Partida Rol por web

-Sin duda, Mori-san. Los clanes han mandado a grandes representantes para participar en el torneo, y estoy orgulloso de ser uno de ellos, al igual que deberíais estarlo vos.

El joven León apuntó cordialmente sobre los participantes del torneo:

-En éste torneo me vi vencido en el duelo de Iaijutsu, demostrándome una vez más la necesidad de seguir entrenando, y ni siquiera llegué a representar a mi equipo en la prueba de Kenjutsu puesto que Mirumoto Tako-san demostró una mayor habilidad con su estilo nitten... Una lástima que se fuese sin avisar. Y respecto a la prueba de fortaleza física tuve la suerte de batirme con un representante del clan Cangrejo, dejando claro que los Matsu no palidecemos ante su entrenamiento. Estoy contento, a decir verdad, aunque apesumbrado por la marcha de un gran contrincante.

Tras una pequeña pausa, Keiji prosiguió:

-Por otro lado, he podido vislumbrar las artes de los shugenja por primera vez, y por si fuera poco, las de distintas escuelas. Creo que tal evento es extremadamente inusual. Aunque cabe decir que Ashaina Chiyoko ha demostrado un control sobre los elementos admirable. ¿Qué opináis vos sobre ella, puesto que estaréis más entendido sobre conocimientos de shugenja? Proviniendo del clan Fénix, estoy seguro de que vuestra opinión será más que acertada al respecto, y mucho más profunda que la mía. ¿Habéis logrado obtener iluminación durante la velada?

Obviamente Soshi no deja que Shosuro se vaya, sino que lo sigue sin dejar que se despegue de él hasta su habitación. No dice ni una palabra, como diciéndole que se deje de hacer el interesante y le cuente lo que sabe porque no lo iba a dejar en paz. Rompe un poco la etiqueta quizá, pero eran Escorpión, y ya las cosas no estaban para etiqueta entre ellos, ya era hora de que actuen. Si Shosuro la sigue ignorando incluso mete el pie en la puerta para evitar que la cierre, y lo mira como diciéndole "no seas más cretino de lo que hace falta".

Registras concienzudamente tu habitación y tus objetos personales sin encontrar absolutamente nada fuera de lugar, lo cual está bien. Más relajado empiezas a pensar opciones...

Sacude la cabeza como queriendo alejar un mal recuerdo... Es algo que ya solo de pensarlo es vomitivo, me quería chantajear para que yaciera con él o esparcería el rumor de que yo tenía que ver algo con la desaparición de Mirumoto Tako-san por haber estado hablando con él la pasada noche. Solo de imaginarlo ya se me ponen los vellos de punta. ¿Cómo se puede ser tan mezquino y tan sujeto a las pasiones terrenales como para querer aprovecharse de una doncella? El problema es que, mucho me temo que este tipo de ardides le habrá dado buenos resultados en el pasado. ¿Cuántas pobres mujeres habrán caído en sus garras?

Tarda unos momentos en recomponerse pues parecía que iba a ponerse a llorar. Estoy deseando que acabe este torneo para poder volver a las tierras de mi familia y poner distancia entre esos malditos Escorpiones y yo...

Al mentar a la shugenja los ojos se le iluminan. Ashaina Chiyoko-san es increíble. Es, quizás, la shugenja más prometedora de la escuela Ashaina en años. Su poder es... Abrumador. Y además combinado con esa juventud, esa frescura y esa forma de ser tan gentil. Es una samurái que dará de hablar en el futuro, estoy convencido de ello. ¿Podéis guardarme un secreto? Ante tu gesto afirmativo continúa. Cuando vuelva a tierras Fénix voy a solicitar formalmente su mano en matrimonio. Y una gran sonrisa se marca en su cara.

Notas como su rostro se crispa, un momento, sólo un momento, para volver a adoptar esa sonrisilla suya. Soshi-san, ¿no querrás saberlo todo por mi? No sería divertido. Debéis encontrar respuestas a vuestras preguntas por vos misma. Sois una Escorpión, actuad como tal y demostrar que el clan no se equivocó al traeros aquí... como muchos en Kyuden Bayushi piensan. 

Se acerca a tu oído. Yo te traje aquí. Demuestra que no me equivoqué contigo...

