Partida Rol por web

Black Mirror

[Obliviate] Ambientación

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19/02/2019, 13:37
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La mayor escuela de magia de Norteamérica se fundó en el siglo XVII. Se encuentra en el pico más alto del monte Greylock, donde se oculta de ojos no mágicos gracias a una combinación de poderosos encantamientos que a veces se manifiestan en forma de nube en espiral.

Orígenes irlandeses

Isolt Sayre nació en torno al 1603 en el valle de Coomloughra, en el condado irlandés de Kerry, donde pasó sus primeros años de vida. Descendía de dos familias de magos de sangre limpia.

Su padre, William Sayre, era descendiente directo de la famosa bruja irlandesa Morrigan, una animaga cuya forma de criatura era un cuervo, y apodó Morrigan a su hija por la afinidad con el mundo natural que mostró de pequeña. Su más tierna infancia fue idílica. Sus padres la querían mucho y elaboraban curas mágicas para humanos y ganado para ayudar discretamente a sus vecinos muggle.

Cuando tenía cinco años, Isolt se quedó huérfana. Asaltaron la casa familiar y sus padres murieron. Su tía, Gormlaith Gaunt (de quien su madre se había distanciado), la rescató del fuego y se la llevó al valle vecino de Coomcallee, o Cañada de la Bruja, donde la crio.

Cuando Isolt se hizo mayor, se dio cuenta de que, en realidad, su salvadora la había secuestrado y había matado a sus padres. Gormlaith era una persona inestable y cruel, una sangre limpia fanática que pensaba que la amabilidad que su hermana mostraba a sus vecinos muggle llevaría a Isolt por el mal camino: un matrimonio mixto con un hombre no mágico. Estaba convencida de que era la única manera de que la niña creciese "por el buen camino": aprendería que era descendiente tanto de Morrigan como de Salazar Slytherin y que debía relacionarse solo con otros sangre limpia.

Gormlaith consideraba que ella era el modelo que Isolt necesitaba y obligó a la niña a observar mientras maldecía y embrujaba a todo muggle o animal que se acercase demasiado a su cabaña. La gente aprendió enseguida que debía evitar la morada de Gormlaith y, desde entonces, el único contacto que Isolt tuvo con los vecinos, con los que compartió amistad en su día, eran los niños que le tiraban piedras cuando jugaba en el jardín.

Cuando Isolt recibió la carta de Hogwarts, Gormlaith le prohibió asistir, alegando que aprendería más en casa que en un peligroso colegio igualitario lleno de sangre sucia. Sin embargo, como Gormlaith había sido alumna de Hogwarts, le contó a Isolt muchas historias del colegio. Aunque lo hacía para desprestigiarlo, pues lamentaba que los planes de Salazar Slytherin para preservar la pureza del mundo mágico no se hubiesen llevado a cabo. Para su sobrina, aislada y maltratada por una tía a la que creía medio loca, Hogwarts parecía el paraíso y durante su infancia fantaseó con él a menudo.

Durante doce años Gormlaith se aseguró la cooperación y el aislamiento de Isolt con magia oscura muy poderosa, pero, un día, la joven se armó de valor, le robó la varita a su tía (pues no le permitía tener una propia) y se escapó. Isolt solo se llevó una cosa más con ella: un broche de oro con forma de nudo gordiano que pertenecío a su madre. Después, huyó del país.

Como tenía miedo de la represalia de Gormlaith y de sus prodigiosas habilidades de rastreo, se marchó primero a Inglaterra, pero Gormlaith pronto averiguó su paradero. Isolt, resuelta a esconderse de manera que su madre adoptiva nunca la encontrase, se cortó el pelo, se hizo pasar por un chico muggle llamado Elias Story y zarpó rumbo al Nuevo Mundo a bordo del Mayflower en 1620.

Isolt llegó a América junto a los primeros colonos muggles (la comunidad mágica norteamericana llama nomajs a los muggles). Pronto, desapareció sin dejar rastro y se escondió en las montañas; sus compañeros de viaje asumieron que Elias Story había muerto de frío, como muchos otros aquel largo invierno. Isolt dejó la nueva colonia en parte porque aún temía que Gormlaith la encontrara, incluso en un nuevo continente, pero también porque el viaje a bordo del Mayflower le había mostrado que una bruja no encontraría muchos amigos entre los puritanos.

Isolt estaba sola en un país hostil que no conocía y, hasta donde sabía, estaba a cientos, si no miles, de kilómetros de cualquier otra bruja o mago; en sus lecciones parciales, Gormlaith nunca mencionó a los magos indios. Sin embargo, después de pasar varias semanas sola en las montañas, conoció a dos criaturas mágicas cuya existencia desconocía.

El escondetrás es un espectro nocturno que vive en el bosque y que caza criaturas humanoides. Tal como sugiere su nombre, puede contorsionarse para esconderse detrás de casi cualquier objeto y ocultarse así de la mirada de cazadores y víctimas. Los nomajs han sospechado de su existencia, pero no pueden hacer frente a su poder. Solo una bruja o un mago tiene posibilidad de sobrevivir a los ataques de un escondetrás.

El pukwudgie es una criatura nativa de América, un pariente lejano del duende europeo de poca estatura, con la cara gris y las orejas largas. Es muy independiente y astuto, no le tiene mucho cariño a los humanos (ya sean mágicos o no) y posee una magia poderosa. Los pukwudgies cazan con flechas que contienen un veneno mortal y disfrutan gastando bromas a los humanos.

Ambas criaturas se encontraron en el bosque y el escondetrás, que tenía un tamaño y fuerza poco habitual, no solo logró capturar a este pukwudgie joven e inexperto, sino que estaba a punto de destriparlo cuando Isolt le lanzó una maldición que le hizo huir. Isolt no sabía que el pukwudgie pudiera ser extraordinariamente peligroso para los humanos, así que lo recogió y se lo llevó a su refugio improvisado para cuidarlo hasta que recuperase la salud.

El pukwudgie declaró que estaba obligado a servir a Isolt hasta que pudiese devolverle el favor. Para él era una humillación estar en deuda con una bruja joven que era tan ingenua como para vagar por un país que desconocía, en el que un pukwudgie o un escondetrás podía atacar en cualquier momento, así que Isolt tuvo que escuchar a menudo las quejas del pukwudgie mientras este la seguía con paso lento.

A pesar de la ingratitud del pukwudgie, Isolt lo encontraba gracioso y agradecía la compañía. Con el tiempo se fue forjando una amistad casi única en la historia de las dos especies. Fiel a los tabús de su gente, el pukwudgie se negó a decirle su nombre, así que Isolt decidió apodarlo William, igual que su padre.

La serpiente cornuda

William empezó a enseñarle a Isolt las criaturas mágicas que él conocía. Viajaron juntos para ver cazar a los hodags cabeza de rana, se enfrentaron a un snallygaster dragoniano y observaron cómo jugaban las crías de wampus al amanecer.

Lo que más fascinó a Isolt fue la gran serpiente de río cornuda que tenía una joya en la frente y que vivía en un arroyo cercano. Hasta su guía pukwudgie se sentía aterrado ante esta bestia pero, para su asombro, Isolt parecía gustarle a la serpiente. Lo más alarmante para William era que Isolt asegurase entender lo que la serpiente cornuda le decía.

Ella aprendió que no debía hablarle a William de su extraña afinidad con la serpiente ni informarle de que la serpiente parecía contarle cosas. Empezó a visitar el arroyo sola y jamás le contaba al pukwudgie dónde había estado. El mensaje de la serpiente era siempre el mismo: "Hasta que no pertenezca a tu familia, tu familia está maldita".

Isolt no tenía familia, excepto Gormlaith, allá en Irlanda, y no lograba entender el críptico mensaje de la serpiente cornuda, pero tampoco sabía si la voz que parecía hablarle era imaginación suya o no.

Webster y Chadwick Boot

Isolt pudo reunirse finalmente con gente como ella, aunque fue en circunstancias trágicas. William y ella estaban buscando comida en el bosque un día cuando oyeron un ruido espeluznante no muy lejano. William gritó a Isolt que no se moviera y salió corriendo, flecha en mano.

Por supuesto, Isolt no siguió sus indicaciones y se encontró con una escena horrible al llegar a un pequeño claro poco después. El mismo escondetrás que había intentado matar a William había tenido más éxito con un par de ingenuos humanos que ahora yacían muertos en el suelo. Peor aún, muy cerca había dos niños gravemente heridos que esperaban su turno mientras el escondetrás se preparaba para destripar a sus padres.

El pukwudgie e Isolt vencieron sin dificultad al escondetrás y esta vez lograron destruirlo. El pukwudgie estaba encantado con su labor de aquella tarde y siguió recogiendo moras ignorando los leves quejidos de agonía de los niños que yacían en el suelo. Isolt le indicó muy enfadada que ayudase a llevar a los niños al refugio y William se cogió una buena rabieta. Los niños, según dijo, ya estaban muertos. Ayudar a la humanidad iba en contra de las creencias de su especie: Isolt solo era una afortunada excepción porque le había salvado la vida.

La insensibilidad del pukwudgie enervó a Isolt y le propuso salvar la vida de uno de los niños para compensarla por ese episodio. Los dos niños estaban tan enfermos que temía aparecerse con ellos, pero insistió en llevarlos al refugio. A regañadientes, el pukwudgie aceptó llevar al niño más mayor, que se llamaba Chadwick, mientras que Isolt cargó con el pequeño Webster.

Una vez allí, Isolt le dijo furiosa a William que ya no lo necesitaba. El pukwudgie le echó una mirada furibunda y se desvaneció.

Los chicos Boot y James Steward

Isolt había sacrificado a su único amigo por dos niños pequeños que quizás no sobrevivirían. Afortunadamente lo lograron y se llevó una grata sorpresa al descubrir que eran mágicos.

Los padres de Chadwick y Webster eran magos y los habían llevado a América en busca de aventuras fascinantes. El viaje terminó en tragedia cuando la familia se adentró en los bosques y se encontró con el escondetrás. Al no estar familiarizado con este tipo de espíritus, el señor Boot pensó que se trataba de un boggart común o de jardín e intentó ridiculizarlo. El desenlace, como Isolt y William presenciaron, fue horrible.

