Bueno, podemos decir que es el Azor Ahai y ahora dime ¿quién es el Azor Ahai? ¿quién es el último Baratheon? -os pregunta a su vez Lord Gendry -no eran intenciones distintas las que nos hicieron luchar a vuestro padre y a mi junto a Lord Stannis si no motivaciones. Vuestro padre luchó junto a él por ser el último Baratheon, su señor. Yo luché bajo su servicio por ser el Azor Ahai.
Deja unos segundos las palabras en el aire para que te empapes con ella -Imaginate que Melisandre hubiera actuado contra Stannis ¿crees que habría ganado? Te respondo con sinceridad, mi corazón me dice que no. Los leales a la sangre habrían seguido junto a Stannis y los leales a la fé se habrían dividido. Al final Melisandre tendría menos hombres y perdería. Lo mismo ocurre ahora con Melara salvo que ella lleva en su interior la sangre Baratheon.
Lord Gendry se lleva la mano a la cabeza con irritación -Que estúpido he sido, ese fallo derramará mucha sangre. Sin embargo Kyllian, quiero que te preguntes algo ¿crees que Melara actuaría de esta manera si está sóla? ¿no crees que ella sabe que si hace daño a mi hijo alzaré a todos mis hombres contra ella y no saldrá con vida? Melara sólo puede dominar la Casa de la Luz si mata al resto de los Baratheon, a mis hijos y a mi misma. ¿Se arriesgaría a hacerlo todo ella sóla?
Lo primero que me viene a la cabeza es una barrica de vino y yo metiendo la cabeza hasta ahogarme... Nunca me he visto en batallas políticas de este tipo, y nunca las he querido. Para mí siempre ha sido mucho más fácil luchar, pelear sobre el barro...
-Pero Lord Gendry, si es la religión la que fundamenta la lealtad en vuestra casa, ¿no podrá llegar el día en que ya no haga falta un Baratheon para gobernarla? ¿No podrá suceder que los hombres sigan a un Azor Ahai nombrado por los sacerdotes a su conveniencia? -tantas cosas que decir y la sensación de estar caminando sobre una cuerda sobre el vacío-. Veo razonable la posibilidad que indicáis de que alguien esté con ella, pero creo que subestimáis el poder que ella y sus sacerdotes pueden haber alcanzado en vuestra casa...-le miro a los ojos con la esperanza de poder llegar al lugar en que habite su orgullo Baratheon y no espíritu de acólito religioso-. Y creo que subestimáis el poder de vuestro propio nombre, Lord Gendry Baratheon. Señor, veo loable vuestro deseo de paz, pero no todos van a desearla con tanta fuerza como vos -pienso en Lord Stannis, el también sacrificó en pos de la paz, fue engañado y murió torturado por la culpa y la rabia-. El hombre que quiere la paz tiene que estar preparado para la guerra, Lord.
Me cruzo de brazos y le doy unos instantes para que piense en lo que he dicho.
-Creo que un día la gente os siguió por ser Gendry Baratheon, y creo que podrían volver a hacerlo en cuanto les mostréis el camino, y Melara os ha ofrecido una buena oportunidad para ello -vuelvo a pensar en Lord Stannis, a quien traicionaron, en Ser Boros, y en la misión que me encomendaron.
Una pregunta. Yo tengo en mi cabeza la idea muy clara de que Ser Boros me encargó recoger información de la casa baratheon, la casa de la luz y matar a Lord Gendry. Lo de Lord Gendry me tiene un poco despistado, porque lo recuerdo y he estado buscando en escenas anteriores y no encuentro el mandato por ningún lado.
¿Es verdad que me mandaron matarle o me he flipado yo enormemente?
Un saludo.
Sinceramente al tener tantas escenas no puedo estar seguro pero no recuerdo nada de que te enviara a matarlo.
Si tu no encuentras y yo no lo recuerdo debe ser que te has metido mucho en tu personaje y en sus ganas de venganza :)
Por tanto quedate sólo con las dos primeras órdenes. Esta noche o mañana te actualizo.
Yujuuuu!
Vale, vale, gracias. La verdad es que estaba en tensión. Me daba un poco de pena tener que matar al buen hombre.
De acuerdo, no te preocupes, que hoy llevamos un ritmo intensivo.
¡Un saludo!
El maestre te mira algo perplejo pero nuevamente su actitud se relaja y te habla del tema como si a él en el fondo no le importara -En mi humilde opinión los hombres de tu padre no se han hecho con el control quitándole a él de enmedio. Corren muchos rumores sobre la escasa simpatía que vuestro hermano y tu sentís por el dios en llamas y sus seguidores. Puede que sólo estén castigando a vuestro hermano por su falta de fé. Esos hombres siguen al último Baratheon, la estirpe más noble que ha existido, y al nuevo Azor Ahai, sobrino del anterior, el guerrero legendario. Mucha sangre y mentiras deben derramarse para que hombres tan fanáticos y leales den la espalda a vuestro padre.
