Partida Rol por web

- Esto es enorme, dice Morganne algo desalentada, esperaba algún tipo de mausoleo o escultura que marcara la tumba. Mueve la linterna de un lado para otro intentando descubrir en la oscuridad algo fuera de lugar en una zona boscosa. ¿Ves tú algo que nos ayude a localizar la tumba.

-Yo no veo una mierda- decía Terry cada vez más frustrado. No solo no veía nada, si no que su radio de acción era muy reducido por su falta de fuerzas.

Sinceramente, estaban bien jodidos.

-Busca por allí, mientras yo sigo por ésta zona- aunque los dos sabían que lo más seguro.era que en cuestión de minutos estuvieran criando malvas como el resto del grupo.

-Puta vida...-

La espesura del bosque, la oscuridad noche, los nervios a flor de piel. Cualquiera de esas cosas o todas a la vez impedían a los dos supervivientes dar con alguna pista sobre la localización del lugar.

Sí, estaban más o menos sobre el terreno, peto no encontraban ninguna estructura que señalizara aquella antigua granja. Parecía wue el tiempo la había hecho desaparecer...

Morganne hace caso de Terry y se dirige a la zona que le ha indicado, parece que hay un camino creado a base de que la gente pise siempre por el mismo sendero para pasar por allí.

- ¿Sabes? Yo sólo quería buscar un sitio tranquilo, dejar atrás mi pasado y tener tiempo para olvidar estos últimos años pero estos paletos hijos de puta, como tú los llamas, han preferido seguir matando gente que mudarse de este sitio....creo que he encontrado algo.

-Yo solamente trataba de buscar un lugar en el que no acabase criando malvas de mala manera, pero mira, no he acertado. Jajajaja- empezó a reír de nuevo.

Tal vez la falta de sangre o la certeza de que era casi imposible que en su estado diese con la puta tumba le hacía sentir una especie de euforia histérica.

-Sigue por ese camino, por aquí no hay nada- dijo a Morgane que parecía ser la única esperanza en aquel puto descampado.

- No sé si todo esto servirá para algo o si solo estamos retrasando lo inevitable ¿de verdad crees toda esa historia de que un espíritu viene cada diez años a matar gente porque no encuentra el cuerpo de su mujer? - sigue caminando entre los árboles por donde descubre que hay algunas huellas de pisadas que aunque no son recientes parece que demuestran que en algún momento ha habido tránsito.

-Yo no me creería mucho lo que dice un cura- contestó a Morgane.

-Lo que está claro es que alguien se dedica a matar gente a sus anchas con la escusa. Y eso es un hecho- continuó -De todos modos poco importa que te saque las tripas un muerto que un vivo si el resultado es que tú palmas, ¿no?- sonrió irónicamente.

-Además... Espera, ¿Qué es eso? Ahí, justo ahí, por dónde vas mirando- indicó.

- Supongo que yo más que ninguno debería estar acostumbrada a los sucesos extraños - de repente dio la vuelta sobre si misma, iluminó alrededor suya pero parecía que había perdido el sendero así volvió sobre sus pasos intentando encontrarlo de nuevo. Oye, si salimos de esta espero que me guardes el secreto acerca de lo que hice en la iglesia...ya sabes, esas bolas negras que salieron de mis manos.

-No te preocupes. Si salimos de ésta te enseño yo las mías y listo. Ja ja ja ja- contestó Terry.

Lo primero porque tenía claro que no iba a salir con vida de aquel puto sitio y lo segundo porque tomarse la muerte con su habitual humor negro haría que Morgane siguiera adelante e intentase sobrevivir. Deprimirla no serviría de nada.

Miró de reojo hacia el camino por el que habían llegado y un escalofrío le recorrió la espalda. Por alguna razón sentía que el momento se acercaba.

-Ahora encuentra esa puta tumba, joder. No tenemos toda la noche-.

- ¡No sé donde está! - gritó frustrada y con lágrimas en los ojos - No sé donde está, repitió esta vez en un susurro....Había pensado que quizás era la única forma de salir con vida pero el terreno a cubrir era muya grande, la noche les ralentizaba y el miedo a enfrentarse de nuevo con esos monstruos le paralizaba....No sé donde está

-¿Sabes una cosa? Da igual. No hace falta que sigas buscando, ya puedo oírlos detrás de los árboles-.