Los niños estuvieron tan graves las dos primeras semanas que Isolt no se atrevió a dejarlos. La preocupaba que, con las prisas de salvar a los niños, no había podido enterrar dignamente a sus padres. Cuando Chadwick y Webster por fin se recuperaron lo suficiente como para poder dejarlos solos unas horas, Isolt volvió al bosque con la intención de cavar unas tumbas que los chicos pudieran visitar algún día.

Para su sorpresa, al llegar al claro se encontró con un joven llamado James Steward. Él también pertenecía al asentamiento de Plymouth. Tras perder a la familia que había conocido en su viaje a América, entró en el bosque para buscarlos.

Isolt observó cómo James terminaba de marcar las tumbas que había cavado a mano. Después, recogió las varitas rotas que había encontrado junto a los señores Boot. Con el entrecejo fruncido, examinó el centro brillante de fibra de corazón de dragón que sobresalía de la varita del señor Boot y la agitó a la ligera. Como siempre sucede cuando un nomaj agita una varita, esta se rebeló. James salió despedido del claro y cayó noqueado al golpearse con un árbol.

Se despertó en un pequeño refugio de ramas y pieles y se encontró con que Isolt lo estaba cuidando. Ella no podía ocultarle su magia en un lugar tan pequeño, sobre todo cuando preparaba pociones para ayudar a recuperarse a los niños Boot o cuando usaba su varita para cazar. La idea de Isolt era desmemoriar a James cuando se recuperase del golpe y enviarlo de nuevo a la colonia de Plymouth.

Pero mientras tanto, disfrutaba de tener un adulto con el que hablar, sobre todo alguien que se llevaba bien con los Boot y los entretenía mientras se recuperaban de sus heridas mágicas. Como James había sido cantero en Inglaterra, ayudó a Isolt a construir una casa de piedra en lo alto del monte Greylock elaborando un diseño factible que ella puso en pie en apenas una tarde. Isolt decidió llamar a su nuevo hogar Ilvermorny, en recuerdo de la cabaña en la que había nacido y que Gormlaith había destruido.

Día tras día, Isolt se prometía desmemoriarlo, pero el miedo de James a la magia se iba desvaneciendo poco a poco hasta que finalmente pareció más fácil admitir que estaban enamorados. Se casaron y no hubo más que hablar.

Cuatro casas

Isolt y James consideraban a los Boot sus hijos adoptivos. Isolt les contó las historias de Hogwarts que Gormlaith le había transmitido. Los niños deseaban ir a ese colegio y preguntaban constantemente por qué no podían volver todos a Irlanda para esperar allí sus cartas. Pero Isolt no quería asustarles hablándoles de Gormlaith. A cambio, les prometió que cuando cumplieran once años, encontraría una varita para cada uno (las de sus padres eran irreparables) y asistirían a clases de magia en la casa.

Esta promesa despertó la imaginación de Chadwick y Webster. Prácticamente todas las ideas que los chicos tenían sobre cómo debía de ser un colegio de magia se basaban en Hogwarts, así que se empeñaron en que Ilvermorny tuviera cuatro casas. Enseguida abandonaron la idea de ponerle sus nombres, como fundadores, pues Webster creía que una casa que se llamase Webster Boot nunca podría ganar nada, y optaron por elegir cada uno su criatura mágica favorita. Chadwick, un chico inteligente aunque algo temperamental, eligió el ave del trueno, un pájaro que puede generar una tormenta con solo volar. El obstinado pero leal Webster optó por el wampus, un felino mágico de aspecto similar a una pantera, rápido, fuerte y prácticamente imposible de matar. Para Isolt se trataba, por supuesto, de la serpiente cornuda que seguía visitando y por la que sentía una afinidad especial.

Cuando le preguntó cuál era su criatura favorita, James no supo qué decir. El único nomaj de la familia no era capaz de identificarse con las criaturas mágicas que el resto conocía tan bien. Finalmente, eligió al pukwudgie porque las anécdotas que su mujer le había contado del cascarrabias de William siempre le hacían reír.

Y así es como se crearon las cuatro casas de Ilvermorny. Aunque los cuatro fundadores aún no lo sabían, las personalidades de cada uno se filtraron en las casas que habían bautizado con tanta ligereza.
El sueño

El undécimo cumpleaños de Chadwick se acercaba e Isolt no sabía cómo conseguir la varita que le había prometido. Que ella supiese, la única varita que había en América era la que le había robado a Gormlaith. No se atrevía a diseccionarla para averiguar cómo estaba fabricada y, tras investigar las varitas de los padres de los chicos, solo pudo averiguar que la fibra de corazón de dragón y el pelo de unicornio que contenían se habían marchitado hasta morir.

La víspera del cumpleaños de Chadwick, Isolt soñó que bajaba al arroyo en busca de la serpiente cornuda; esta salía del agua y acercaba su cabeza para que pudiera cortar una gran esquirla de su cuerno. Así que se despertó en plena oscuridad y se dirigió al arroyo.

La serpiente cornuda la estaba esperando. Levantó su cabeza igual que en el sueño, cortó el trozo de su cuerno y le dio las gracias antes de regresar a casa para despertar a James, que había decorado la casa haciendo alarde de su habilidad con la piedra y la madera.

Cuando Chadwick se despertó al día siguiente, encontró una varita tallada finamente que contenía el cuerno de la serpiente. Isolt y James lograron crear una varita de poder excepcional.

La fundación del Colegio Ilvermorny

Cuando Webster cumplió once años, la reputación de su pequeña escuela familiar ya había crecido. Dos niños mágicos más de la tribu wampanoag se habían sumado a una madre narragansett y sus dos hijas, y todos ellos estaban interesados en aprender movimientos de varita a cambio de compartir sus propios conocimientos mágicos. Cada uno recibió varitas hechas por Isolt y James. Algún tipo de instinto protector le dijo a Isolt que reservase los núcleos de serpiente cornuda para sus hijos, así que James y ella aprendieron a usar otro tipo de núcleos, como pelos de wampus, fibras de corazón de snallygaster o cuernos de jackalope.

Corría el año 1634 y la escuela había crecido mucho más de lo que podía haber soñado la familia. La cabaña crecía un poco más cada año. Como el número de alumnos había crecido, aunque el colegio era aún pequeño, había suficientes niños para hacer realidad el sueño de Webster y realizar competiciones entre las casas. Sin embargo, la fama de la escuela aún no había trascendido más allá de las tribus de indios y de los colonos europeos de la región, y el colegio no tenía alumnos internos. Los únicos que se quedaban en Ilvermorny una vez caía la noche eran Isolt, James, Chadwick, Webster y las gemelas recién nacidas: Martha, como la madre de James, y Rionach, como la de Isolt.

La venganza de Gormlaith

Esta gran familia, feliz y atareada, ignoraba que un gran peligro les acechaba. Los rumores de la fundación de un nuevo colegio de magia en Massachusetts habían llegado al viejo continente. Se decía que la directora recibía el sobrenombre de Morrigan en honor de la famosa bruja irlandesa. Sin embargo, hasta que no se enteró de que el nombre de la escuela era Ilvermorny, Gormlaith no se creyó que Isolt había viajado hasta América sin que nadie se diera cuenta para casarse, no con un muggle de nacimiento, sino con un auténtico muggle. Además, había abierto una escuela para formar a cualquiera que tuviera una pizca de magia.

Hacía ya tiempo que Gormlaith había comprado una nueva varita en la tienda que tanto despreciaba, la de Ollivanders, para sustituir a la preciada reliquia familiar que Isolt había robado. No quería que su sobrina supiera que estaba en camino hasta que fuera demasiado tarde, así que, sin saberlo, imitó a Isolt: se hizo pasar por hombre y zarpó a bordo del Bonaventure. Con la maldad que le caracterizaba decidió utilizar el nombre de William Sayre, padre de Isolt. Gormlaith llegó a Virginia y, con mucho sigilo, se dirigió hacia Massachusetts y el monte Greylock. Llegó a la montaña una noche de invierno. Se proponía devastar la segunda Ilvermorny, matar a los padres que habían frustrado su ambición de formar una gran familia de sangre limpia, secuestrar a sus sobrinas-nietas, las últimas de tan sagrado linaje, y regresar con ellas a la Cañada de la Bruja.

En cuanto divisó el gran edificio de granito que se alzaba en la oscuridad sobre el monte Greylock, Gormlaith echó una maldición sobre la casa que contenía los nombres de Isolt y James y que hizo que estos cayeran en un profundo sueño encantado.

Después, pronunció una sola palabra sibilante en lengua pársel, la lengua de las serpientes. La varita que durante tantos años había servido a Isolt tembló una vez en la mesita de noche y se desactivó. En todos los años que se valió de ella, Isolt nunca supo que en su mano tenía la varita de Salazar Slytherin, uno de los fundadores de Hogwarts, y que contenía un fragmento del cuerno de una serpiente mágica: en este caso, de un basilisco. El creador había instruido a la varita para que se durmiese cuando se le ordenase, un secreto que los miembros de la familia de Slytherin se habían pasado de generación en generación.

Lo que Gormlaith no sabía era que en la casa vivían otras dos personas a las que no había encantado, pues no había oído hablar ni de Chadwick, de dieciséis años, ni de Webster, de catorce. El otro dato que no sabía era lo que contenía el núcleo de sus varitas: el cuerno de la serpiente de río. Esas varitas no se desactivaron cuando Gormlaith habló en pársel, sino que, al oír aquella lengua antigua, el centro mágico comenzó a vibrar y, presintiendo que su dueño estaba en peligro, empezó a emitir una nota musical grave, la misma que emite la serpiente cornuda cuando siente una amenaza.

Los niños Boot se despertaron y salieron de la cama. Chadwick miró instintivamente por la ventana. Entre los árboles pudo ver la silueta de Gormlaith Gaunt acercándose sigilosamente hacia la casa.

