Mientras Jareth estaba a punto de usar la magia, en el momento en que todos subieron junto con las rocas, la balanza brilló con una luz tornasolada.
En uno de los platillo se formó un muñeco.
Era un muñerco grande, como una persona completa y tenía escrito algo en el pecho. Precisamente eran estos números:
120
Jareth consigue crear una cuerda transparente que parece bastante resistente para la tarea.
Por lo visto ya falta poco para descifrar el enigma del ahorcado...
-Espero que el ahorcado sea él...
Juliette esperaba que de verdad fuera así y lo decía señalando al muñeco con el ciento veinte pintado en el pecho. Le dio un cierto escalofrío, finalmente, ahorcar era una palabra que no le agradaba en absoluto o quizás si, luego sonrió y pensó que estaba enloqueciendo, quizás terminaría en un hospital psiquiátrico.
No me esperaba que apareciese ese muñeco, pensaba que había que engancharlo a la balanza, pero de este modo mucho mejor.
Até la cuerda transparente al cuello del muñeco y luego a la soga que colgaba del árbol, ahora abría que izar el muñeco - ¿Me ayudas? – le pregunté a Christian
- Ehh... sí-contestó, sorprendido por la aparición repentina del muñeco.
Ayudó a Jareth a izar el pelele y colgarlo de la soga del patíbulo. Pesaba bastante, y el terreno era irregular y resbaladizo, por lo que costó bastante llevarlo hasta la horca. Una vez allí, entre el Rey de los Goblings y él lo ataron a la soga.
- Espero no morir como augura el cartel.
Entre Jareth y el príncipe lograron subir el enorme monigote y atarlo al patíbulo. Cuando eso estuvo hecho, todos dieron un paso atrás.
Se sintió un "click"
Y el ahorcado habló.
-Muchas gracias por su compra-dijo el muñeco con una sonrisa dibujada de golpe en su cara.
-Por favor, bajad las escaleras.
El patíbulo se corrió y se vieron unas escaleras marmoladas que conducían... bueno a alguna parte.
-Y volved en cuanto queráis.
Dijo el muñeco y desapareció y la bola mágica de Jareth retornó a su dueño.
- Estooo... de nada- dijo Christian sin saber muy bien por qué lo decía.
Miró a Juliette y a Jareth, y luego a la escalera.
- No se preocupe, señorita, voy yo primero por si hay algún peligro- dijo con tono que intentaba parecer valiente.
Juliette sonrió nerviosa, aunque él fuera por delante, eso no le significaba mayor confianza pero no por él sino por las cosas que ya había visto se podían encontrar en esa aventura que sin quererlo habían emprendido juntos.
-Gracias...
No dijo más y fue tras él, tampoco iba a ir detrás, allí los monstruos pueden atacarte sin que los veas.
Entre Christian y yo conseguimos “ahorcar” al muñeco, entonces comenzó a hablar dándome un susto, esperando que se fuera a quejar o algo así, pero hablaba de una forma rara.
No entendía nada, pero parecía claro que teníamos que bajar por aquellas escaleras.
Dejé al príncipe oscuro que fuera el primero ya que parecía tener ilusión, dejé pasar a Juliette en segundo lugar y yo pasé el último – Vamos a ver si por aquí llegamos al museo ese – dije en voz baja
Cierro esta escena, 2 de ustedes empezarán en 1 y otra en otra xD muahahaahhahaha!!
:3 a llorar a la iglesia
xD