Partida Rol por web

El sorpresivo y mal planeado ataque de los orcos le llamo la atención. Un par de noches atrás todos habían sido atacados individualmente y en cercanías de la ciudad y ahora nuevamente. Seguramente estaban probando sus fuerzas para algo mas grande o capaz fueron por pura casualidad.
- Debemos estar preparados, capaz estamos llegando a algún campamento orco. 
El busca en el orco que mato para ver, al igual que su compañera, si poseía algo de valor o que les dijese que esta ocurriendo.

Al ver lo facil que fue destruir ese grupo de orcos Lezard queda algo intrigado, escuchando las palabras de Khalam asiente.

Kross regresa dice y espera nuevas instrucciones de Atara...

Los orcos no poseían nada que indicase algo importante. Parecían simples aficionados, o simples orcos que pasaban por allí. No eran interesantes, y a pesar de que Atara encontró rastros sobre el lugar de donde procedían, las huellas de los caballos que estaban siguiendo se dirigían en otra dirección.

Y para eso habían sido contratados, debían investigar el camino que estaban siguiendo*.

El resto de aquel día todo fue con calma, no parecía que hubiera ningún estúpido orco más al que enfrentarse, y el día concluyó sin más incidentes. De nuevo era la hora de buscar un hueco donde acampar y dividir las guardias. Llevaban dos días de viaje, y seguramente aún les quedaban unos cuantos.

- Parece que hemos llegado al ocaso de un nuevo día. ¿Volvemos a tomar la guardia como la noche anterior? Pregunta a sus compañeros.
- Esta vez cuando nos despierten sean mas tranquilos, o no sabemos como podemos llegar a reaccionar.
El día había sido largo. El combate con los orcos fue lo único entretenido en todo el viaje, por lo que el chaman estaba cansado pero solamente de correr tras un rastro.
- Como vamos a hacer con los alimentos en esta jornada? No nos quedan muchos y debemos racionalizar. Por mi parte voy a comer la mitad de la ración para guardar para el desayuno mañana.
 

Lezard miró a Khalam cuando este menciono lo de la comida, si no hubiera sido por Atara habría sido un día bastante largo, afortunadamente esta encontró comida par todos, ojala tengamos la misma suerte para mañana pensó, a pesar de que tenía algunas monedas de oro estas Lezard no se las podía comer, deseaba terminar este trecho cuando antes...

Kross afortunadamente por su parte ya había comido y eso era alentador sin duda alguna...

Tras unos breves segundo de silencio, Lezard pregunto a Atara, Atara tu sabes localizar presas? te lo pregunto en caso de que nos toque ir de caza, yo te puedo ayudar sin problemas a derrotar a cualquier presa practicamente... Creo que si el viaje se nos hace largo nos tocará cazar, aunque para ser sinceros ya a mi se e hizo, esto lo dijo dando a entender que su comida ya se había terminado...

Bien, esta vez me toca primera guardia entonces.

Así se adjudicó la que creía que era la mejor guardia.

Bueno, todos podemos intentar cazar, pero seguro que somos unos aficionados al lado de una experta.

Mirando a Atara imitó el movimiento de quitarse el sombrero.

Pero por supuesto ayudaremos en lo que podamos, es nuestro estomago al fin y al cabo.

Por fin había llegado el momento de descansar, llevar todo el dia caminando y matar a un orco era algo agotador, divertido, pero agotador.

Mientras que se preparaba para dormir, colocando otra vez los abrojos en su zona, escuchó la conversación de sus compañeros, alegre al no estar sola con Fenrir en estos paramos.

-En principio preferimos ir Fenrir y yo, por mi experiencia, los que no saben cazar suelen ser mas un estorbo que una ayuda.- No lo dijo en tono de burla o a modo de insulto, lo intentó explicar de la manera mas cordial posible.

-Pero si no hay manera de encontrar una presa quizás podamos hacer entre todos una buena batida,- les dijo mientas devolvía a Jairee, con una sonrisa, el saludo con el sombrero

Los compañeros de Xan hicieron lo mismo con el resto de cuerpos, para consternación de todos no llevaban nada interesante respecto a la información que buscaban. Las cuatro botellas que portaba el orco que registró estaban, para su alegría, debidamente etiquetadas; cuando elevó la vista vió que los compañeros habían encontrado lo mismo en los otros cuerpos, las sacudió en su dirección para que las vieran y las guardó en la mochila, al igual que la munición para honda.

-Lo repartimos durante la cena. -fué el comentario que hizo al respecto del botín.

La semielfa apartó el cuerpo del camino con el pié y, acomodándose la mochila de nuevo a la espalda, siguió al grupo y cuando el sol se ocultaba pararon para pasar la noche en un terreno que a Atara le pareció conveniente. Ante la pregunta de Khalam de hacer las guardias iguales iba a afirmar aunque realmente le daba igual, pero Jairee se adelantó y pidió la primera, con un encogimiento de hombros aceptó el cambio y miró al guerrero.

-¿Sigues queriendo la segunda? o mejor duermes del tirón y ya la hago yo.

Ella creía que, puestos a rotar, era mejor que cada día le tocase a uno la 'peor' guardia pero tampoco se iba a ofrecer para hacerla. El tema de las raciones era algo que a ella no le había preocupado desde que salió de su tribu hacía ya varios meses, pero se acordó que los anteriores compañeros también tenían problemas del mismo tipo. Khalam dijo de comer la mitad para guardar para el día siguiente, ella no podía hacer eso, miró la bolsa con lo que le quedaba de alimento para el día y elevó la cabeza al escuchar al mago.

-Si quieres podemos compartir lo que tengo mientras encontramos otra cosa.

Dijo acercándose y ofreciéndole el saquito de cuero donde metía la mano cada vez que tomaba su comida, esperaba que Atara encontrase algún rastro o algo que comer para complementar la dieta de esa noche y para los días que les quedasen, no era nada bueno avanzar hacia lo desconocido con el estómago vacío y viendo la constitución del mago necesitaba comer. Asintió a la respuesta de Atara de que estaba acostumbrada a ir sola y buscó un buen sitio donde estirar su saco y dejar sus pertenencias*.

- Yo haré la guardia del medio si quieren. Le dice a sus compañeros.
Khalam en la anterior había hecho la primera, por lo que esta vez le tocaba la última o la segunda.
- Yo todavía tengo un poco de mis provisiones. Pero fue una negligencia de mi parte, partir y no estar preparado para esta situación. No volverá a pasar. Dice el chaman.
Ahora solo le faltaba comer un poco y acostarse a dormir para levantarse a cubrir el segundo turno de guardia.

La semielfa cogió la mitad de lo que quedaba en el saquito antes de dejárselo al mago para que cogiese el resto, comenzó a comer y asintió a las palabras del humano, ella haría la tercera guardia por lo que se preparó para irse a dormir bien pronto pero antes de acomodarse le contestó.

-Cuando partes nunca sabes cuántos días estarás fuera ni qué puede ocurrir durante ese tiempo, nunca se está preparado para todo.

Con sus pertenencias recogidas y a mano, se tumbó en el saco abierto y se quedó mirando el cielo estrellado, por eso no le acababa de gustar dormir en las ciudades, desde ellas apenas se podían apreciar las estrellas y su belleza eterna.

Una vez que comió la un poco de su ración de la noche y se fue a acostar rapidamente. Pues el turno que el tenía era el peor de todos e iba a necesitar estar lo mejor descansado para el día siguiente. Sacandose la armadura y dejando el escudo y su hacha a mano se acostó a dormir. Observando a Jairee
- Despiertame cuando sea mi turno. Nos vemos.