Como todos los niños, Chadwick había oído y entendido más de lo que sus padres adoptivos se imaginaban. Creían que habían conseguido protegerle de las historias de la cruel Gormlaith, pero se equivocaban. Cuando era pequeño, Chadwick oyó a Isolt hablar del motivo por el que se había escapado de Irlanda y, lo que no podían imaginar ella y James, es que a menudo la imagen de una vieja bruja le atormentaba en sueños, acercándose poco a poco a Ilvermorny a través de los árboles. Esta vez, la pesadilla se había materializado.

Le dijo a Webster que avisara a sus padres e hizo lo único que en aquel momento tenía sentido para él: salió corriendo de la casa para enfrentarse a Gormlaith e impedir que entrase a donde su familia dormía.

Gormlaith no esperaba encontrarse con un mago adolescente y lo subestimó en un principio. Chadwick esquivó su maldición con destreza y comenzaron el duelo. Gormlaith, a pesar de ser mucho más poderosa que Chadwick, tuvo que admitir que el chico tenía talento y había sido bien instruido. Mientras le echaba maldiciones con el objetivo de someterlo y lo hacía retroceder hacia la casa, le preguntó por el origen de su familia pues, según dijo, detestaría matar a un sangre limpia.

Mientras, Webster intentaba despertar a sus padres, pero el encantamiento los había afectado con tal profundidad que ni los gritos de Gormlaith ni las maldiciones que golpeaban la casa pudieron despertarlos. Webster se lanzó escaleras abajo y se sumó al duelo que proseguía al pie de la casa.

Este dos contra una le puso las cosas difíciles y, por si fuera poco, los núcleos gemelos de las varitas de los Boot multiplicaban su fuerza por diez al utilizarse contra un mismo enemigo. A pesar de todo, la magia de Gormlaith era suficientemente oscura y fuerte como para hacerles frente. Por un lado, Gormlaith aún reía y prometía a los chicos indulgencia si podían probar que eran sangre limpia; por otro, Chadwick y Webster ponían todo su empeño en evitar que la bruja llegase hasta su familia. Los hermanos se vieron forzados a entrar en la casa. Isolt y James seguían durmiendo mientras las paredes se resquebrajaban y las ventanas se hacían añicos en el piso de abajo, pero las gemelas se despertaron y empezaron a llorar de miedo.

Eso fue lo que deshizo el encantamiento de Isolt y James. La rabia y la magia no podían despertarlos, pero los alaridos de sus hijas rompieron la maldición que Gormlaith había echado, la cual, al igual que Gormlaith, no tenía en cuenta el poder del amor. Isolt le gritó a James que fuese hacia las niñas y ella corrió para ayudar a sus hijos adoptivos con la varita de Slytherin en la mano.

Cuando la levantó para atacar a su odiada tía, se dio cuenta de que, para lo que iba a servirle, la varita durmiente era igual que un palo roto. Regodeándose, Gormlaith hizo que Isolt, Chadwick y Webster retrocediesen escaleras arriba y los dirigió hacia el lugar del que procedía el llanto de sus sobrinas-nietas. Finalmente logró abrir las puertas de su dormitorio y allí encontró a James listo para morir delante de las cunas de sus hijas. Isolt estaba convencida de que todo estaba perdido y llamó a gritos a su padre asesinado sin saber lo que decía.

Se oyó un gran estruendo y la luz de la luna desapareció unos instantes cuando William el pukwudgie apareció en el alféizar. Antes de que Gormlaith supiese qué estaba pasando, una flecha envenenada le había atravesado el corazón. Se le escapó un grito sobrenatural que se pudo oír a cientos de kilómetros. La vieja bruja se había aprovechado de todo tipo de magia oscura para volverse invencible y todas esas maldiciones reaccionaron en contacto con el veneno del pukwudgie, petrificándola hasta volverla tan quebradiza como el carbón y romperse en un millón de pedazos. La varita de Ollivanders cayó al suelo y explotó. Todo lo que quedaba de Gormlaith Gaunt era un montón de polvo humeante, un palo roto y una fibra de corazón de dragón carbonizada.

William les había salvado la vida. A cambio de su gratitud, el pukwudgie bramó que se había dado cuenta de que Isolt no se había dignado a decir su nombre en una década y que se sentía ofendido porque solo le llamaba cuanto estaba a punto de morir. Ella tuvo el tacto de no decir que había llamado a otro William. James estaba encantado de conocer al pukwudgie del que había escuchado tantas historias y, sin recordar que esta especie odiaba a casi todos los humanos, apretó la mano del perplejo William y le dijo lo agradecido que estaba por haberle puesto su nombre a una de las casas de Ilvermorny.

Se cree que este halago ablandó el corazón de William porque al día siguiente trasladó a su familia de pukwudgies a la casa y, a regañadientes como siempre, los ayudó a reparar todos los destrozos que había causado Gormlaith. Fue entonces cuando afirmó que los magos eran demasiado lelos como para protegerse bien y negoció un anticipo considerable en oro para convertirse en el servicio privado de seguridad y mantenimiento del colegio.

El legado de Slytherin

La varita de Slytherin seguía inactiva tras la orden en pársel de Gormlaith. Isolt no hablaba la lengua y, además, no quería volver a utilizar una varita que era lo único que quedaba ya de su triste infancia. Ella y James la enterraron lejos de los terrenos del colegio.

Al cabo de un año, una especie desconocida de colubrina había crecido allí donde estaba enterrada la varita. Intentaron podarlo y arrancarlo de la tierra, pero el árbol resistía. Después de algunos años descubrieron que las hojas tenían poderes medicinales. El árbol parecía atestiguar el hecho de que la varita de Slytherin, al igual que sus descendientes repartidos por el mundo, contenía bondad y maldad. Lo mejor de él parecía haber migrado a América.

Crecimiento del colegio

Los años que siguieron a aquel incidente, la fama de Ilvermorny creció sin parar. La casa de granito se convirtió en un castillo y contrataron a nuevos profesores para cubrir una demanda cada vez mayor. Magos y brujas de toda América empezaron a acudir al colegio, y este se tuvo que convertir en un internado. Ya en el siglo diecinueve, Ilvermorny había adquirido la fama internacional que aún conserva hoy en día. Isolt y James compartieron la dirección del colegio durante muchos años y fueron muy queridos tanto por muchas generaciones de estudiantes como por sus familias.

Chadwick se convirtió en un gran mago que viajó por medio mundo y escribió Los encantamientos de Chadwick, Volúmenes I-VII, libros que a día de hoy aún se utilizan en las aulas de Ilvermorny. Se casó con una sanadora mexicana llamada Josefina Calderon, y la familia Boot-Calderon sigue siendo una de las familias de magos más prominentes de América.

Antes de que se crease el MACUSA (el Mágico Congreso de USA), el Nuevo Mundo carecía de seguridad mágica. Webster Boot se convirtió en lo que ahora llamaríamos auror autónomo. Durante un viaje a Londres para repatriar a un mago tenebroso especialmente cruel, Webster conoció y se enamoró de una joven bruja escocesa que trabajaba en el Ministerio de Magia. Así que parte de la familia Boot regresó a su país de origen y los descendientes de Webster se formaron en Hogwarts.

Martha, la mayor de las gemelas de James e Isolt, era una squib. Aunque sus padres y hermanos adoptivos la querían mucho, era doloroso para ella crecer en Ilvermorny sin poder desarrollar su magia. Finalmente se casó con el hermano no mágico de un amigo de la tribu pocomtuc y desde entonces vivió como una nomaj.

Rionach, la pequeña de las gemelas, fue profesora de Defensa Contra las Artes Oscuras en Ilvermorny durante muchos años. Rionach nunca se casó. Se había extendido el rumor, aunque la familia nunca lo confirmó, de que Rionach, al contrario que su hermana Martha, podía hablar en lengua pársel y estaba decidida a no perpetuar el linaje de Slytherin (la rama norteamericana de la familia no sabía que Gormlaith no era la última Gaunt, y que en Inglaterra el árbol genealógico seguía creciendo).

Isolt y James vivieron más de 100 años. Habían visto a la cabaña de Ilvermorny convertirse en castillo de granito y, cuando murieron, su colegio era tan famoso que familias de toda Norteamérica suplicaban poder educar a sus hijos allí. Habían contratado personal, construido dormitorios y ocultado el colegio de nomajs cotillas con ingeniosos encantamientos. En resumen, la niña que había soñado con ser alumna de Hogwarts había ayudado a fundar el equivalente norteamericano.

Ilvermorny hoy

Como sería de esperar en una escuela cofundada por un nomaj, Ilvermorny tiene fama de ser una de las instituciones más democráticas y menos elitistas de todas las grandes escuelas de magia.

Unas estatuas de mármol de Isolt y James flanquean la entrada al castillo de Ilvermorny. Las puertas dan a una sala redonda rematada por una cúpula de cristal. A media altura, una balconada de madera recorre la sala. La estancia no tiene más decoración que cuatro enormes tallas de madera que representan a las casas: la serpiente cornuda, la pantera wampus, el ave del trueno y el pukwudgie.

Mientras el resto del colegio observa desde la balconada, los nuevos estudiantes entran en fila en el vestíbulo. Se distribuyen alrededor de la sala y, uno a uno, deben ir hasta el centro y colocarse sobre el símbolo del nudo gordiano grabado en el suelo de piedra. En silencio, el colegio espera a que las tallas actúen. Si la serpiente cornuda quiere al alumno, el cristal engarzado en su frente se ilumina. Si el wampus lo escoge, se oye un rugido. El ave del trueno indica su aprobación batiendo las alas y el pukwudgie alza una flecha al aire.

Si más de una talla indica que desea incluir al alumno en su casa, el alumno es quien decide. Rara vez, quizás una por década, recibe un alumno una invitación a las cuatro casas. Seraphina Picquery, quien presidió el MACUSA de 1920 a 1928, fue la única bruja de su generación que recibió tal honor, y eligió la serpiente cornuda.

Hay quien dice que las casas de Ilvermorny simbolizan al mago o bruja completo: Serpiente cornuda representa la mente; Wampus, el cuerpo; Pukwudgie, el corazón; y Ave del trueno, el alma. Otros aseguran que Serpiente cornuda elige a los sabios; Wampus, a los guerreros; Pukwudgie, a los sanadores; Ave del trueno, a los aventureros.

