La colonización de Terra Nova (Gliese 581c) marcó un antes y un después en la "aventura" espacial del hombre, las colonizaciones de la Luna o Marte eran ya parte de la Historia y el colonizar un planeta de otro sistema solar era ya un verdadero "Hito", no solo por lo que significó estar bañados por la luz directa de otra estrella que no fuera el Sol, sino que además de los avances espaciales necesarios que se produjeron para conseguir llegar a Terra Nova, hubo que evolucionar la "especie" un grado más, ya no se trataba de mutaciones controladas en beneficio de facilitar la adaptación al medio, sino de crear especies a "medida" para el planeta a colonizar, al fin y al cabo era más "rentable" cambiar a las especies que habitasen un planeta que no cambiar el planeta por completo. En la colonización de los planetas Kepler 22 ya se dejo de usar la palabra mediohombre y en muchas viejas colonias dejaron de considerarse tales, nacieron nuevas razas evolucionadas por laboratorios y sus propios medios. Pero esto también es historia ...
Han pasado cuatro años desde la Batalla de Endor y la Nueva República sigue luchando por liberar la galaxia de los restos del Imperio. En una de sus campañas militares llegan hasta el remoto sector Kathol, que aún estaba bajo dominio de un Gobernador Imperial (Moff), llamado Sarne.
Los personajes viajan a una ermita de las montañas de Navarra, que dicen que quien la visita queda bendecido con buena ventura. El camino es tortuoso y está nevando, por suerte pasan por una aldea en la que pasar la noche antes de recorrer el último tramo hasta la ermita.