Partida Rol por web

Cuando NATK le llama no responde cuando se acerca a la figura y le toca esta se desploma en el suelo, pero está demasiado oscuro para examinarla, quizás si la acercarais a la hoguera...

Cubridme, voy a cogerlo - le dice a sus compañeros mientras, cogiendo la escopeta con una mano, a forma de palo, le da un par de toques en el torso, por si reacciona o algo.

De no existir ninguna reacción, lo agarra por las axilas y lo arrastra hacia una zona con luz, sin acercarlo demasiado a ninguno de sus compañeros de viaje.

Zarkov quería saber de que se trataba pues siempre estaba invadido por una gran curiosidad. Escuchó las palabras de su compañero y con arma en mano tomó posición para cubrirlo.- Tranquilo, te cubriré. Drake porque nos vas ayudarlo para que lo traigan rápido, yo los puedo cubrir a ambos.  Dijo con su monótona voz. Pues creía firmemente que mientras menos se demoraran trayendo lo que estuviera ahí, a la luz del fuego para ver de que se trataba, existirían menos posibilidades de que les ocurra algo negativo. 

Al examinar el cuerpo a la luz descubrís que se trata de un ashleen que sufrió una muerte violenta hace ya algún tiempo; hay un largo tajo diagonal que va de la clavícula al cuello. El cuerpo está tostado por el sol y ya ha empezado a descomponerse, su hedor es verdaderamente nauseabundo, y le han sacado los ojos a picotazos.

Aristarchus se muestra imperturbable y pasa por alto el suceso, debéis de descansar y no dejaros llevar por los rigores del yermo. Cuando ve que examináis el cadáver... concluye con aire distraído no percibo ningún rastro de actividad psíquica en él.

A pesar de siempre actuar con un tanto de neutralidad en esta ocasión Zarkov pensó algo diferente. Al contrario de su compañero y del inquisidor, el tener ese cadáver ahí no le gustaba para nada, el hedor que desprendía era insoportable para el tecnógrafo, haciendo que la ansiedad comience a crecer dentro de él.-¿Sólo lo dejarán aquí tirado? Yo no estoy de acuerdo, si no nos dice nada relevante yo no quiero verlo ni olerlo ¡un segundo más!. Deberíamos enterrarlo, seria lo más adecuado en esta situación. Mientras más tiempo tuviera que soportar ese cuerpo en descomposición, más ansiedad iría sintiendo. 

Zarkov estás completamente abrumado, gritas y vomitas descontroladamente durante unos segundos, y sueltas todo lo que llevas en las manos.

Al meter el cuerpo en la zona con más luz se percata de qué es lo que está cargando y lo suelta bruscamente, el cerebro de NATK no consigue atar los cabos de cómo esa cosa seguía de pie cuando es obvio que lleva bastante tiempo en descomposición.

NATK retrocedes espantado ante lo que acabas de presenciar. No puedes acercarte voluntariamente al objeto de tu miedo, pero por lo demás puedes actuar con normalidad.

Aproximadamente a un día y medio de distancia de Desesperanza, emprendéis el ascenso por las estribaciones de las oscuras montañas. 

Avistas una figura sombría encaramada a un saliente rocoso a unos cien metros del sendero. La figura tiene el sol a la espalda, por lo que no puede distinguirse con claridad, y parece rielar antes de desaparecer de la vista.

Aristarchus os anuncia que ha detectado una perturbación psíquica y os envía a investigar el saliente...

Llegar a la formación rocosa entraña cierto peligro, ya que no hay un sendero definido entre el amasijo de rocas quebradas. Hay numerosas grietas, y los pedregales sueltos podrían ceder en cualquier momento, deslizándose ladera abajo y arrastrando con ellos a cualquiera de vosotros. 

Después del tremendo miedo que había sufrido, para vergüenza del propio arbites, NATK continuó su caminata con sus sentidos alerta, pareció percatarse de algo, pero no había nada allí donde miraba.

Sin embargo notó como sus pelos se ponían de punta - ¿poderes psíquicos? - examinó a su compañero de viaje, que parecía padecer algún tipo de jaqueca, al menos podía notar que estaba concentrado en algo - Sí, sin duda ha de ser algo proveniente del Inmaterium.

Hizo la señar del águila en busca de protección en el momento en el que el Vidente les ordenó acercarse al saliente rocoso, si algo los estaba acechando se iba a arrepentir - La justa ira del Emperador caerá sobre ellos.

Vamos - instó a sus compañeros - no hay tiempo que perder, no me gustaría permanecer el el Yermo más tiempo del estrictamente necesario - dijo mientras recordaba inevitablemente la criatura que habían encontrado en el campamento la pasada noche.

Sin más dilación, comenzó a trepar por los riscos, con toda la habilidad que consiguió reunir.

El terreno era mucho más quebradizo de lo que parecía y, maldiciendo para sí las ideas del Vidente, NATK nota como la roca sobre la que tenía su pie se desencaja, y acto seguido se convierte en gravilla.

El cadete comienza a caer cuando en el último segundo ve otra roca sobresaliendo un poco más a la derecha de la que acaba de destruirse, aferrando con fuerza sus manos, consigue alargar su pierna derecha lo suficiente para sujetarse en aquella lejana piedra, lo que le evita una buena caida.

Mirando hacia su espalda puede ver al vidente esperando junto al vehículo - Si de verdad es Vidente, podría habermelo dicho, ¿no?