Mundo Friki: Películas

La película en sí no tiene sentido,

¿qué le pasó a los poderes de Albert, se los llevó así, de repente, alguna golondrina? ¿al final quién creó el virus, el dr. Charles Ashford basando a la Reina Roja en Ángela Ashford (Resident Evil 2), o el padre de la original de Janus Prospero, el dr. James Marcus, basando a la Reina Roja en la niñez de la propia Alice (Resident Evil 6)? O a lo mejor las espectadoras estamos frente a una confirmación cinematográfica de la teoría de Universos Paralelos de la Mecánica Cuántica de 1957 y no nos hemos dado cuenta hasta ahora.

En fin, en mi opinión, un despropósito de pavo relleno de acción oscura (por la falta de iluminación, ¿qué pasa, no pagaron la factura eléctrica?) con crema de incoherencias argumentales. ¿Lo único salvable? Ver a Albert, que está guapísimo con ese estilazo que tiene y esos ojazos rojos y se le echa mucho de menos desde que se lo cargaron en Resident Evil 5. Y encima en esta película sale poco y lo ridiculizan poniéndolo al servicio del dr. Alexander Isaacs (que se vuelva a Juego de Tronos, que allí me caía mejor).

La película cuenta con tantas incoherencias que he terminado por hacer algunas presunciones.

1) Debes tratar cada película como un relato independiente de un universo paralelo, ya que no se respeta ni la continuidad dentro de las mismas, así que mucho menos van a respetar la de los videojuegos.

El motivo de esto es que varios elementos pasados sencillamente se pasan de largo. El origen de la Reina Roja es reescrito -por tercera vez- ya que el primer origen es el que cuentan en la segunda película, el segundo el que cuentan en la tercera -donde aparece una ¿Reina blanca?- y ahora tenemos un tercero.

El actual tuvo un propósito más bien descarado como el que siempre han mostrado Anderson y sus productores, y es, simplemente, que quería a su hija en el papel, por tanto se pasó nuevamente por donde no brilla el sol todo lo que en el pasado se planteó, y con ello se ha vuelto una película familiar...para la familia Anderson.

2) Desde la primer película se empezó a notar ese aire precisamente de que la franquicia iba a ser una adaptación completamente libre e independiente de las sagas que iba a poner en vergüenza a Street Fighter, donde al menos Raul Julia y Van Damme intentan poner personalidad a sus interpretaciones. Seguramente escucharon parte de las quejas de la fantaticada ante la ausencia de los protagonistas ''conocidos'' de los videojuegos como Jill, Chris, Leon, Claire, etc... pero básicamente hicieron oídos sordos modificando a gusto los personajes, añadiendo subtramas absurdas y sin sentido y glorificando al personaje de la historia bajo la premisa:

''Nadie hace nada genial o importante si no es Alice, si alguien hace algo así, entonces le está robando pantalla y ella debe hacer algo todavía más absurdo para que parezca que es la mandamás''.

Bajo esa excusa se ven personajes pálidos que dentro de lo que los conocedores de los videojuegos nos resulta incomprensible, y otros tantos que nos dejan con sumos interrogantes, particularmente Carlos, quien ¿Tiene una pseudo-relación con Alice y ahora es relevante?

Pero en éste nuevo capítulo, cada avance, cada guiño a la franquicia, cada subtrama sentada importa lo mismo que un cero a la izquierda, literalmente han pasado la guadaña a todos y cada uno de los viejos y nuevos personajes -o los actores se negaron a prestarse para lo que iba a ser este ''capítulo final''.

Era natural que en la época tuvieron que competir contra pesos pesados del cine de terror y de zombies como 28 Days Later, pero incluso la muy humilde Juan of the Dead (Juan de los Muertos) es una película que muestra muchísimo más potencial narrativo y elementos originales que las que se suponían que eran la gran adaptación de la gran franquicia de muertos vivientes.

Que por cierto, no son muertos vivientes tampoco ya, sino mutantes, ya que todo el tema de la infección quedó reducido a cómo el virus era capaz de o asesinarte y convertirte en un caníbal decrépito, o convertirte en un supersoldado con poderes psíquicos que dejan en vergüenza a Mewtwo.

Ya de por sí es lamentable lo que han hecho a todos los personajes, pero el insulto final viene al clásico villano Albert Wesker, no sólo es su participación en esta versión, deplorable en todo sentido, sino que tiene uno de los finales más tristes, más tristes repito, de toda la saga de películas e incluso los videojuegos.

3) Más jumpscares, menos terror.

Odio los jumpscares o ''sultos de salto'', son escenas en las que poco a poco bajan el audio, y a veces la iluminación o el foco de acción con el propósito de regresarlos con un sonido e imagen abrupta que hace que el cuerpo del espectador salte instintivamente, éstas son estrategias que atacan los sentidos del espectador de modo inesperado, teniendo en cuenta que el cuerpo por lo general está alerta y los sentidos receptivos, es bastante efectiva en el terror.

Por eso las odio, pero también las comprendo como un recurso que debe estar presente en el cine de terror.

...Excepto cuando los primeros cinco minutos de tu película intentan hacerte convulsionar cada que pueden, y después cada vez que bajan el volumen entiendes que se acerca un jumpscare, literalmente no hay sorpresa.

El abuso de éste recurso se puede contrastar con otra película que recientemente pude ver Train to Basu/Estación Zombie, de orígen coreano, una de las cosas más curiosas de ésta recomendadísima película es que usaron mucho más tiempo en crear la ambientación, disponer el terror de un apocalipsis zombie, el humor y la compleja dinámica de las relaciones entre personajes, lo cual funciona para hacer mas dramáticas las escenas de suspenso y terror, que lo invertido en jumpscares.

Sinceramente Poul S. Anderson no sabe hacer terror, y tengo mis dudas de que sepa hacer acción, muchas de las tomas eran tan graciosas que uno podía ponerse en la perspectiva ''cuando luchas en la pelea, y cuando eres espectador de la pelea'', pésimas coreografías.

En lo personal -porque hay más pero no quiero extenderme- espero que algún día retomen la franquicia, y que de ser posible hagan unas auténticas adaptaciones con los personajes de la franquicia, y que pongan a escritores que respeten las tramas originales y no que impongan sus gustos y criterios personales, harán mucho dinero si lo hacen así.

La mejor frase ''Era una compañía que tenía fines honestos, pero se dejó llevar por la avaricia y terminó por corromperse'' -Aquí básicamente hablan de Capcom, aunque RE7 muestra voluntad de cambio, espero que continúe, y ya que no pudieron darnos un ''final'' en el Capítulo Final, que al menos haga honor a su nombre.