En la época de la Regencia, los bailes eran eventos sociales de gran importancia, especialmente para las jóvenes debutantes que buscaban un marido adecuado. Las jóvenes debutantes eran presentadas formalmente a la sociedad en su primer baile, marcando su entrada en el mercado matrimonial.
Los bailes ofrecían un entorno supervisado donde los jóvenes podían conocerse. Eran el escenario perfecto para evaluar posibles parejas en términos de posición social, riqueza, carácter y compatibilidad.
¿Tendrán las debutantes de 1815 el honor de encontrar un buen partido con el que comenzar sus nuevas vidas? ¿Lo harán por amor? ¿Por honor y renombre?