + estandarte heráldico solámnico + 2x perla argéntea + 2x perla dorada + 2x jade + 2x estatuillas de bronce de un caballero solámnico + 5x ónice + armadura completa dgc de un caballero de Neraka + daga de plata dgc + espada larga de hierro frío dgc + símbolo sagrado de plata
OBJETOS MÁGICOS (sin identificar): 2x anillo, 1x varita, 8x rollo de pergamino, 1x hacha de guerra enana, 1x flauta, 1x gafas, 10x poción, 1x armadura de cuero tachonado, 14x flecha en un carcaj