Partida Rol por web

Marcus mira con orgullo a sus dos compañeros -No se cuantos hombres les ha enviado mi hermano pero tened algo claro, yo nunca he apoyado a Quentyn, los dornienses me hicieron algo a mi y a mi pueblo que jamás olvidaré, nos masacraron junto a los Kraken, destruyeron a los hombres del Dominio. Junto a la reina Daenerys.

No sabia que responder a sus palabras por un lado se alegra que podrian llegar a recibir mas tropas, por el otro lado sus palabras de odio no podian llegar a peores personas. Lady Missandei era una vasalla de la reina que estaba dispuesta cumplir con la ultima locura de ella y yo teniendo sagre de Dorne, sumado a que mi padre gano sus tierras en la batalla con los Kraken.

Al final solo asintio y miro al hombre. Sir Symon es mi nombre y este es mi compañero Konrad... dijo señalando al jinete que tenia al lado. Nuestra casa no guarda lealtad a Quetyn, asi que espero sepas que seras bien recibido. comento con una sonrisa sincera.

- Bueno supongo que así, ya queda todo algo más claro - digo con un hilillo de voz perceptible - Yo por mi parte soy Jean Buridan, cirujano y curandero, si algún mal os aqueja podeis pedir mis servicios por supuesto- digo dando unos golpecitos al bolso de cuero rectangular que reposa sobre mi cadera izquierda. - Nuestro último acompañante el el señor Kordur Merronen- digo señalando al casi bárbaro acompañante que se nos unió en el último momento. 

- Siento ser pesado mis señores, pero la marcha no se realizará solo...- termino volviendo a extender el brazo hacía el camino, puesto que seguimos tan parados como cuando empezamos. 

El bárbaro asiente ante las palabras de Jean -Este cirujano también sabe usar un látigo y los puños, no os dejéis engañar por su aspecto de devora libros.

El grupo, formado por doce hombres de la Casa Espada de Amanecer, ocho hombres de Lady Missandei y quince hombres de Lord Marcus Hightower, parte de la mansión, rumbo al norte, hacia un futuro incierto en el que aún queda mucho por discutir.

Asiento a Buridan aceptando su pésame. - Perdonen, pero antes de empezar la marcha, ¿hacia donde nos dirigimos? y ¿porqué? La carta que me trajo aquí era bastante escueta, aunque os agradezco la ayuda y sobre todo que salvarais a mi hijo. Os estoy eternamente agradecido, y os seguiré y ayudaré puesto que no tengo hogar al que regresar. Sinceramente lo que más me apetece ahora mismo es vengarme y recuperar mis tierras, pero entiendo que eso lo más probable es que no sea el movimiento más acertado, además de que estoy desinformado sobre los movimientos de tropas y los distintos bandos que se han formado después de todo este jaleo. - Digo mientras les sigo junto a mis hombres.

- Bueno Lord Marcus, probablemente nuestra Lady aquí presente podría explicaros esto mucho mejor que yo, pero de momento, nos dirigimos... hacia el norte, el frío e inhóspito norte- digo con un ligero deje de pesadumbre - ¿nunca me ha gustado demasiado el frío sabeís?- mientras me arrebujo en mi túnica- Si bueno esto no es que importe mucho la verdad, ¿el por qué? Pues porque aquí nuestra señora- digo señalando a Misandrei- conocía el plan de nuestra difunta reina para coronar al futuro rey... que bueno, evidentemente no iba a ser Quentyn por supuesto, por lo que ponemos todas nuestras esperanzas en el vástago de Lord Stark, así pues vamos hacia el norte para tratar con él y bueno... y lo que surja - digo con tono serio y voz débil. "No sé por qué mis bromas nunca surten efecto..." pienso al ver que mi coletilla final no tiene una gran acojida "será por el tono de voz... bueno, cada cual no puede elegir su tono de voz ¿no?" - Acerca de movimientos etc, bueno, ya dije que solo soy el curandero mi Lord, puede que otros más capaces que yo en esas materias puedan ayudarte. 

Lady Missandei sonríe ante las palabras de Jean -Creo que voy a disfrutar de vuestra compañía, joven. La Reina tenía un plan para preparar un futuro reinado de mas paz y armonía. Para ello seleccionó a los segundos hijos de tres grandes casas, la Casa Arryn, la Casa Martell y la Casa Stark. De la primera el elegido fue Ramiel Arryn, un chico coronado ya rey por si mismo con el favor de los Siete, de la segunda Elia Martell, hija de la señora de Dorne y el tercero es un recién nacido que aún no ha sido influenciado por ningún corazón oscuro y ambicioso.

La mujer miró directamente a Marcus y a continuación a su hijo -Mi señor y sus ejércitos me ayudaréis y apoyaréis a Lord Stark en la guerra que pronto deberá iniciar por el bien de todos los habitantes de Poniente. Así podréis pedirle lo que deseéis, incluyendo que vuestro hijo ocupe el lugar que le corresponde y vuestro pueblo quede liberado para siempre de los dornienses ¿que te parece?

Sir Symon seguia avanzando en silencio, meditando las palabras que escuchaba. Un codazo de su amigo lo hizo reaccionar ante todo eso, lo miro con enojo aunque agradecia su modo poco sutil para que decirme que hablara.

Marcus sobre el movimiento de tropas, solo sabemos que Quentyn sigue con su ejercito en desembarco. Pero no sabemos si la noticia es demasiado vieja o sus tropas han tratado de volver a sus tierras. le informo al ver que nadie mas lo hacia.

La escucho repetir su plan y seguia sin parecerle decente aunque pocas alternativas tenian en aquellos momentos. Nosotros fuimos elegidos para escoltar a Lady Missandei hasta llegar a Winterfell, para que ella pueda hablar con el actual rey del norte Brandon Stark.

Se le quedo mirando esperando una respuesta que daba por hecha con las recompensas que esta proporcionaba.

Después de escuchar las palabras de Missandei, lo que comenta Sir Symon es como un eco lejano. Miro a Carter y sonrío. - Parece que no nos queda más remedio que reunirnos con los norteños, ¿no?

Después de todo al final nos va a acabar gustando el frío. - Comento en alto, haciendo referencia a las palabras del curandero.

Sonrio socarronamente ante la mofa de Marcus - Eso decimos ahora, ya veremos cuando avancemos un poco más, se nos van a helar hasta las bromas...- termino comentando con ese tono de voz tan bajo que parece que no ha sido echo para realizar bromas. 

Mientras tanto los gemelos ya están completamente calientes al intentar seguir a pie el paso de los caballos, de todas formas los demás hombres de la casa tan bien van a pie, por lo que tampoco supondré un gran latre. "Me estaba entumeciendo en esa fortaleza..." Al ver un pequeño revuelo de hojas con el viento "aunque tal vez me estaba empezando a gustar entumedecerme..."

El Norte es un buen sitio para vivir, yo os lo mostraré-añade Kordur, colocándose el primero de la marcha.

Vuestra pequeña expedición parte, rumbo al norte, en busca del Rey Stark, buscando que se una a la guerra.