Partida Rol por web

Michael no tiene que decirlo dos veces, y Brian se prepara para salir de allí a toda velocidad. Hay algo en las balas que le repele y prefiere no quedarse a la "fiesta".

Mataos de una vez y dejadnos en paz, ¡joder!.

Si todos opinan como él, ¿para qué discutir?

Vamos ostias, ¡corramos! - grita mientras esconde su cabeza entre las manos, como los avestruces. Su parsimonia culmina y comienza la histeria, dándo golpes al asiento de delante para espolearle.

Regina Carlson sigue a sus compañeros hasta el interior del coche gritando aterrorizada al oír los disparos. Estaba al borde de un ataque de nervios y parece que el disparo ha hecho el resto del trabajo.

Corregís maniobra con el coche y salís disparados alejándoos del fregado. Los que vais atrás, teneis tiempo de ver como los hombres de Punchello intentan derribar al francotirados sin éxito. Sus subfusiles no tienen alcance suficiente para hacer un disparo efectivo contra una persona bien parapetada. La distracción facilita la llagada por la retaguardia del maltrecho deportivo que vuestros perseguidores usaron para perseguiros de camino para aquí se ha detenido detrás de las furgonetas y varias personas bajan de ella armados con subfusiles.

¿Qué haceis a continuación?.

Con una rápida mirada al retrovisór, Brian ve como se van quedando atrás Punchelo, el tipo del naipe y el millón largo de pavos. Pero no está convencido del todo de que también sus problemas se hayan quedadó en el pueblucho que parece el decorado de un western.

Aprovechando la potencia y el agarre que da la tracción a las cuatro ruedas, conduce a toda velocidad por el camino que sale de Oatman. En cuanto considera que la distancia es suficiente, levanta un poco el pie del acelerador.

Solo faltaría que, después de salir vivos de un segundo tiroteo, nos matemos en una curva.

-Pararemos en la primera ciudad que tenga una estación de autobuses, y allí que cada cual se vaya donde quiera. - dice ceñudo y sin apartar la vista del asfalto.

Parece cansado, pero su manera de conducir inspira confianza. Años en la ruta nocturna enseñan a ignorar el sueño.

Diria mas que una ciudad, me alejaria unos cuantos cientos de kilometros mas, incluso pasar un estado dice Michael tratando de calmarse pero.. creo que ya salimos de esta...

Regina mira hacia atrás pensando qué va a hacer con su vida. Su marido está en Los Ángeles, pero ella no puede volver allí. Él ni siquiera sabe lo que le ha sucedido en los últimos días. Piensa en llamarlo, pero no se atreve.

-Estoy de acuerdo con Brian. Nos alejamos y luego cada uno por su lado.

El coche sale del pueblo, dejando atrás el ruido ensordecedor de las balas. Después de algún tiempo de viaje, llegais a Flagstaff. Se trata de una ciudad lo suficiente importante como para disponer de su propio aeropuerto, estación de autobuses y abundantes lineas de autobús. Se encuentra situada al norte de Phoenyx, donde empezó toda esta pesadilla.