La Ceremonia de Selección no es la única gran diferencia entre Hogwarts e Ilvermorny (aunque sí que tienen muchas similitudes). Tras haber sido asignados a una casa, los estudiantes deben pasar a una gran sala en la que eligen (o son elegidos por) una varita. Hasta que se revocó la Ley Rappaport en 1965, la cual imponía un acatamiento muy estricto del Estatuto del Secreto, a los niños no se les permitía tener una varita hasta que llegaban a Ilvermorny. Y lo que es más, tenían que dejar las varitas en Ilvermorny durante las vacaciones y solo cuando cumplían diecisiete se les permitía llevar una varita fuera del colegio.

Las túnicas de Ilvermorny son de color azul y rojo arándano. Los colores rinden homenaje a Isolt y James: azul porque era el color favorito de Isolt y porque de pequeña le hubiese gustado pertenecer a Ravenclaw; rojo por el dulce preferido de James, tarta de arándanos. Las túnicas de los alumnos de Ilvermorny se atan con un nudo gordiano de oro, por aquel broche que Isolt encontró en las ruinas de la primera cabaña Ilvermorny.

Varios pukwudgies aún trabajan en el colegio, todos quejándose, todos insistiendo que no desean quedarse allí, y aun así, misteriosamente, todos siguen allí año tras año. Uno de ellos es muy anciano y responde al nombre de William. Se ríe ante la idea de que él sea el William original que salvó la vida de Isolt y James y apunta, acertadamente, que si el primer William siguiese vivo tendría más de 300 años. Sin embargo, nadie ha descubierto cuántos años pueden llegar a vivir los pukwudgies. William se niega a dejar que nadie más lustre la estatua de Isolt a la entrada del colegio y, cada año, en el aniversario de su muerte, deja un ramo de flores sobre su tumba, algo que suele ponerle de mal humor si alguien es tan insensible como para mencionarlo.

Extraído de Pottermore.

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19/02/2019, 14:39
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Siglo XVI - XVII 

Cuando los exploradores europeos pisaron el continente por primera vez, lo llamaron el Nuevo Mundo. Sin embargo, los magos sabían de la existencia de América mucho antes que los muggles (nota: cada país denomina a los muggles de distinta manera, y en la comunidad americana utilizan el término "no-majs"). Los diferentes métodos mágicos para viajar (la aparición y las escobas, sin olvidar las visiones y las premoniciones) permitieron a las comunidades de magos, incluso a las más remotas, estar en contacto desde la Edad Media.

Las comunidades mágicas de América, Europa y África se conocían mucho antes de que los no-mags europeos emigrasen en el siglo XVII, y ya estaban al tanto de sus similitudes. Había familias mágicas definidas, pero la magia también aparecía por sorpresa en familias que, hasta entonces, no habían tenido un mago o una bruja. En general, la proporción de personas mágicas parecía ser similar en todos los países, al igual que la disposición de los no-mags. En la comunidad india de Norteamérica algunos magos y brujas eran aceptados dentro de su tribu, e incluso elogiados, y se convertían en reputados hechiceros o excepcionales cazadores. Sin embargo, otros eran deshonrados por sus creencias, a menudo bajo el pretexto de que estaban poseídos por espíritus malévolos.

La leyenda de los cambiapieles (brujas o magos malvados que se pueden transformar en animal siempre que lo desean) se basa en hechos reales. Circulaba el rumor de que los animagos indios habían sacrificado a sus familiares más cercanos para conseguir los poderes de transformación. En realidad, la mayor parte de los animagos adoptaban sus formas animales para huir si les perseguían o para cazar para la tribu. Este tipo de infundios solían ser invenciones de los curanderos no-mags, quienes a veces aparentaban poseer poderes mágicos y tenían miedo de ser descubiertos.

La comunidad de magos indios del norte de América estaba especialmente dotada para la magia con animales y plantas, principalmente para las pociones, mucho más sofisticadas que las que se conocían en Europa. Pero la mayor diferencia entre la magia de los indios norteamericanos y la de los magos de Europa residía en el uso de la varita.

La varita mágica nació en Europa. Las varitas canalizan la magia para que sea más precisa y más poderosa, aunque algo que suele distinguir a los grandes magos y brujas es que también pueden llegar a ser capaces de producir magia de gran calidad sin varita. Como los animagos y los fabricantes de pociones indios demostraron, la magia sin varita puede llegar a alcanzar cierta complejidad, pero los encantamientos y las transformaciones son muy difíciles sin una.

 

A partir del siglo XVII

Cuando los no-mags Europeos empezaron a emigrar al Nuevo Mundo, también hubo magos y brujas de origen Europeo que se dirigieron a América a instalarse. Al igual que sus compatriotas no-mags, tenían todo tipo de razones por las que dejar sus países. A algunos les empujaba el sentido de la aventura, pero la mayoría huía de algo: de no-mags hostiles, de otro mago o bruja, pero también de las autoridades mágicas. Estos últimos buscaban pasar desapercibidos entre las oleadas de no-mags, o esconderse entre la población mágica india, que en general se alegraba de dar la bienvenida y proteger a sus hermanos europeos.

Sin embargo, desde el principio quedó patente que la vida para magos y brujas en el Nuevo Mundo iba a ser mucho más dura que en el Viejo Mundo. Y esto se debía, principalmente, a tres razones:

En primer lugar, al igual que los no-mags, habían llegado a un continente con muy pocas comodidades, excepto las que fabricaban ellos mismos. En su país de origen no tenían más que acercarse a la botica para encontrar todo lo que necesitaban para las pociones. Aquí, tenían que buscar ingredientes entre plantas mágicas que desconocían. No había fabricantes de varitas establecidos y el Colegio Ilvermorny de Magia y Hechicería, que un día se convertiría en uno de los colegios de magia más importantes del mundo, no era más que una casucha con dos profesores y dos estudiantes.

En segundo lugar, las acciones de los no-mags colonos conseguían que la población no mágica de la mayoría de los países natales de los magos pareciese encantadora. Los emigrantes no solo libraban guerras contra la población nativa, lo cual afectó seriamente a la unidad de la comunidad mágica, sino que, además, dadas sus creencias religiosas eran muy intolerantes ante cualquier indicio de magia. Los puritanos no pestañeaban al acusarse los unos a los otros de hechicería, sin apenas pruebas, así que los magos y brujas del Nuevo Mundo hacían bien en desconfiar de ellos.

Por último, el que probablemente fuese el mayor peligro al que tuvieron que enfrentarse los magos al llegar a Norteamérica, los rastreros. Como la comunidad mágica en América era pequeña, dispersa y muy hermética, no disponía de ningún cuerpo de seguridad propio. Esto dejó un vacío que fue llenado por una banda sin escrúpulos de mercenarios mágicos de muchas nacionalidades, banda que formó un comando brutal y temido dedicado a dar caza no solo a criminales, sino a cualquiera a cambio de oro. Año tras año, los rastreadores se fueron volviendo más corruptos. Lejos de la jurisdicción de sus gobiernos mágicos nativos, muchos se excedían en el uso del poder y en una crueldad que no estaba justificada por la misión. Disfrutaban con los derramamientos de sangre y las torturas, e incluso llegaron a traficar con sus camaradas magos. El número de rastreros se multiplicó a lo largo y ancho de América a finales del siglo XVII y hay pruebas de que hicieron pasar a no-mags inocentes por magos con tal de cobrar recompensas de ingenuos miembros de la comunidad no mágica.

Los famosos juicios por brujería de Salem de 1692 y 1693 devastaron a la comunidad mágica. Los historiadores mágicos coinciden en que entre los supuestos jueces puritanos había, al menos, dos rastreros que esperaban librarse de las enemistades que se habían granjeado en América. Buena parte de las sentenciadas sí eran brujas, pero plenamente inocentes de los crímenes de los que las acusaron. Los demás eran simples no-mags que tuvieron la mala suerte de verse envueltos en la histeria y sed de sangre del momento.

Los hechos de Salem afectaron a la comunidad mágica más allá de aquellas muertes trágicas. El efecto inmediato de los juicios fue que muchos magos y brujas huyeron de América, y muchos más decidieron no emigrar al nuevo continente. Esto supuso una interesante fluctuación en la población mágica de Norteamérica, en comparación con las poblaciones de Europa, Asia y África. Hasta la primera mitad del siglo XX, había muchos menos magos y brujas entre la población americana que en los otros cuatro continentes. Las familias de sangre pura, quienes se mantenían al tanto de las actividades de tanto puritanos como rastreros a través de los diarios del mundo mágico, apenas emigraron a América. Eso dio pie a que en el Nuevo Mundo hubiese un mayor porcentaje de magos y brujas de familias nomagas. Aunque estos a menudo se casaban entre sí y formaban familias enteramente mágicas, la ideología de los sangre pura limpia que ha perseverado a lo largo de gran parte de la historia mágica de Europa apenas ganó muy poco terreno en América.

Probablemente, la consecuencia más importante de los juicios de Salem fue la creación del Magicongreso Único de la Sociedad América en 1693, que precede en casi un siglo a la versión nomaga, aunque todos los magos y brujas lo llaman por su abreviatura, MACUSA. Por primera vez, la comunidad mágica de Norteamérica aunó esfuerzos para crear leyes propias, estableciendo un mundo mágico dentro de un mundo nomago, al igual que existía en otros países. La primera tarea del MACUSA fue juzgar a los rastreros que habían traicionado a los de su clase. Los condenados por asesinato, tráfico de magos, tortura y toda clase de crueldades, fueron ejecutados por sus crímenes.

Algunos de los rastreros más infames escaparon de la justicia. Aunque se emitieron órdenes de arresto internacionales, consiguieron desaparecer para siempre mezclándose entre la comunidad no mágica. Algunos se casaron con no-mags y si alguno de sus hijos nacía con magia, se libraban de ellos a favor de los que no tenían magia, para poder mantener su tapadera. Los rastreros, vengativos y apartados de su gente, transmitieron a sus descendientes la convicción absoluta de que la magia era real, y que los magos y brujas debían exterminarse allí donde se encontraran.