Tenía un molotov en una mano y la escopeta apoyada en las piernas. Lo habían intentado, pero era una tarea casi imposible de realizar entre dos... Bueno, uno y medio, ya que él mismo estaba hecho una auténtica mierda.

-Sal corriendo, regresa a la tienda y pilla la moto. Es la única posibilidad de escape que tienes. Yo me quedaré aquí a joder a estos cabronazos-

El área a rastrear era demasiado extensa y llena de vegetación que había crecido salvaje por décadas abandono.

Los dos supervivientes no lograron encontrar la localización exacta de la tumba de Marla y esa fue su perdición.

Tal y como se temían la Cacería Salvaje no tardó en dar con su paradero. Los subuesos a las órdenes de aquel ser infernal habían seguido su rastro de nuevo.

De alguna forma sabían que no tenían ninguna posibilidad de salir con vida de otra emboscada como la de la iglesia.

Esta vez al menos estaban más preparandos para lo que se les venía encima. Por desgracia Terry estaba hecho polvo y Morgane estaba prácticamente sola ante el peligro.

El herido lanzó sus proyectiles incendiarios para dar tiempo a Morgane y que al menos ella escapara de allí. Pero fue inútil. Sólo consiguió postergar lo inevitable.

Los muertos se lanzaron sobre el cobrador de deudas que había demostrado tener un corazón valiente después de todo. Se quitó a uno de encima con su escopeta que pronto se descargó. Sacó su revolver para fircejear con un segundo y un tercero de los que no pudo zafarse. Acabó devorado por esas criaturas sedientas de sangre...

Morgane consiguió ganar unos segundos y escapó como pudo de la granja abandonada en dirección a la tienda. Pero los sabuesos eran más rápidos y en apenas unos minutos la alcanzaron.

Todo sucedió muy rápido. El primer sabueso la pilló desprevenida mordiéndole el tobillo. Ella trastabilló, se hizo un ovillo y se cubrió de una extraña piel negra que debía protegerla.

Los sabuesos no conseguían atravesar esa dura piel y apenas le hacían cortes superficiales. Pero estaba acosada por cuatro de esas criaturas que no le daban ni un respiro. Hasta que de pronto sonó un silbido y se hicieron a un lado. Era Albert que les ordenaba retirarse.

Ese ser transformado en una enorme abominación la agarró del cuello y la levantó de tal forma que no podía alcanzar con los pies en la tierra. Comenzó a asfixiarla y poco a poco comenzó a perder el aliento y la consciencia.

- TU NO ERES MARLA... - dijo ese ser mientras la sostenía a varios pies de altura del suelo. - ...PERO TIENES ALGO ESPECIAL, QUIZÁ ME SEAS UTILIDAD...

Y antes de que el sol despuntara se la llevó. Y con él desapareció la niebla y las criaturas volvieron a sus tumbas para regresar y levantarse cuando fueran llamadas de nuevo por el Maestro de la Caza.

* * *

* * *

Con el amanecer todo volvió a la normalidad. Los aldeanos enterraron los restos de Rosemary, Bobby, Alice, Brian y Terry, formando parte de los nuevos muertos que regresarían para levantarse en el futuro. De la iglesia y todos los cuerpos de su interior poco pudieron recuperar más que ceniza y huesos.

Cabizbajos, avergonzados y temerosos de afanaton en enterrar todos los restos al igual que el amargo recuerdo de aquella noche.

Bernie tenía un trato con sus paisanos. Él seguiría trayendo gente que nadie pudiera echar en falta y ellos le seguirían protegiendo frente a cualquier amenaza...

Sheila por su parte decidió marcharse de allí sin avisar. No quería volver a ser cómplice de algo así nunca más. El resto dejó que se marchara. No iba a contar nada a la policía y si lo hacía ¿quién iba a creer su historia sobre una maldición que levanta a los muertos de sus tumbas?