Byakuya estaba herido, pero aun asi no flaqueaba, lo unico que realmente le hacia entorpecer su ritmo era ese polen... Tengo que acabar con esa criatura para que termine esto... Debia pensa rapido, puesto que el polen le afectaba cada vez mas, y a duras penas podia moverse y respirar. Entonces con las fuerzas que le deja el veneno, levantó la mano en dirección a la criatura:
-Carruaje del trueno, puente de una rueda giratoria: ¡con luz, divide esto en seis! Bakudo #61: Rikujokoro- Varios planos rectangulares aparecen alrededor de la dríade, rodeandola y tratar de inmovilizarla.
Sin dejar pasar un segundo, Byakuya ataca con lo que podria ser su ultima ofensiva...
-Despedaza... Senbonzakura Kageyoshi...- Todo se vuelve oscuro, tan solo quedando Byakuya y la dríade en un lugar donde la nada es lo que reina, cuando un millar de hojas de espadas enormes aparecen en forma de pasillo detrás de él, las cuales se convierten en millones de pétalos para acabar de una vez con la dríade.
Vamos Senbonzakura, espárcete... con un movimiento de la mano, los millones de petalos se lanzan hacia la criatura.
Tirada: 1d100
Motivo: Resistencia
Resultado: 55
Tirada: 1d100
Motivo: Bakudo #61: Rikujokoro
Resultado: 32
Tirada: 1d100
Motivo: Senbonzakura Kageyoshi
Resultado: 78
La precipitada sucesión de acontecimientos estuvo cerca de dejar a Asesino totalmente desconcertado. Sentir una presencia maligna en su cabeza no le ayudaba a concentrarse, desde luego.
Cuando exploraba la puerta en llamas, dejó de pensar en nada que no fuera el maravilloso fuego que se abrazaba ávidamente a su piel, intentando en vano calcinarla. Podía jugar con el fuego como si fuera agua tibia, y de hecho así es como lo sentía. Sintió que su siniestro huesped se revolvía ligeramente en el fondo de su cabeza.
-Tenías que escoger una puerta que revelara mi presencia, ¿no es así? - dijo la súcubo, a la vez divertida y contrariada. Y, ¿por qué no?, también un poco preocupada. Si los dioses oscuros descubrían que había abandonado su reino serían perfectamente capaces de averiguar sus intenciónes, y entonces difícilmente su aventura podría acabar bien.
Asesino reaccionó por fin al oir a la demonio, e intentó alejarse del fuego con resignación, como si le quitaran un juguete. Pero las llamas no estaban de acuerdo, y una potente llamarada le envolvió, haciendo crepitar el aire. Por supuesto, esto no hacía daño a Asesino, pero le impedía ver más allá de las llamas. Cuando intentó salir del fuego, la llamarada se transformó en una espiral de fuego que envolvía a Asesino, haciéndolo girar a una velocidad endiablada. Por un instante quedó suspendido en el aire, girando a una velocidad endiablada sin poder ver siquiera el suelo. La sensación de mareo era tan fuerte que hasta la súcubo notó como se le revolvían las inexistentes tripas por la influencia de los sentimientos de su anfitrión. De pronto el fuego se disipó, y empezó a caer dando vueltas en el aire. Tuvo la suerte de caer sobre los pies, aunque no tenía forma de mantener el equilibrio y cayó al suelo de todos modos.
"¿Todo lo que está relacionado con el fuego es tan molesto?" - pensó Asesino, contento de irritar un poco a la súcubo - "Tal vez debería haber escogido una puerta de agua o algo similar. Al menos los efectos de luces no serían tan cegadores."
Se levantó con dificultad luchando contra el fuerte mareo del viaje, para comprobar que el lugar era incluso peor que el reino demoníaco de la súcubo. Se encontraba en una isla de pura roca en medio de un lago de magma abrasador. Incluso con su recién estrenada afinidad por el fuego, el ambiente resultaba opresivo, como un día de verano realmente caluroso en una habitación sin ventilación. No podía calcular las dimensiones concretas del lago ni la altura del techo - "¿es una caverna?" - todavía, ya que del mareo tenía la impresión de que todo el escenario daba vueltas.
Sin embargo sí que pudo ver una sombra moverse bajo el magma. Nunca es buena noticia ver un sombra moverse bajo la superficie, pero ésta además era gigantesca y se dirigía directamente hacia él.
-Demonio, dime que conoces este sitio. No me gusta nada esto.
Sólo sintió una oleada de desdén como respuesta.
-Ya veo que estoy solo. Después no te quejes si muero en el intento... - murmuró irritado.
La sombra avanzaba como un torpedo submarino, a toda velocidad. Tan sólo estaba a unos cuantos metros del islote de Asesino cuando emergió del agua rugiendo como mil fieras. Era un dragón de proporciones gigantescas, con colmillos tan grandes que Asesino podría construirse un ataúd con uno de ellos. La figura del dragón se alzó varios metros por encima de la superficie, reduciendo a Asesino al tamaño de una hormiga. Y sólo era la cabeza. El resto del cuerpo del colosal ser seguía sumergido bajo el magma. Involuntariamente, Asesino retrocedió unos cuantos pasos con la mirada fija en las fauces de la bestia. A su alrededor el magma se agitaba mientras otras partes del cuerpo de la bestia ascendían a la superficie. Sin embargo no llegó a verlas surgir, pues una oscuridad de origen desconocido le envolvió por completo antes de que pudiera pensar en nada.