El historiador de la magia de América Theophilus Abbot identificó a varias de esas familias: todas ellas creían ciegamente en la magia y todas sentían un profundo odio por ella. Los no-mags americanos suelen ser más desconfiados y más difíciles de engañar en lo que a magia se refiere que otras poblaciones y eso puede deberse en parte a las creencias y actividades antimagia de los descendientes de los rastreros. Esto ha supuesto considerables repercusiones legislativas para la comunidad mágica de Norteamérica.

 

Ley de Rappaport

En 1790, la decimoquinta presidenta del MACUSA, Emily Rappaport, instauró una ley por la cual se establecía la segregación absoluta entre las comunidades de magos y no-mags. La decisión se tomó tras una de las mayores infracciones del Estatuto Internacional del Secreto que dio pie a una reprimenda humillante de la Confederación Internacional de Magos. El asunto era mucho más serio porque la infracción se produjo dentro del propio MACUSA.

En esta catástrofe estaba implicada la hija del Guardián del Tesoro y Dragots (el dragot es la moneda de los magos en curso en Norteamérica, y el Guardián de los Dragots, tal y como implica el título, es más o menos el equivalente al secretario de Hacienda). Aristotle Twelvetrees era un hombre competente, pero su hija, Dorcus, era tan tonta como bonita. Había sido una pésima estudiante en Ilvermorny y cuando su padre ocupó el cargo, aún vivía en la casa familiar y apenas practicaba magia, pues estaba más interesada en su guardarropa, sus peinados y sus fiestas.

Un día, en un picnic local, Dorcus Twelvetrees se enamoró locamente de un apuesto nomago llamado Bartholomew Barebone. Lo que Dorcus no sabía era que Bartholomew era el descendiente de un rastrero. Nadie de su familia tenía poderes mágicos, pero creía firmemente que la magia existía y que todos los magos y brujas eran malvados.

Dorcus, completamente ajena al peligro, se tomó el interés de Bartholomew por sus "pequeños trucos" al pie de la letra. Las ingenuas preguntas de su pretendiente consiguieron embaucarla, y le confió las direcciones secretas del MACUSA y de Ilvermorny, junto con información sobre la Confederación Internacional de Magos y todo lo que estos organismos hacían para proteger y ocultar a la comunidad mágica.

Una vez consiguió sonsacarle a Dorcus todo lo que quería saber, Bartholomew le robó la varita que ella le había mostrado con tanta diligencia. Se la enseñó a todos los periodistas que encontró, reunió a un grupo de amigos armados y se propuso perseguir y matar, idealmente, a todos los magos y brujas de la región. Bartholomew incluso llegó a imprimir pasquines con las direcciones de los sitios de reunión de magos y brujas y escribió cartas a figuras nomagas destacadas, algunos de los cuales creyeron que se debía investigar si realmente se celebraban "reuniones maléficas secretas" en tales sitios.

Embriagado por la misión de sacar a la luz la hechicería de América, Bartholomew Barebone metió la pata y disparó a lo que él pensaba que era un grupo de magos del MACUSA, pero que resultó ser unos no-mags que tuvieron la mala fortuna de salir de un supuesto edificio mágico mientras él lo vigilaba. Por suerte, nadie murió, y Bartholomew fue detenido y encarcelado por el crimen sin que el MACUSA tuviera que intervenir. Esto supuso un gran alivio para el MACUSA, pues no estaba resultando nada fácil abordar las graves consecuencias de la indiscreción de Dorcus.

Bartholomew había difundido los pasquines por toda la región, y varios periódicos incluso lo tomaron en serio y publicaron fotografías de la varita de Dorcus, con una nota que decía que si se agitaba "daba una buena coz". El edificio donde se ubicaba el MACUSA acaparó tanto la atención que tuvieron que trasladarlo. La presidenta Rappaport no tuvo más remedio que confesar, durante la investigación oficial de la Confederación Internacional de Magos, que no podía estar segura de que todas y cada una de las personas al tanto de la información de Dorcus habían sido desmemorizadas. La filtración fue tan grave que sus secuelas perdurarían durante los años venideros.

Aunque muchos exigieron que fuese a la cárcel de por vida, e incluso que fuese ejecutada, Dorcus solo pasó un año en el calabozo. Cuando salió de prisión, completamente deshonrada y traumatizada, la comunidad mágica de Norteamérica había cambiado por completo, y Dorcus pasó su vida aislada del mundo, con la única compañía de un espejo y un loro.

La Ley de Rappaport, que imponía una estricta segregación entre las comunidades de magos y no-mags, fue la respuesta a la indiscreción de Dorcus. Los magos ya no podían entablar amistad o casarse con no-mags. Los castigos por fraternizar con los no-mags eran severos, y la comunicación con ellos debía limitarse a lo estrictamente necesario para la vida diaria.

La Ley de Rappaport afianzó aún más la gran diferencia cultural entre las comunidades mágicas de América y Europa. En el Viejo Mundo siempre hubo cierta cooperación y comunicación, aunque secreta, entre los gobiernos de los no-mags y sus homólogos del mundo mágico. En Norteamérica, el MACUSA era completamente independiente del gobierno nomago. En Europa, los magos y brujas se casaban con y eran amigos de no-mags. En Norteamérica, los no-mags eran el enemigo. En resumen, la Ley de Rappaport empujó a la comunidad mágica norteamericana, que de por sí ya tenía que lidiar con una población nomaga más desconfiada de lo normal, a una mayor clandestinidad.

 

Años 20

Los magos de América participaron en la Gran Guerra de 1914 a 1918, aunque la gran mayoría de sus compatriotas no-mags no eran conscientes de su ayuda. Como había una facción mágica en cada bando, sus esfuerzos no fueron decisivos, pero lograron muchas victorias, impidieron un mayor número de bajas y derrotaron a sus enemigos mágicos.

Sin embargo, esta empresa común no moderó la postura del MACUSA, y la Ley de Rappaport siguió en vigor, impidiendo que magos y no-mags confraternizasen. Para los años 20, los magos y brujas de los Estados Unidos estaban acostumbrados a vivir más ocultos que sus camaradas europeos, y a elegir a sus amigos únicamente de entre los suyos.

La catastrófica violación del Estatuto del Secreto de Dorcus Twelvetrees formaba ya parte del lenguaje mágico: ser un "dorcus" pasó a ser sinónimo de idiota o inepto. El MACUSA seguía sancionando con penas durísimas a aquellos que incumplían el Estatuto Internacional del Secreto, y también toleraba menos que sus equivalentes europeos los fenómenos mágicos, como los fantasmas, poltergeists y criaturas, por el riesgo que podría suponer que los no-mags los descubrieran.

Tras la gran rebelión de los sasquatch de 1892 (para más información se puede consultar el popular libro "La última batalla de Pie Grande", de Ortiz O'Flaherty), la sede del MACUSA tuvo que trasladarse por quinta vez, pasando de Washington a Nueva York, donde se mantuvo durante los años veinte. La presidenta del MACUSA en esta década fue Madame Seraphina Picquery, una bruja de Savannah, famosa por su talento.

Para los años veinte, el Colegio Ilvermorny de Magia y Hechicería llevaba ya dos siglos prosperando y se consideraba uno de los mejores del mundo. Gracias a las asignaturas comunes de su plan de estudios, todos los magos y brujas dominaban el uso de la varita.

Debido a la legislación que se introdujo a finales del siglo XIX, todos los miembros de la comunidad mágica de Norteamérica debían llevar consigo una "licencia de varita", una medida con la que se pretendía controlar toda la actividad mágica e identificar a los infractores por su varita. Al contrario que en Gran Bretaña, donde Ollivanders era insuperable, Norteamérica contaba con cuatro prestigiosos fabricantes de varitas.

Shikoba Wolfe, de origen chocktaw, alcanzó la fama por sus varitas talladas con intrincados motivos y centro con plumas de la cola del ave del trueno (el ave del trueno es un pájaro mágico americano emparentado con el fénix). Las varitas de Wolfe eran conocidas por ser muy poderosas, pero también muy difíciles de dominar. Eran especialmente apreciadas entre los transformadores.

Johannes Jonker era un mago de familia muggle. Su padre era un dotado ebanista, y él aplicó sus dotes en la fabricación de varitas. Eran muy populares y muy fáciles de reconocer, pues solían tener incrustaciones de nácar. Tras experimentar con muchos centros, el material mágico preferido de Jonker era el pelo de gato wampus.

La fama de Thiago Quintana se extendió como la espuma por todo el mundo mágico cuando entraron en el mercado sus varitas elegantes y generalmente largas. El centro contenía una única espina translúcida del lomo de los monstruos del Río Blanco de Arkansas y producía hechizos poderosos y elegantes. Los temores por la sobreexplotación de estos monstruos se mitigaron cuando se demostró que solo Quintana sabía cómo atraerlos, un secreto que guardó con celo hasta su muerte, momento en el que se dejaron de fabricar las varitas con espinas del monstruo del Río Blanco.

Violetta Beauvais, la famosa fabricante de varitas de Nueva Orleans, se negó durante muchos años a revelar el centro de sus varitas, que siempre fabricaba con madera del espino de los pantanos. Con el tiempo se descubrió que contenían pelo de rougarou, el peligroso monstruo con cabeza de perro que frecuenta los humedales de Luisiana. Hay quien decía que las varitas de Beauvais se sentían tan atraídas por la magia negra como los vampiros por la sangre, sin embargo, más de un héroe de los años veinte luchó armado solo con una varita de Beauvais, y se sabía que la propia presidenta Picquery poseía una.

Al contrario que la comunidad de no-mags en los años veinte, el MACUSA permitía a los magos y brujas consumir alcohol. Muchos de los detractores alegaban que esta permisividad provocaba que llamasen la atención en ciudades llenas de no-mags sobrios. Sin embargo, en un momento de inusitada distensión, se oyó decir a la presidenta Picquery que ser un mago en América era ya de por sí bastante difícil. Como señaló a su secretario de estado: "el agualegre no es negociable".

