Partida Rol por web

Era la notisia que tol pueblo ejperaba desdace mogollón de tiempo. La que se lió cuando en la tele del Paco el del Bar pusieron la noticia fue mu gorda. Paco el del Bar era l'único que tenía tele, y tol mundo s'arrejuntaba ahin pa ver el nodo y el furbol los domingos por la tarde, qu'era cuando el Paco hacía más negocio. Los paisanos brindaban por las calles, se tiraban sacas de harina y chorros de vino con las botas de puro contento hasta que aquello recordaba la Tahona de la María cuando amasaba el pan por las mañanas. Llamaron a una orquesta, sacaron las viandas, hicieron matanza... Mae mía... Si hasta bajaron los rebeldes que s'escondían en las montañas a celebralo. Y cuando más contento estaba tol mundo, un zagal va y pega una voz.

-¡Los grises! ¡Hay grises en el pueblo! Estaba meando y escuchao a dos hablar de matar a tol mundo pa la gloria del régimen. ¡Aquí hay grises infiltraos! ¡Hay q'apedrealos!

¡A ver q'es lo que se cuece aquí! ¡Que mi persona s'anterao que unos grises han sio los q'an matao al zagal este de la Evelina mientras 'tabamos toos en la berbena! ¡Que tan en el pueblo! ¡Q'uno de los d'aquí es un traidor! 

¡A ver si me via tener que cabrear y sacar l'escopeta!

Por el bien común de to loz presentez, bajé al pueblo pa`obzervá lo que pazaba por allí. Lazúrtimas noticias, dejaban bastante indecizo el futuro de la nación. Como buenamente pude, me pacé er peine por los cuatro pelo que me quedaban, dándole, como decían los moernos, profundidá. Las dos perlas que tenía por paletas, refulgugieron cuando me miré al espejo. El pueblo parecía alegrazarce de lazúrtimas novedades. El bar estaba lleno y no había más que ve lasz cara de los presente. 

Cuando escuché la voz del zagá, la palabra mata me congeló las partes y por poco hizo que no me cagara encima. La Bicho, ya estaba zacando sus cojone y yo cada vestaba más cagao. 

-La mare que me va parí otra vé. ¿Qué dice que ha pazao? ¡Los grice! ¡Los grice! ¿Dónde está la autoridad cuando zele necezita?

El cabo Fresnedillos salió en ese momento a calmar los ánimos y a poner orden en la situación como era su obligación...

Pero amos a vé... Haiga calma... en primé lugá... Aquí no hay grises, la única autoridá soy yo, si desde la capital se hubiera mandado a la policia armada me habría enterao...

En desegundo lugar el Caudillo no ha muerto, eso es una estrategia despistatoria de su cuerpo de seguridad para que no le ataquen los terroristas, pero el caudillo sigue vivo y nos gobernará aún muchos años que no sus enteráis... ¿Quien iba sino a mandar aquí...Carrillo o el JuanCarlos ese? 

Y por último, aquí no se muere naide sin mi permiso... ¿esta claro?... a ver, alma cántaro, ¿Quien se ha soponciado y donde?

-¡Que no t'enteras Telefósforo! -El zagal a pesar de tó, seguía teniendo ganas de dar por saco al cabo, que decían que si lo vestían de blanco y le pintaban la cabeza de colorao paecía un cerillo mismamente, to delgao como estaba y casi pelón como una sandía recién cuajá. Con tó, el zagal se pone serio...

-Yostaba meando detrás de la zarza aquella cuando oí a dos parroquianos saludarsen así como l'acen los militares. Y decian questa noche iban a matar a uno del pueblo... Y asina ca noche. Hasta que no quedara ni uno "desos malditos rojos"

Si, si gegando a la nave de pollos me encontre las puertas abiertas y me desapodecieron los pollos que desastre. ¿habran sido los grises?

Urelio se levanta del pajar, aun tiene la boca con restos de vomito y la colilla de un celta corto pegada a la frente, se enjuaga la cara con un pozal y le da un beso a Margarita, su oveja preferida, se enciende un celta y camina hacia el tugurio de bar, se pide un desayuno tipico continental "usease" carajillo, sol y sombra y un chorizo con una miaja de pan.