El maestre coge un bote con un líquido transparente y comienza a rociaros con él, bañando vuestro cuerpo de un aroma putrefacto y agrio -Bueno, vais a morir de una enfermedad conocida por los hombres de Asshai como la peste. Vuestra carne se descompondrá y caerá, formando llagas y escamas y vuestro olor corporal no será agradable. Todo ello gracias a estas pinturas y ungüentos -dice señalando a sus potingues y frascos -es una enfermedad muy infecciosa por lo que la gente evitará acercarse a vos, algo que nos viene muy bien.
Puede que tengais razón y esté viendo asesinos entre las sombras en lugares donde sólo hay oscuridad. Tal vez Melara sea sólo una estúpida con ansias de poder -os contesta el Lord meditando.
Sabes que, cuando me nombraron Azor Ahai no noté nada extraño, no sentí una fuerza que me renovara ni un fuego que me diera más poder, nada. Simplemente me levante siendo Gendry y me acosté siendo el Azor Ahai, ese es el único cambio que experimenté. Ese y lo que la gente sentía por mí. Tal vez sea hora de volver a dar más poder a mi sangre, a mi antiguo yo. Me he acomodado demasiado siendo un lider religioso cuando soy más bien un guerrero. Debería ser la unión de ambos, un templario -proclama animado.
Escuchadme atentamente, quiero que hagais exactamente todo lo que os pida, aunque contradiga a las órdenes de mi hija. Hacedlo por su bien y por el de la sangre Baratheon, por el honor de vuestro padre y el vuestro, por la lealtad que le debeis a mi sangre -os pide.
Niego con la cabeza a las palabras del anciano. Nuestras perspectivas son tan opuestas que jamás vamos a llegar a entendernos, y en cualquier caso él ni siquiera es miembro de mi Casa así que tampoco voy a hacer el esfuerzo. Estoy demasiado impaciente por morir y largarme de aquí de una vez...
-Fantástico... -respondo a la explicación del maestre-, ya estoy acostumbrada a que la gente me evite así que no os cortéis con el "perfume" -sonrío pero no oculto una mueca de asco. La verdad es que huele horriblemente mal y no me hace ninguna gracia que me convierta en una fétida pústula. Podría haber elegido la tuberculósis y sólo tendría que haber tosido sangre... Seguro que esto ha sido idea de mi padre. Qué mente tan retorcida tiene cuando se lo propone...
Arqueo las cejas y me paso la mano por el mentón. No sé cómo lo he hecho... Me enviaron a espiar a este hombre y entrar en contacto con su hija; ahora por lealtad he de contravenir mi acuerdo con su hija...
-Lord Gendry Baratheon puede contar con mi lealtad, pero no el Azor Ahai -le digo claramente. Intentar ser honesto en una situación como esta no es nada fácil-. Vuestra hija tiene toda la fuerza del ciervo, eso lo sabéis, con todo su celo puesto en proteger el legado Baratheon, que más justamente recae sobre vuestros hombros que sobre los de otros... -dejo caer intencionadamente sin mencionar a Tommen-. Es sólo por ese hecho que podéis contar con mi lealtad y que haré cuanto esté en mi mano para garantizar la seguridad de vuestra hija: porque sois los descendientes de los Baratheon. Os he hablado con claridad, Lord Gendry, ahora que os he dicho estas cosas podéis confiarme esas instrucciones si lo consideráis apropiado.
Me quedo de pie observando a Lord Gendry. Aguardando sus palabras o su silencio.
Es realmente repugnante -afirma el Maestre dandoos la razón -es una de mis creaciones. Siempre he querido crear la esencia más perfecta y, para ello, siempre es bueno encontrar el aroma más apestoso, más asqueroso, para comparar sus virtudes y composición. Ya sabes, el bien y el mal, la oscuridad y la luz, el buen olor y el mal olor -dice sonriendote mientras termina tu trabajo.
Estás lista, permanecerás un día en las estancias de vuestro padre mientras el rumor corre por la fortaleza y mañana morirás para así poder partir, más libre y autónoma, aunque con mal olor -concluye.
Lord Gendry asiente satisfecho y comienza a contarte sus planes -Mañana mi hija será dada por muerta en un pequeño funeral en las entrañas de la fortaleza. Algunos líderes y nobles importantes se pasarán a darme sus condolencias y así quedará asentado el engaño. Posteriormente, esa misma tarde, saldreis junto al falso cadaver de mi hija para darle un digno entierro en su tierra natal, acompañados por algunos miembros de las hermanas silenciosas.
Saca un pequeño mapa que extiende en la mesa de la habitación de su hija -Recorrereis estos pueblos durante vuestro viaje. No debeis separaros en ningún momento de los hermanos silenciosos y mi hija debe permanecer en unas habitaciones privadas junto a su protector personal, tu. No deben ver que mi hija sigue viva bajo ningún concepto o nuestro plan quedará al descubierto.
Señala un pueblo en concreto con su dedo y sigue su explicación -Aquí os reunireis con mi hijo y con algunos siervos de cuya lealtad confio completamente. Robert habrá sido liberado por anterioridad por varios amigos y siervos y se habrá marchado a eximir sus pecados a Desembarco del Rey, o al menos eso dirá mi misiva.