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19/02/2019, 14:42
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MACUSA

El Mágico Congreso de USA, al que todos los magos y brujas de Norteamérica llaman por su acrónimo, MACUSA, se creó en 1693, tras la introducción del Estatuto Internacional del Secreto. Las brujas y magos de todo el mundo habían llegado a un punto de inflexión y creían que podrían vivir más libres y felices si construían una comunidad clandestina que se apoyara mutuamente, con una administración propia. Una opinión especialmente compartida en Norteamérica debido a los recientes juicios por brujería de Salem.

El MACUSA tomó como modelo el Consejo de Magos de Gran Bretaña, que precedió al Ministerio de Magia. El gobierno del MACUSA se constituyó con representantes electos de las comunidades mágicas de toda Norteamérica para crear leyes que controlaran y protegieran al pueblo mágico de Norteamérica.

El principal objetivo del MACUSA era librar al continente de los rastreros, magos corruptos que cazaban a sus compatriotas magos para lucrarse. El segundo gran reto del MACUSA para garantizar la seguridad era encontrar a todos los criminales del mundo mágico que habían huido a Norteamérica desde Europa o más lejos, precisamente porque carecía de un cuerpo de seguridad organizado como el que tenían en sus países.

El primer presidente del MACUSA fue Josiah Jackson, un mago belicoso que fue elegido para el cargo por sus colegas representantes porque creían que era lo suficientemente firme como para lidiar con las dificultades que siguieron a los juicios por brujería de Salem.

En esos primeros años, el MACUSA no tenía una sede fija, y las reuniones se celebraban en diferentes ubicaciones para evitar ser detectado por los no-mags.

La prioridad del presidente Jackson era reclutar y formar aurores. Los nombres de los doce primeros voluntarios que se formaron como aurores en Estados Unidos ocupan un lugar destacado en la historia de la magia en Norteamérica. Eran tan pocos, y los retos a los que se enfrentaban, tan grandes, que cuando aceptaron el trabajo contaban con tener que dar su vida por él. Desde entonces, los descendientes de estos magos y brujas han sido tratados con gran respeto en Estados Unidos. Los primeros doce voluntarios fueron:

  • Wilhelm Fischer
  • Theodard Fontaine
  • Gondulphus Graves
  • Robert Grimsditch
  • Mary Jauncey
  • Carlos López
  • Mungo MacDuff
  • Cormac O’Brien
  • Abraham Potter
  • Berthilde Roche
  • Helmut Weiss
  • Charity Wilkinson

De estos doce, solo dos vivieron hasta la vejez: Charity Wilkinson, quien se convirtió en la tercera presidenta del MACUSA, y Theodard Fontaine, cuyo descendiente directo, Agilbert, es el actual director del Colegio Ilvermorny de Magia y Hechicería. También debemos destacar a Gondulphus Graves, cuya familia sigue teniendo un gran peso en la política de la magia de Norteamérica, y Abraham Potter, cuyo lejano parentesco con el famoso Harry Potter fue desvelado por genealogistas entusiastas siglos después.

Norteamérica seguía siendo uno de los lugares más hostiles para magos y brujas, especialmente por culpa de los descendientes de los rastreros que se habían desvanecido para siempre entre la comunidad no mágica, pues desconfiaban de todo lo mágico. Al contrario que en la mayoría de los países occidentales, el MACUSA no cooperaba con el gobierno no-mag.

Al principio se construyó un edificio encantado en los montes Apalaches que sirviera como sede del MACUSA, pero con el tiempo esta ubicación resultó ser inconvenientemente remota, especialmente porque los magos, al igual que los no-mags, habían empezado a congregarse en las ciudades.

En 1760, el MACUSA se trasladó a Williamsburg, Virginia, hogar del extravagante presidente Thornton Harkaway. Entre muchos de sus intereses, al presidente Harkaway se le atribuye la cría del crups, un perro que se parece mucho al Jack Russell, salvo por la cola bífida. Los crups son absolutamente fieles a magos y brujas, pero muy agresivos hacia las personas no mágicas. Por desgracia, los canes del presidente Harkaway atacaron con ferocidad a varios no-mags locales, quienes no pudieron emitir un sonido hasta cuarenta y ocho horas después. Por culpa de este delito contra el Estatuto Internacional del Secreto, Harkaway tuvo que dejar la presidencia totalmente desacreditado –puede que no sea una coincidencia que Williamsburg fuese la primera ciudad de Estados Unidos con un hospital psiquiátrico. Seguramente los avistamientos de cosas extrañas cerca de la residencia del presidente Harkaway influyeron en el ingreso de no-mags que estaban, en realidad, perfectamente cuerdos–.

Tras el incidente, el MACUSA se instaló en Baltimore, donde vivía el presidente Able Fleming. El inicio de la guerra de Independencia, seguido de la llegada del congreso no-mag a la ciudad, preocupó tanto al MACUSA que se volvió a trasladar, esta vez a la ciudad hoy conocida como Washington.

Fue allí donde la presidenta Elizabeth McGilliguddy condujo el tristemente célebre debate "¿País o congéneres?" de 1777. Miles de magos y brujas de toda Norteamérica invadieron el MACUSA para asistir a esta extraordinaria reunión; tantos que el gran salón de reuniones tuvo que ser ampliado por obra de magia. La cuestión a debate era: ¿A quién debe lealtad la comunidad mágica norteamericana? ¿Al país que ahora era su hogar o a la comunidad mágica clandestina de todo el mundo? ¿Estaban moralmente obligados a unirse a los no-mags norteamericanos en su lucha para liberarse de los muggles británicos? ¿O no era, sencillamente, su guerra?

Los argumentos a favor y en contra de la intervención eran extensos y la discusión pronto entró en un círculo vicioso. Aquellos a favor de la intervención argumentaban que podrían salvar vidas; los antiintervencionistas, que arriesgaban su propia seguridad al descubrirse en la batalla. Se enviaron mensajeros al Ministerio de Magia en Londres para preguntar a sus homólogos si tenían intención de luchar. Regresaron con un mensaje de cuatro palabras: "Nos mantenemos al margen". La famosa respuesta de McGilliguddy fue aún más breve: "Más os vale". Aunque de manera oficial los magos y brujas de Norteamérica no participaron en la batalla, extraoficialmente intervinieron en muchas ocasiones para proteger a sus vecinos no-mags, y la comunidad mágica celebró el Día de la Independencia al igual que el resto de la sociedad norteamericana, aunque no necesariamente con ellos.

Una de las leyes mágicas más significativas de Estados Unidos se impuso en 1790, cuando el MACUSA aprobó un decreto por el que se establecía la segregación absoluta entre las comunidades de magos y no-mags. La Ley Rappaport, llamada así por la entonces presidenta Emily Rappaport, fue el resultado de una de las mayores infracciones del Estatuto Internacional del Secreto, en la que la hija del Guardián del Tesoro y de los Dragots de Rappaport y el descendiente de un rastrero casi dejan al descubierto la existencia de la magia en todo el mundo. Tras la aprobación de la Ley Rappaport, en Estados Unidos el matrimonio o incluso la amistad entre magos y no-mags pasó a ser ilegal.

La sede del MACUSA permaneció en Washington hasta 1892, cuando la imprevista rebelión de la población sasquatch volvió a poner en peligro su seguridad. Los historiadores achacan la rebelión a Irene Kneedander, directora del Cuerpo de Protección de las Especies Mágicas (Humanoides), cuya interpretación de su cargo pasaba por atacar a cualquier sasquatch "que se pasara de la raya". La presencia de los sasquatch en Washington obligó a realizar encantamientos desmemorizantes en masa y numerosas reparaciones en la sede.

El MACUSA necesitaba un nuevo refugio así que, durante varios años, los magos se infiltraron en el equipo de construcción de un edificio en Nueva York. Para cuando se terminó, el edificio Woolworth podía alojar a no-mags y, si se activaba con los hechizos correctos, podía convertirse en un espacio para magos y brujas. La única marca exterior de la nueva ubicación secreta del MACUSA era el búho tallado sobre la puerta de entrada.

Al igual que ocurre en otros gobiernos mágicos, el Departamento de Aplicación de la Ley Mágica era el departamento más grande del MACUSA.

La Ley Rappaport seguía en vigor en los años veinte y por ello el MACUSA disponía de varios departamentos que no existían en el Ministerio de Magia, como la subdivisión encargada de gestionar la confraternización con los no-mags o la oficina de expedición del carnet de varita que todo el mundo, ciudadanos y visitantes, debían llevar consigo en Estados Unidos.

Una diferencia importante entre el gobierno mágico de Estados Unidos y el del Reino Unido de esta época era la pena por delitos graves. Mientras que a los magos y brujas británicos los enviaban a Azkaban, a los peores criminales de Estados Unidos se les ejecutaba.

Estatuto Internacional del Secreto Mágico 

El Estatuto Internacional del Secreto Mágico (también conocido como Estatuto Internacional del Secreto) es una ley en el mundo mágico que se firmó por primera vez en 1689, y luego se estableció oficialmente en 1692. La ley fue establecida por la Confederación Internacional de Magos, para salvaguardar a la comunidad mágica de los Muggles y ocultar su presencia del mundo en general.

En el siglo XVII, las relaciones entre magos y muggles estaban en su peor momento. Desde principios del siglo XV, la persecución de brujas y magos se aceleró en toda Europa, por lo que muchos en la comunidad de magos sentían, y con razón, que la oferta para ayudar a sus vecinos muggles con su magia era equivalente a ser voluntario para ir a buscar la leña para su propia pira funeraria: muchos magos y brujas fueron encerrados y condenados a muerte bajo la acusación de brujería, y mientras que algunos (como Lisette de Lapin en 1422) lograron usar la magia para escapar, otros como Sir Nicholas de Mimsy-Porpington en 1492 no fueron tan afortunados y fueron despojados inmediatamente de sus varitas. Las familias mágicas eran particularmente propensas a la pérdida de familiares más jóvenes, cuya incapacidad para controlar su propia magia era notoria, y los hacía vulnerables a muggles cazadores de brujas.

La persecución generalizada de los niños magos por Muggles, la escalada de los intentos de los muggles para forzar a las brujas y magos para hacer magia para ellos y enseñarles a usar la magia, un creciente número de quemas de brujas, incluidos varios muggles fueron por error quemados como brujas.