He oio grises... a mi abuelo y su borrico lo fusilaron en la guerra, ya vez tu por llevar cuatro liebres y una cuñica de queso,esta gente son....garraspea de una manera muy molesta y ensordecedora,escupe aal suelo algo verde con restos de pelo de oveja y se rie.

Iralo... pio pio pio... a este le echamo arpinste y calorcico y en dos dias abre los ojicos jajajajaja, coje unas migas del pan que acompañaba el chorizo y las lanza al escupitajo verde como si alimentara a las gallinas

Pitas... pitas... jajajaj, la Matilde se mea con esto cuando lo hago en el puticlus

- Maae mía, mae mía!! Grises? Grises everywhere?? Enherio?

Decía la maestra del pueblo, que hasta hace poco había estado viviendo en el extranjero - Zagalico y no has reconocido a los que estaban hablando??

-Po no, nostaba cerca y no m'atrevío a mirá. Quende fijo que si me pillan m'escamochan ahí mijmico... Tengo miedo... En ocasiones... Veo Grises...

Enduspué de ir a meá al pantano, como cada mañana, llego ar pueblo y tor mundo arborotao - pero, ¿c'a pazao aquí? - pregunto ar populacho, aunque por las carah de ca uno, y lo que punian en er telefunken, me lo pueo imagina - ¿ke za muerto ya el jo'puta eze? - digo con alegría, aunque consigo escuchá lo que endise ese chavea - entonse, ¿hay unoh marnasío en el pueblo? - pregunto - y esa voh, ¿eran hombre' o mujeren? - miro uno a uno a los que nos habíamo' arrejuntao en el ba'.

El Telésforo estaba allí, haciendo lucí su autoridah... y lo miro con los ojillo' entornao' - que cara tonto ha' puehto ziempre y que poco ma' fiao de tí - agarro mi garrote, por lo que puera pazá.

La Petra salio del arrozal con las bragas en los tobillos y la falda remanga, mientras el hijo del churrero, que era gitano y feo, se subía los pantalones y se marchaba con culo peludo de allí, por miedo a los grises, ella se acerco ya recompuesta a donde todos gritaban sin descanso.

-Ay mae... ay mae... ¿Que e eso de grise? ¿Los que van com porra no solo en los pantalones verda?-Miro al Segismundo que ya tenia el garrote entre sus zarpas y se tiro a su espalda.

-Segis, ¿Tu ere valiente verda? No va adeja que a tu prinzeza la apaleen esa autorida.-Le hizo ojitos, mas de uno hubiera tenido arcadas.-Pue' no se muere el calvo y ya vienen a moleta... Antes se viiva mejo.-Como buena casquivana se arrimaba al árbol con mas sombra.

Los habitantes de la aldea comienzan a llegar a la taberna... En un momento entra la maestra... esa mujer con tanta clase, con tanto estilo... esa mujer por la que el cabo Fresnedillos lo dejaría todo...

Primitiva.., a sus pies señora marquesa...digo maestra. dice el cabo con su más exagerada reverencia. Usted no se preocupe que este servidó' de la ley y el orden no va a dejá que a naide le haga uste' ningún daño, que para eso está la autorida', para defendé' a las fuerzas vivas de este pueblo y su persona.

Despues de alagar los oidos de Primitiva, se dirige ha todos los presentes en la taberna...

Vamo a ve' señores, yo no digo que limpiar de rojos el pueblo no sea malo... y de hecho me pustulo como utoridá competente pa' ese efecto... pero no es necesario apiolá' a naide. Con meter a los posibles rojos unos días en el cuartelillo apañamos el asunto...

No será que aquí algunos tiene trencillas personales? Y quieren usar el buen nombre de la policia armada para de arreglá' sus asuntos...?

Miro de soslayo al Segismundo que ya está cargando la garrota... Segismundooooo... que te veo!! A ver si vamo a tener que empezar por tí... que yo me sé que tu eres de los que no soportas a medio pueblo...

