Partida Rol por web

Director:
Reglamento:
Sistema:	Rol por web
Jugadores:	2
Nivel requerido:	Novato: no hace falta ni conocer el juego
Ritmo de juego:	Medio: un mensaje cada 2-3 días
Fecha de comienzo:	21/12/2023
Estado:	En juego

Introducción

Un grupo de conjurados ha robado el testamento de los dioses de la gran pirámide, un documento legado por los dioses al primer faraón, pasado de faraón a faraón desde tiempos inmemoriales. Este documento es el que legitima el poder de faraón, siendo un contrato entre los dioses y el faraón como custodio del alto y bajo Egipto. El robo ha provocado que la energía no fluya en el país de Kemet: la crecida ha sido insuficiente, las plagas de langostas han sido mayores que otros años y los nubios y bereberes han estado más activos que nunca. El pueblo murmura sobre la necesidad de que el gran Ramses celebre un Heb Sed, el ritual mediante el cual la energía mágica del faraón se renueva para que el equilibrio alcance de nuevo el alto y bajo Egipto.

Los conjurados acechan en la sombra, y la presión se incrementa sobre el faraón, que se ve obligado a fijar la celebración del ritual en 9 meses. Durante el ritual el faraón deberá mostrar el testamento de los dioses a su pueblo, o abdicar, en caso de no poder demostrar que sigue contando con el favor divino.

 De todas estas intrigas nada conocía Pazair, un pequeño juez rural de las afueras de Tebas, impulsado únicamente por Maat, la diosa de la justicia. ¿Será suficiente un hombre justo para librar Egipto de las garras del desastre?

Sinopsis

La primera parte de la partida se centrará en la vida en Tebas del juez Pazair antes de ser elevado a juez en Menfis. En esta primera parte es ajeno a la conspiración contra el faraón, aunque sabe, como todo el pueblo de Egipto, que algo no va bien y que solo el ritual de renovación de las energías del faraón volverá a traer la paz y la alegría al país de los dioses.

Notas sobre la partida

Primera partida relativa a la trilogía El juez de Egipto de Christian Jacq. La trama no se corresponderá a los libros, aunque tomará prestados personajes y algunas escenas, por lo que su lectura no es necesaria.

Aviso: Al no ser historiador ni egiptólogo puedo cometer muchos errores de bulto con la ambientación. Tened piedad con este pobre aficionado.