Tirada: 1d100
Motivo: Polen
Resultado: 25
Tirada: 1d100
Motivo: Esquiva driada
Resultado: 85
Tirada: 1d100
Motivo: Ataque driada
Resultado: 33
Tirada: 1d100
Motivo: Velocidad guerrera
Resultado: 16
Tirada: 1d100
Motivo: Ataque guerrera
Resultado: 2
Tiradas para resolucion de turnos
Uso invisibilidad e ilusión para crear una sola copia mía que se queda en mi lugar, como si fuera mi auténtico yo. Me alejo invisible de los otros participantes mientras mi ilusión habla.
Asesino comprendió rápidamente la situación: el torneo había avanzado rápidamente a su fase final, o semi final. Si de los miles de participantes solamente quedaban ellos, es que eran fuertes. Y si el primer grupo había sido masacrado tan fácilmente, es que esa repulsiva masa de materia orgánica era extremadamente poderosa. ¿Acaso era un participante más? ¿Era el señor de alguna dimensión aberrante? ¿Era... un dios oscuro?
¿Por qué no preguntar?
- No suelo acatar órdenes sin saber quién las da - dijo a la criatura -. ¿Puedes identificarte?
Por el rabillo del ojo observaba a sus acompañantes. El del hacha tenía un aspecto de loco sanguinario que no le gustaba nada: se parecía a él.
- Olvida esos trucos infantiles. No funcionan conmigo. Ahora, tú y esa furcia demoniaca, comiencen a hacer lo que mejor se les da. Despedacen al resto de estos cretinos – respondió la misma voz que provenía del centro del recinto, aunque lo cierto era que sus palabras parecían llegar directamente a sus cerebros, sin necesidad de pasar por sus oídos.
Ya esta? Esta es la supuesta final.Si solo he tenido que despedazar a un demonio de nada.
jijijijijj rio de forma lasciva.
Despues de escuchar la voz sombria
Malditos, dioses. ggggg Gruñe
Los ojos de la oni, se iluminan de un color plateado,retrocediendo en el tiempo y espacio, registrando, lo ocurrido a cada uno de los contendientes durante el torneo.
Asombrada por las visiones, Me concentro en visualizar toda la sala y escrudiñarla de possibles enemigos ocultos
Tirada: 1d100
Motivo: Premonicion
Resultado: 29
Tirada: 1d100
Motivo: Vision de Dios
Resultado: 91
Alegóridas no se ha movido todavía desde que aterrizó en la sala. Se ha levantado, y se alza erguido, desafiante, pero por lo demás no ha movido ni un músculo. Ni siquiera ha adoptado ningún tipo de pose de alerta o de batalla, aunque sus músculos están tensos, calientes, deseando desatar la brutalidad.
No le importa el nombre de la criatura. No le impota saber qué es la criatura. Ni siquiera está interesado en saber nada de aquellos que se encuentran a su alrededor, mucho menos de los cadáveres, pues, aunque quedase algo de vida en esos cuerpos agonizantes, no dejan de ser eso: cadáveres. Lo único que le importa, lo único que sabe, es que es el enemigo.
Alegóridas espera, desafiante, pero atento, con el hacha fundida a su mano debajo de la gabardina, como si fueran una misma cosa, preparado para cualquier eventualidad que pudiese presentarse. Quiere, desea, anhela ver el miedo en el rostro de aquella cosa antes de aniquilarla.
De pie... erguido... mirando directamente a los ojos a la criatura... desafiante... sonriendo...
Haz una tirada para tu invisibilidad
- Me aburren. No son nada divertidos. Tendré que empezar a matarlos yo mismo – dijo la criatura en el centro del recinto con el tono de un niño enfadado, luego de una prolongada pausa en la que ninguno de los contendientes se había atrevido a realizar el menor movimiento ofensivo, ya fuera hacia los otros competidores o hacia la obscena masa que se agitaba frente a todos.
Tirada: 1d100
Motivo: Invisibilidad
Resultado: 79
¿Entonces era invisible cuando el monstruo lanzó los tentáculos? ¿Ha delatado mi posición? ¿Y exáctamente qué huesos tengo fracturados? Digo yo que mi pj debería notarlo xD
Respondiendo segun el orden de las preguntas:
¿Entonces era invisible cuando el monstruo lanzó los tentáculos?
Si, pero el bicho ya te habia advertido que eso no funcionaba con el.
¿Ha delatado mi posición?
No creo. Seguias invisible, y los demas tambien estaban siendo golpeados.
¿Y exáctamente qué huesos tengo fracturados?
Digamos que el antebrazo izquierdo y algunas costillas de ese lado.
Pues creo que me voy a cargar al que tenga más cerca, aunque sea para ganar tiempo. Si me dices a quién tengo más cerca hago el post.
Pues lanza un dado
1-2 - Alegoridas
3-4 - Byakuya
5-6 - Mara
7-8 - Cualquiera de los pnj's
Tirada: 1d8
Motivo: Sorteo
Resultado: 1
A ver...
Asesino casi puede reconocerse en su mueca de locura, y no creo que le interese matar el primero al único con quien parece compartir algo. Pues ya que la tirada no es vinculante, eligo alejarme hasta la elfa moribunda que preparaba un conjuro. Sospecho que esa cosa nos matará a todos, así que prefiero que los otros la ataquen primero para pasar más desapercibido. Lo mío es el cuerpo a cuerpo, y necesito llegar hasta ella. Que los otros la distraigan y debiliten... o que se maten entre ellos. ¿Qué sentido tiene ser invisible si no te escaqueas? xD
Mi yo ilusorio se hace el muerto.