Dirijo mi inquisitoria mirada hacia el acusador público...

A ve' Zagal vamo a de comenza el interrogatorio... ¿hace cuanto rato escuchaste a esos dos pánfilos cospirá para alterá el sagrao orden que tanto ma costao lográ..? ...

Y ahora al resto ¿donde estabáis cuando el cara sartén este vió a esos dos grises? Po si alguien se lo pregunta, Yo como todo ustede saben estaba aquí en la taberna viendo el noticiario...

-Pos un ratico... mia tu el espabilao del cerillo. ¿Quesque m'as visto cara de señorito de la capitás? ¿Que te piensas que tengo un reló desos roles d'oro pa sabé a q'ora ha sio sastamente? Tustas tonto, cerillo... Pos no, no se si eran d'ombre o de mujé, pero usté discuspe, su señoría -Ahora l'está hablando al Segismundo- Que la prósima vé q'oiga dos asesinos hablando pararé a preguntales como se llaman, ande viven y a quién se van a cargar en primé lugas... No te jode la panda listos estos... Hala, me vi a llevar las cabras al monte, que no se van a llevar solas y a los animalicos les trae sin cuidao si el calvorota ese sa morío o no.

Banjando del prau de oyen voces de la casa de Paco, y la tele no ha de ser que no da pa tanto.

¿Qué ostias pasa? Se pregunta asín, como hablándose a uno mesmo. Se entra a la taberna y oye la discusión.

A ver si nos entendemos, y que me entere bien, Dice a berreo limpio ¿Que Franco ha espichau? La hostia, no pué uno salir ni una semana al pasto sin que se vengan novedades. Y lo de los grises... Muchas tontunás dice el mocé este. Ya se habrá metido otra vez en las barricas del Paco y anda más cocío que la madre que la parió. Dejarsus de ostias. Paco, ya mestás poniendo un carajillo.

Se sienta en una mesa gruñendo.

Y de ser, pues a tomal pol culo, cojones. Al campanario con ellos. ¡Cagonel copón!

Petra que no perdia tiempo pa'meter mano en el culo delo Sergis, miraba alarmada y cejijunta, como el niño daba largas y se daba a la fuga.

-Peo Zagal a dondes vas ir tu ahora, que si lo quedice e sierto, tamos en peligro de muerte o peor. Cabo, no le deje marchar al jabato que pue se el siguiente despeñao por el cerro.-La Princesa pueblo, acostumbra a creerselo too, ya estaba medio a pucheros pensando en los grises y sus cuernos, clavandosela por todos sus orificios...

Se limpio la baba y siguio hablando:
-Algo abra que ace, ¿Que no?

-¿Pos que se le va a acer? ¡Vamo'a pillar por los pieses a los grises y de cabeza desdel campanario! No poemos dejá que nos pillen con "las bragas bajás"!- Mira de reojo a la Petra

Cuando la Bicharra hablo de bragas en el suelo, la Petra se metió mano al chumino, preopa porque igual se habia olvidao las susodichas en el arrozal, por suerte no era asin, las tenia en su sitio.
-Menuo susto, oyes... Que etas eran nuevas, compraas en la capita...

En mis tiempo esta cosas no pasaban, dice haciendo amago de quitarse la correa, dos güenas fustigás ar zagal y vera como recuerda rapidico, vente pacá tunante resabiao, vente y dinos quien es grih o vas a ir calentico a la cama, que te voy a dar y gritío como no vengas que te voy a dejah  lasoreha en carne viva.

- Pongahe tranquilo Elurelio y deje hacé su trabaho ar Fresnedillos que se sabe lo que hace - dice la maestra mientras le pone ojitos a la autoridad del pueblo. 

Al escuchar las palabras de la Primitiva, a la Bicharra casi le entra un ataque de risa. Se pudo contener y soltó por lo bajini-¡Já!¿Pero que va acéh el señor cabo? Si no hace nah que no le digan de antes desde la capitá...-