En Runebound, los jugadores deben asumir el rol de uno de los diversos héroes disponibles, que deberán recorrer el territorio de juego, dispuesto en trama de hexágonos, en busca de aventuras. A lo largo del tablero, podrás encontrar hexágonos de planicie, carretera, montaña, colina, ciudad, etc. En diversos lugares, existen contadores de aventura a los que los jugadores pueden enfrentarse. Según el color del contador, la aventura será más o menos difícil, de modo que el jugador escoge en cada momento el riesgo que asume. A más riesgo, más recompensa. Una aventura, puede incluír eventos generales (afectan a todos los jugadores), eventos particulares(te afectan solo a ti) y monstruos. Estas "aventuras" se resuelven a base de cartas y tiradas de dados.
Para ganar la partida los jugadores deben obtener tres runas de dragón, que se consiguen matando al dragón que la lleva; o vencer al dragón jefe. Para ello, hemos de mejorar nuestras habilidades, enfrentándose a aventuras de menor dificultad para subir niveles y conseguir dinero, objetos y aliados que nos permitan prepararnos para cuando llegue el momento de ir a por los dragones (contadores de aventura rojos).
El tiempo de juego es limitado. Transcurrido éste, los dragones comenzarán a atacar indiscriminadamente a los jugadores, pudiendo darse dos casos: que todos los jugadores acaben muertos o que uno consiga alcanzar las condiciones de victoria.
El juego es francamente divertido; muy en la línea de algunos clásicos como The Talismán o Greyhawk Wars. Lo más original son los dados de movimiento; cinco dados de seis que tienen varios iconos de movimiento en cada cara. Cada dado puede utilizarse para mover un hexágono del terreno correspondiente a alguno de los iconos resultantes.
Quizá es un juego que esté un poco descompensado pues favorece a los personajes que combaten a distancia sobre los demás; pero es algo que se puede solucionar fácilmente con un par de modificaciones en las reglas.
El mayor, y solo en parte, inconveniente que le veo, es que las partidas duran bastante tiempo; unas 3 horas facilmente y que cada jugador ha de pasar bastante tiempo observando lo que hacen los demás antes de que le toque actuar y luego el turno le sabe a poco.
Ya hay disponibles varias ampliaciones.
Esta bien, aunque es un tanto aleatorio y al final se echa de menos un poco más de riesgo a la hora de enfrentarse a los bichejos. Sin embargo es bueno.