El recientemente creado Ministerio de Magia intentó servir de enlace con el Monarca británico Muggle (entonces conjuntamente Guillermo III y María II) a través de una delegación especial del Ministerio, pidiéndoles la protección de los magos bajo las leyes Muggles. El fracaso de este intento de reconocimiento oficial y protección parece haber sido la gota final que obligó a los magos a moverse voluntariamente en la dirección opuesta, hacia el secreto.

Promulgación

El Estatuto fue firmado por primera vez en 1689, pero no fue sino hasta tres años más tarde, en 1692, que se estableció oficialmente y efectivamente comenzó a ser aplicado por cada Ministerio de Magia.

Los Malfoy eran una familia de magos ricos e influyentes que, en particular, se opusieron fervientemente a la imposición del Estatuto. A pesar de su adhesión a los valores de sangre pura y su creencia en la superioridad de los magos sobre los muggles, los Malfoy siempre habían dibujado una clara distinción entre los pobres muggles y los que tenían la riqueza y la autoridad, sino que históricamente habían sido asociados con círculos Muggles de alta cuna, tales como la realeza (Guillermo el Conquistador y la reina Isabel I siendo ejemplos notables) y la aristocracia, en parte, como resultado de su vasta colección de tesoros y obras de arte muggles. Su fuerte oposición del Estatuto era, en definitiva, por el hecho de que la ley les obligaría a retirarse de este ámbito agradable de la vida social.

Una vez que el Estatuto fue aprobado como ley en 1692, sin embargo, los Malfoy cortaron todos los lazos con las familias Muggles, cuando se dieron cuenta de que más de la oposición, les alejaría del nuevo centro de poder: el Ministerio de Magia de nueva creación. Ellos realizaron un viraje brusco, y se convirtieron en partidarios del Estatuto, acaloradamente negaron que alguna vez habían confraternizado con esas personas, a pesar de la amplia evidencia en contra, que los historiadores de magos afirman.

Ahora que los muggles y magos fueron sociedades alienadas, parecía natural que los magos se reunieran y crearan, como la profesora Bathilda Bagshot escribió en su Historia de la Magia, "sus propias pequeñas comunidades dentro de una comunidad". Varias familias mágicas fueron atraídas a los pequeños pueblos y aldeas, donde podrían iniciar sus propias comunidades, en el apoyo mutuo y la protección, junto con personas tolerantes y a veces Muggles Confundidos. Los pueblos de Tinworth en Cornwall, Upper Flagley en Yorkshire, Ottery St. Catchpole en Devon, y el Valle de Godric, en el oeste del país son algunos de los más célebres de estas moradas medio mágicas cuyas comunidades mágicas se remontan a continuación.

El Estatuto establece que cada Ministerio de Magia se debe encargar de ocultar la presencia de la comunidad mágica en su propio país. Cada Ministerio es responsable de, entre otras cosas, el control de las bestias mágicas, frenar las manifestaciones públicas de la magia en menores de edad, y la garantía de que los juegos mágicos y los deportes se jueguen sin riesgo de ser descubiertos.

Cláusula 73

En 1750, se añadió la cláusula 73 al Estatuto. La Cláusula establece:

«Cada órgano de gobierno mágico será el responsable de la ocultación, la atención y el control de todas las bestias mágicas, seres y espíritus que habitan dentro de las fronteras de su territorio. Si cualquier criatura causa daños, o queda en conocimiento de la comunidad Muggle, la nación de este órgano de gobierno mágico, éste será sujeto de disciplina por la Confederación Internacional de Magos.»
—Cláusula 73, Estatuto Internacional del Secreto Mágico.

Guía de vestimenta

El Estatuto también incluye las pautas de vestimenta para las brujas y los magos cuando estén entre Muggles. El Estatuto establece:

«Cuando se mezclen con Muggles, los magos y brujas deben adoptar un estándar totalmente Muggle de vestir, que se ajustará en la mayor medida posible a la moda del día. La ropa debe ser apropiada para el clima, la región geográfica y la ocasión. Nada de auto-alteración o ajuste debe ser usado en frente de los muggles.»
—Internacional Estatuto del Secreto Mágico.

A pesar de estas claras instrucciones, las faltas con respecto a la ropa han sido una de las infracciones más comunes del Estatuto Internacional del Secreto desde sus inicios.

Infracciones

Las infracciones del Estatuto, como el uso de la magia delante de los muggles por ninguna buena razón, son tratados por el Ministerio correspondiente, con una variedad de castigos disponibles para ser ejecutados contra el autor del delito.

Infracciones de la Cláusula 73

La Cláusula 73 ha sido violada en repetidas ocasiones, con los países de Escocia y en el Tíbet entre los peores delincuentes. Escocia es el hogar del kelpie más grande del mundo, que es conocido en el mundo Muggle como el Monstruo del Lago Ness, y es objeto de observaciones repetidas. En el Tíbet, el número de avistamientos del Yeti ha llevado a la Confederación Internacional de Magos a colocar un Grupo de Trabajo Internacional en las montañas de forma permanente.

Otras infracciones de la Cláusula 73 incluyen el Incidente en Ilfracombe en 1932.

Originalmente, Isobel McGonagall siguió el Estatuto al ocultar su herencia mágica a su marido muggle, Robert McGonagall Sr. Sin embargo, cuando su primera hija, Minerva, estaba exhibiendo poderes mágicos, Isobel se vio obligada a romper el Estatuto y revelar a su esposo la existencia del mundo mágico. Esto demuestra que los magos y las brujas con cónyuges muggles pueden revelar el mundo mágico en determinadas circunstancias. Fue por esta razón que Minerva se negó a casarse con Dougal McGregor, por temor a revelar su herencia mágica.

Crítica

Durante el siglo XX, Carlotta Pinkstone famosamente hizo campaña por la derogación del Estatuto, y hacerle saber a los muggles acerca de la existencia de la magia. Fue encarcelada varias veces por el incumplimiento del Estatuto frente a los muggles.

El fin de la Ley Rappaport 

En el siglo XX, la Corte Suprema del MACUSA comenzó a anular leyes de Emily Rappaport por motivos internacionales. En 1917, la Corte sostuvo que una ley de Kentucky no podría requerir la segregación residencial. En 1946, se dictaminó humillante la segregación en el transporte público que une los diferentes estados, en cumplimiento de la llamada cláusula de comercio. No fue hasta 1954 en el caso Brown, que la Corte sostuvo que instalaciones separadas eran inherentemente desiguales en los espacios públicas, revirtieron y prohibieron las medidas de Emily Rappaport en otras áreas de la sociedad mágica y no-mah. Estas decisiones, junto con otros casos de 1958 y 1960, fueron desmantelando la segregación apoyada por el MACUSA impuesta a través de la Ley Rappaport. 

Junto con las leyes de Emily Rappaport, por la cual el MACUSA obligaba la segregación de los magos y las brujas y los no-majs, también las empresas y sindicatos crearon sus propios arreglos de Emily Rappaport, impidiendo a los no-majs comprar casa en ciertos barrios, comprar o trabajar en ciertas tiendas, trabajar en determinados oficios controlados por ellos, etc. El MACUSA prohibió algunas formas de discriminación privada, en el que sostuvo que los pactos restrictivos que prohibieron la venta de viviendas a los no-majs eran denigrantes.

Sin embargo, la Corte Suprema del MACUSA no estaba dispuesta a atacar otras formas de discriminación privada. Razonó que los particulares no violaban la Cláusula sobre Protección Igualitaria cuando discriminaban, porque no eran "entidades estatales" como dicha cláusula especificaba. 

El acto de desobediencia civil de Rosa Parks en 1955, donde se negó a practicarle un "Obliviate" a su pareja, enfrentándose pacíficamente a cualquiera que se acercara con potentes hechizos de escudo, fue una especie de catalizador en los últimos años del movimiento. Su acción y las manifestaciones que provocó, condujeron a una serie de decisiones que contribuyeron a debilitar la Ley de Rappaport.

Numerosos boicots y manifestaciones contra la segregación ocurrieron a lo largo de la década de 1930 y 1940. Estas primeras luchas obtuvieron grandes resultados positivos. 

En enero de 1964, el presidente Johnson se reunió con los líderes de los movimientos, y empezaron a derogar la Ley de Rappaport. El 21 de junio del mismo, tres trabajadores del magicongreso desaparecieron en Mississippi. Los tres eran voluntarios y estaban ayudando a magos y brujas a encontrar a sus amigos, amantes o ex parejas no-majs para restaurar la relación, como parte del Proyecto de Verano (Recuperemos Recuerdos) de Mississippi. Cuarenta y cuatro días más tarde, los aurores recuperaron sus cuerpos, que habían sido enterrados en una represa de tierra: torturados y asesinados con maldiciones terribles. Miembros de importancia de la región, además de casi veinte personas más, fueron acusados de los delitos y siete fueron condenados. Se construyó una coalición y el presidente Johnson presionó a la Corte para que derogara la Ley de Rappaport. El 2 de julio, el presidente firmó el decreto histórico 115 que invocó la cláusula para prohibir todo tipo de discriminación.

Finalmente, el 3 de julio de 1965, la Ley de Rappaport, fue totalmente derogada.

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19/02/2019, 14:47
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Actualidad

La presidenta Eleonore M. Castle es una bruja estadounidense y, como Presidenta del Magicongreso Único de la Sociedad Americana, la jefa del gobierno mágico de norteamérica. Entró en la presidencia en el 2018, hace apenas unos meses. 

Es nieta directa de Seraphina Picquery, presidenta del MACUSA entre 1920 y 1928, y posee su varita creada por James Boot (Biznieto de Webster Boot), las cuales desataron gran polémica cuando se descubrió que utilizaban pelo de Rougarou como núcleo, el peligroso monstruo con cabeza de perro que frecuenta los humedales de Luisiana. Hay quien dice que las varitas de Boot se sienten tan atraídas por la magia negra como los vampiros por la sangre.

