Partida Rol por web

Ahora si te has presentado. Dice Rolan dándose la vuelta y volviendo a su tarea de buscar plantas. En efecto es una hora extraña para buscar plantas, a no ser que  busques hibiscos negros, una extraña flor que solo florece durante las noches de deshielo y al alba se marchita, perdiendo todas sus propiedades. En cuanto a  tu pregunta, encajo bastante bien con Nono y Nex, todos somos variopintos de un modo u otro, al menos ellos no juzgan a la gente por ser diferente como los demás. Acompaña sus palabras con una mirada inquisitiva por encima de su hombro, reprochando las palabras de Sigmus hacia sus compañeros

Sorprendido por la respuesta, Sigmus cruza los brazos detrás de su espalda con la mano derecha cerca de la empuñadura de su daga. Juzgar por ser diferentes? Jamás haría tal cosa, en mis años de trotamundos he visto casi de todo ya, pero he de reconocer que nunca me habían pedido cortarme la palma para beber mi sangre y chuparmela como si fuese una manzana recién asada. Dice sacando su palma izquierda y observándola con diversión. Eso ya, es otra cosa. Pero bueno visto que en un erudito no he encontrado cordura marcharé a ver si tengo más suerte con los espadachines. 

Sigmus se da la vuelta para irse cuando vuelve la cabeza para mirarle con aire de tranquilo pero muy atento a su reacción y dice Rolan Suerte buscando esas cosas negras... Y a Serenade. Si te visita le das saludos 

Ante las acusaciones de locura y el tono sarcástico burlón de las ultimas palabras de Sigmus, rolan intenta mantener la calma (Frialdad)

"Calmate, el no tiene la culpa" piensa para si mismo

"MUCHO CUIDADO A QUIEN MENTAS, MORTAL..." dice Rolan con la voz un tanto cambiada.

¿Acaso me esta amenazando un simple herborista? Contesta Sigmus mientras se aleja del lugar

¿Acaso me esta amenazando un simple herborista? Comenta Sigmus mientras comienza a desenfundar la daga alerta a cualquier movimiento extraño que haga Rolan, dispuesto a defenderse sin dudar hasta donde haya que llegar.

"Mierda, eso no ha ido como pensaba, aunque creo que pese a no haber encontrado un potencial aliado he descubierto un posible enemigo. Tengo que hablar con Válgueras inmediatamente" Va pensando Sigmus mientras se dirije de vuelta a la posada

Incapaz de controlar la situación ante la arrogancia del caballero, Rolan es invadido por la furia que siente  ante la mención de la tal "Serenade", Rolan encarna al León blanco, Arturia y se lanza en un ataque sorpresa por la espalda.

Pese a que Rolan trata de pillar al caballero desprevenido este se encontraba preparado para un posible enfrentamiento. Aunque el enorme Leon blanco en el que se ha convertido Rolan consigue alcanzarlo Sigmus consigue zafarse del agarre de la bestia.

Aunque el Leon le haya atacado, es evidente para Sigmus que el ataque no pretendía causarle daño, ya que las enormes zarpas podrían habérsele clavado en el pecho y el animal las ha mantenido retraídas.

El león blanco da vueltas alrededor de Sigmus, mirada fija, cabeza alineada con el cuerpo, la cola latiguea de un lado al otro con violencia acompaña sus movimientos rugiendo hacia el caballero, tras el rugido con voz grave e intimidante, habla;

No sabes nada guerrero. Pide disculpas por tus palabras,  o el siguiente asalto será el ultimo para uno de los dos.

Cuidado gatito no te vayas a pinchar. Dice Sigmus sacando la daga que lleva escondida y poniéndose en posición e defensa, por si vuelve a atacar, mientras sigue alejándose sin quitar ojo al león en el que sea transformado Rolan

Sigmus no es una persona que se amedrente con facilidad, pero aquella bestia era algo fuera de todo lo que había visto hsta entonces. Una crin blanca como la luna, dientes y garras del marfil mas perfecto y afilado que hubiera visto nunca. Se da cuenta en seguida que una resolucion por la espada no saldrá bien para él. Además, siendo unanpersona tan perceptiva como es, tiene claro que algo extraño le pasa a Rolan. Unnretirada a tiempo es en muchas ocasiones una victoria.

Por su parte Rolan, pese a no encontrarse en plena consciencia, se da cuenta de que Sigmus es un adversario temibley que tal vez no se haya acercado aqui con intenciones perversas sino todo lo contrario.

El León blanco se gira y se pierde entre los arboles... 

Al cabo de un , cuando se calma completamente, vuelve a la taberna y se mete en su habitación

Sigmus una vez que ve desaparecer al Leon Blanco aun con la daga en la mano se dirige alerta hacia la posada "Tengo que hablar con Válgueras, donde nos hemos metido"

Nono observa la reacción de Nex. Aleja la mano de Nex y se la acerca a un palmo de surostro para escudriñar el contenido de su mano. Tras unos segundos escoge delicadamente uno de los pelos de su mano, cogiéndolo con precisión y extendiéndolo lentamente hacia Nex.

-Con...esto...será suficiente.

Nex coge los pelos que le ofrece Nono y se los guarda en una faltriquera.

Con la cerveza a medias, se levanta y dice a sus compañeros:

- Mañana partimos, allí a donde vamos puede haber muchas trampas, así que comprad las herramientas necesarias para desarmarlas. -se gira hacia Válgeras - Te espero arriba.

Se despide y se marcha hacia la habitación.