De esta forma, una vez los hermanos estén reunidos, podreis despedir a las hermanas del Silencio y marchar juntos hasta este puerto -dice terminando de señalar todo el recorrido en un pequeño poblado pesquero -allí os aguardarán unos navios de unos nuevos amigos y podreis actuar de una forma u otra. Durante todo el viaje os iré mandando misivas a los pueblos para comunicaros las nuevas o, en su defecto, así lo hará el Maestre Tyrell. No contesteis, no hagais nada que resulte sospechoso.
Lorg Gendry guarda el mapa y os lo entrega -Kyllian, la paz de Poniente me ata a Desembarco del Rey pero mi vida no tiene sentido sin mis hijos. Debes hacer este recorrido dándole a entender a mi hija que tu eres el creador de este pues, si descubre que yo estoy detrás, lo rechazará sin pensarselo dos veces. Ella piensa que soy un fracasado, un inútil débil y estúpido. Se que confía en tí. Tu puedes ayudarme a salvarla. Si, si, -tartamudea Lord Gendry emocionado, con los ojos levemente llorosos -si me ocurre algo dile a mis hijos que siempre los he amado y que les he perdonado todo el daño que puedan haber hecho. Espero que me recuerden con cariño y no con desprecio.
Miro sorprendida al anciano maestre.
Qué humor más negro...
-Gracias..., supongo. ¿Puedo haceros una pregunta antes de que os vayáis? ¿Por qué estáis ayudando a mi padre? No sois miembro de su Casa, no tendría que importaros lo que nos ocurra... -me detengo y toso. Argh, creo que voy a morir de verdad si tengo que soportar este olor un día entero...-. Siento lo que dije antes sobre Daenerys. Ojalá estuviera viva para que nada de esto hubiera pasado.
Me quedo unos instantes mirando a Lord Gendry.
-No creo que vuestra hija piense esas cosas de vos, creo que ansía ver al gran Gendry del que ha oído hablar -siempre me ha parecido difícil de creer que los hijos guarden tan malas opiniones de los padres como Lord Gendry atribuye a su hija-. No os preocupéis, Lord Gendry, por la lealtad que me une a los Baratheon os juro que me haré cargo de la seguridad de vuestros hijos y de defender lo que pertenece a vuestro linaje; sois el hijo del viejo rey Robert. Eso es mucho más de lo que los advenedizos que hoy se alzan pueden decir... Y descuidad, si pasara algo yo me encargaré de que Sylven y Robert conozcan las palabras que me habéis transmitido.
Extiendo la mano para coger el mapa en el que Lord Gendry me ha explicado su plan.
-Todos tenemos un destino, supongo; la madeja está tejida y sólo nos queda ver por dónde discurre nuestro camino y afrontarlo con valentía -vuelvo a mirar con franqueza a Lord Gendry. He de reconocer que al margen de credos, el fondo de este hombre es noble-. Nunca os he conocido hasta estos días, y me han bastado para ver que tenéis fuerza y nobleza, señor.
Porque vuestro padre es el Azor Ahai, el elegido del Señor de la Luz, el único dios verdadero -te dice el maestre muy serio.
Tras unos segundos suelta una pequeña risotada y te mira alegremente -Es broma mujer, os ayudo porque mi gran amigo Arden Swan, el maestre de vuestra casa, me habló muy bien de tu padre y de vos y me pidió que os ayudara en lo necesario.
El maestre Tyrell te toca un par de veces el hombro y se despide de vos -Mañana será vuestro funeral y esa misma tarde marchareis con Hermanos del Silencio para salir disimuladamente de la ciudad. Cuidaos muchacha, espero que nos volvamos a ver. Y un último consejo, guarda la lengua un par de segundos antes de hablar, seguramente te salve la vida una docena de veces o más.
Dejamos tu escena por aqui hasta el día 14. Te enterraré y esas cosas en cuanto recuperemos totalmente el ritmo la semana que viene pero en esas escenas no tendrás que postear aunque lo leerás todo (se supone que estás muerta).
Cuidate, nos vemos a la vuelta.
Es honor por mi parte contar con un Dan Ar y con su inquebrantable lealtad. Gracias por todo Kyllian, espero que volvamos a vernos y que vuestra espada sea lo suficiente afilada para proteger a mis hijos -te despide Lord Gendry.
Damos por finalizada la escena :)
En cuanto vuelva a mi ritmo y los otros jugadores de Desembarco acaben su escena seguimos.
De acuerdo. No te preocupes; ve llevando el ritmo que necesites para ir organizando todo que no tengo problema. Es una partida complicada y ahora está en un punto un tanto conflictivo de organización.
Y mucho ánimo y suerte con el naciente negocio!
Ok, gracias. Y mucha suerte con lo tuyo que he leído el Off-topic :)
Os paso a una nueva escena pero podéis postear con tranquilidad. Disfrutad las vacaciones :)
¡Gracias! Podemos leer los post, pero responder desde el móvil es horrible. El sábado nos tienes de nuevo en plenas facultades :)