Ella asistió al Colegio Ilvermorny de Magia y Hechicería. Durante su ceremonia de selección y al igual que su abuela, las cuatro casas de la escuela la eligieron, convirtiéndose en uno de los pocos estudiantes en obtener tal honor. Ella eligió a Serpiente cornuda como su casa.

Como Presidenta, es aconsejada en asuntos mágicos por su personal y por los demás Jefes de los distintos Departamentos del Magicongreso. También preside la Corte Suprema y la Junta de Ley Mágica para aprobar leyes mágicas, o para escuchar las audiencias importantes, aunque el veredicto se decide por un panel de jurado, incluyendo la propia presidenta. 

Eleonore M. Castle destaca por su transparencia, sus leyes anticorrupción, y también por ser la primera presidenta que ha iniciado trámites y conversaciones para reunirse con el Secretario de Estado de Estados Unidos de América, pero su intención es reunirse también con el Primer Ministro de Canadá y la Secretaría de Gobernación de México.

 

DIRECTORES DE ILVERMORNY

 

Evony y Connor Michels son los actuales Directores del Colegio Ilvermorny de Magia y Hechicería. Son quienes se encargan de tomar todas las decisiones importantes y de controlar el día a día de la Institución. Como cualquier director, tienen el poder de pasar por alto, cualquier decisión tomada por cualquier otro miembro de los profesores del colegio, con la excepción del Consejo Escolar. También controlan los encantamientos protectores del castillo, y el ingreso de individuos a los terrenos del colegio.

Connor y Evony de joven. 

Evony y Connor son hijos de un no-majs y la única descendiente viva de Isolt Sayre, siendo ellos los primeros hijos de no-majs que alcanza el puesto de director en Ilvermorny. Entre Wampus y Thunderbird, ella eligió la Casa Wampus, donde perteneció hasta que se graduó, mientras que su mellizo al igual que su tatarabuela estuvo en la Casa de la Serpiente Cornuda. Siempre los dos demostraron bastante temperamento y amabilidad por igual, siendo capaces de ver cosas en las personas que los demás no lograban ver, fueran buenas o malas. Connor hizo amigos notables en el colegio y publicó varios artículos escritos en puño y letra por él durante sus años de estudiante, por su parte ella se convirtió en una de las mejores Alquimistas de América.

Durante sus años en el colegio, Evony ganó el Premio Barnabus Finkley de Hechizos Excepcionales, se convirtió en representante de las juventudes británicas en la Corte Suprema, y recibió una medalla de oro por su innovadora contribución al Congreso Internacional de Alquimia en Buenos Aires. Fue delegada en su quinto año y Premio Anual en el séptimo. Es considerada uno de los alumnos más brillantes que han pasado por el colegio, actualmente se encuentra casada con un Auror Autónomo del MACUSA y es madre de una niña pequeña llamada Rionach como su abuela. 

Connor ya Profesor de las Artes Oscuras cuando tenía 32 años fue alcanzado por una explosión alquímica que lesionó su ojo izquierdo y que resultó en una pérdida del 95 % de la visión en este ojo. De momento lo conserva y simplemente se lo cubre con un parche de ojo cosmético para evitar la distorsión de la percepción de profundidad. Suele explicar que cuando necesita disfrazarse, sólo tiene que quitarse el parche en el ojo, colocarse una lente de contacto y ponerse pelo, ya que todo el mundo suele buscar a un hombre con un solo ojo.

Es un experto duelista, y fue un buen jugador de Quodpot de la Casa Wampus, aunque no ha sido de los alumnos que más ha destacado en el campo deportivo. Actualmente está dedicado a la Dirección de Ilvermorny junto a su hermana y no se le conoce alguna pareja, ya que de cara a los demás siempre ha estado solo. Aunque entre los rumores que circulan dentro de las paredes del Colegio Americano, tiene un hijo que es perteneciente a la Casa de la Serpiente Cornuda. 

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19/02/2019, 17:27
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Las Cuatro Casas

Serpiente cornuda (en inglés Horned Serpent) es una de las cuatro casas del Colegio Ilvermorny de Magia y Hechicería en América del Norte.

Fue nombrada así por Isolt Sayre en honor a la serpiente cornuda que ella había conocido anteriormente.

Esta casa suele representar la mente del mago y favorece a los eruditos. Generalmente hace referencia a los alquimistas, inventores, autodidactas mágicos, es decir a aquellos magos capaces de crear maravillas desde cualquier ámbito donde el ingenio es la fuente de todo poder y conocimiento. 

 

 

Wampus es una de la cuatro casas del Colegio Ilvermorny de Magia y Hechicería en América del Norte.

Fue nombrada así por la criatura mágica que lleva el mismo nombre. Fue fundada por Webster Boot, hijo adoptivo de los fundadores del colegio, ya que esta era su criatura favorita.

Se dice que Wampus representa al cuerpo del mago y que favorece a los guerreros. Aquí tenemos a los valientes, aquellos donde el coraje y la osadía confluyen en la misma sintonía. Hablamos de fortaleza interior, voluntad y una determinación avasallante cuando se piensa en alumnos de esta casa. 

 

Ave del trueno (en inglés Thunderbird) es una de la cuatro casas del Colegio Ilvermorny de Magia y Hechicería en América del Norte. Fue nombrada de esa forma por la criatura mágica que lleva el mismo nombre.

El fundador de esta casa fue Chadwick Boot, uno de los hijos adoptivos de Isolt Sayre y James Steward.

A menudo se dice que esta casa representa el alma y favorece a los aventureros. El estandarte es la lealtad, esa misma incondicionalidad que impulsa a cooperar, a defender y/o proteger a quienes queremos. Hablamos de una fuerza interior que nos impulsa a cuidar de los demás, a trabajar en equipo, pero también nos incita a explorar, a descubrir los misterios que entrañan en cada rincón de estas maravillosas tierras plagadas de secretos. 

 

Pukwudgie [PÚK-wud-dchi] es una de la cuatro casas del Colegio Ilvermorny de Magia y Hechicería en América del Norte. 

Fue llamada así por el nomaj James Steward por el pukwudgie, una criatura mágica ferozmente independiente, que se basa en las historias que le oyó contar a su esposa Isolt Sayre sobre William el Pukwudgie.

Esta casa a veces es considerada como la representación del corazón de una bruja o mago. También se dice que Pukwudgie favorece a los sanadores. Los medimagos, botánicos, chamanes, incluso aquellos amantes de la naturaleza se agrupan en esta casa para reflejar ese espíritu que nos remite a los antepasados, a la tierra misma que plagada de sabiduría nos cuenta tantas cosas. 

 

Ceremonia de Selección de Casas

En el Hall central de Ilvermorny, se encuentra además de la Estatua de sus Fundadores, las cuatro esculturas que representan a las diferentes casas de este Colegio Americano. El proceso de Selección se basa en una Ceremonia donde cada alumno de Primer Curso debe colocarse en el centro de la Sala donde se encuentra un círculo dibujado en el suelo, una vez allí se debe aguardar la reacción de la bestia, siendo este evento el que determinará la Casa correspondiente a cada estudiante. 

  • Si pertenece a Horned Serpent, el cristal en la parte superior del símbolo brillará.
  • Si Wampus quiere al estudiante, rugirá.
  • Si Thunderbird es la casa indicada, batirá sus alas.
  • Y si pertenece a Pukwudgie, alzará una flecha al aire

 

Varitas, no se compran... Se crean en Ilvermorny

Fiel a sus ancestros, una vez que lograron hacerse con la Dirección del Colegio Ilvermorny hace ya 15 años, Evony y Connor en honor a sus tatarabuelos comenzaron a crear las varitas como lo hacía Isolt y James cuando este lugar era una casa familiar con un corazón muy grande, capaz de albergar a todo Mago o Bruja sin importar su linaje. Esta especialidad es propia de una costumbre muy arraigada, donde el trabajo minucioso de la madera más el dote alquímico de su melliza, lograron convertir varitas muy poderosas y únicas en el mundo mágico. 

Nadie en Ilvermorny ingresa con varita, sino que como parte de la Ceremonia de Selección de Casas, también se realiza lo propio en la misma sala donde la varita es quien elige al mago y le otorga un poder único. Existe una gran variedad de combinaciones, que Evony a través de sus sueños va dándole forma mientras que Connor es quien desde el trabajo minucioso de un artesano, termina por hacer realidad lo que su melliza vislumbra en el Mundo Onírico. 

Para los hermanos este proceso es vital para el largo camino del estudiante, donde la armonía de un entorno netamente natural, la sabiduría de sus ancestros y ese mimo por las costumbres, les permite ofrecer esa misma calidez como base fundamental durante todo el aprendizaje del alumno, convirtiendo la enseñanza en un viaje al pasado. 


Quodpot: deporte oficial

Es el deporte oficial de Ilvermorny y de norteamérica. Aunque el Quidditch es también muy popular, es superado por el Quodpot.

Como una variante del Quidditch, el Quodpot fue inventado en el siglo XVIII por Abraham Peasegood, y es el juego mágico más popular en los Estados Unidos. Peasegood viajó a los Estados Unidos desde Inglaterra, y, durante el viaje, con la varita sacó una Quaffle de su maleta. La interacción resultante permitió que, cuando tomó la Quaffle y comenzó a lanzarla a su alrededor, le explotó en la cara. Teniendo un vivo sentido del humor, Peasegood y sus amigos se dedicaron a recrear el efecto en una serie de pelotas de cuero, y así nació el juego de Quodpot.

Centrado alrededor de las propiedades explosivas de la pelota, conocida como el Quod, un juego de Quodpot se juega entre dos equipos con once jugadores cada uno. Subidos en sus escobas, los jugadores intentan poner el Quod en la cesta al final del terreno de juego antes de que explote. Cuando el Quod está con seguridad en la cesta - que contiene una solución para detener la explosión del Quod - el equipo del anotador consigue un punto y una nueva Quod se pone en juego. Cualquier jugador en posesión de la Quod cuando explote debe abandonar el campo de juego.

El Quodpot es inmensamente popular en América del Norte, pero se considera un deporte minoritario en Europa, donde la mayoría de los magos permanecen fieles al Quidditch.


Campo de Quodpot


Pelota de Quodpot