A kenzo le parecía increíble lo que contaba Chiyoko Sobre el Escorpión, casi tan increíble como que las pesquisas del mismo fuesen tan cercanas a las que ellos mismos habían hecho y que pretendiera sacar tanto provecho por tan poco.

—No os preocupéis, nuestra familia lleva lidiando con los Escorpión desde la fundación del imperio y si ellos son buenos propagando rumores, nosotros lo somos en desmentirlos. Además, que os marchéis a casa seguramente sea su objetivo, y ¿no sería mejor conseguir entrar al servicio del campeón esmeralda? Mi consejo es que os calméis, mañana redobléis vuestros esfuerzos en el torneo y cuando seáis magistrado, no solo no tendréis que volver a aguantar nunca mas algo así, sino que estoy seguro de que tarde o temprano se presentará la oportunidad de devolverle a ese tipo la gentileza que ha demostrado.

Sonrió a la shugenja intentando que se tranquilizara. Le parecía empezar a ver un patrón en todo aquello, un Dragón desaparecido y otro objetivo de sabotaje, mientras que una Grulla era acusada de forma velada y otro lo hubiera sido si el monje Togashi hubiese dicho lo ocurrido.

—Por cierto ¿de qué hablasteis con Mirumoto-san?, porque tras lo ocurrido me preocupa más su ausencia. Puede que ese tipejo solo quisiera aprovecharse de su ausencia, pero no sé, algo me está empezando a mosquear.

En mi habitación me dedico a meditar.

Quiero recordar lo que he visto, detalle al detalle. Tratar de recordar cada pequeña cosa que me revelaron sobre el criado con máscara del MegaPhoenix. Por si hay algo que se me haya pasado.

-Me alegro por vos, Isawa-san. Creo que los Matsu diferimos ligeramente en ése tipo de prácticas al resto de familias, pero la unión de 2 shugenjas de tal calibre es una gran noticia para todo el Imperio. Estad seguro que guardaré el secreto hasta que la unión sea oficial. -Keiji hizo una pequeña pausa- Espero que descanséis esta noche y de los días que nos quedan en éste lugar, y en vuestro caso de la agradable compañía de Ashaina-san. Hay un largo trayecto de vuelta a las tierras Fénix por lo que tengo entendido...

Soshi entrecerró los ojos. No estaba intimidada por la actitud de Shosuro, pero no sabía si lo que decía este era verdad. Tan sólo lo miró varios momentos intentando saber si decía la verdad o no, pero su máscara, tanto su verdadera máscara como la que esta representaba, era completamente vacuo de expresiones que delaten mentira. Tragando saliva, Soshi no pudo más que dar media vuelta e irse de ahí. Quizá alguien más experimentado habría sabido soportar mejor la presión de tal revelación y preguntar más cosas, como por ejemplo por qué le habían traído, pero la shugenja no estaba segura de sí misma o de si podría enfrentar tal revelación, con lo cual se apresuró a su habitación.

Una vez ahí se encerró un rato empezó a pensar en lo que había sucedido. ¿Quién era Shosuro Tajiki realmente? No lo sabía y no había nadie del clan como para preguntar. Si estuviese Bayushi Oma aquí él quizá sabría, pero no estaba para preguntarle y una misiva tardaría mucho. No tenía tanto tiempo.

Le tardó alrededor de media hora recobrar la compostura totalmente a Madoka, minutos en los que estuvo contemplativa en silencio pensando en qué hacer. Sabía que tenía que continuar, pero parte de ella tenía miedo de no estar a la altura de cualquier expectativa. Shosuro lo había dicho, había gente en Kyuden Bayushi que pensaba que ella no merecía estar ahí, y lo creía completamente. Sin embargo, lo que más había chocado a Madoka era el que Shosuro le había dicho que confiaba en ella. Como Amami lo había hecho en el pasado. Si así era, entonces cuanto menos la joven tenía que hacer algo.

Así es que finalmente se levantó del futón y salió al pasillo, fijándose que esté silencioso. Iría silenciosamente a la habitación que había pertenecido a Mirumoto Tako y haría una preguntas a los kami.

¡Oh! Se tapa la boca con el abanico. ¿Creéis que los Escorpión hayan tenido algo que ver con la desaparición de Mirumoto-san? Mueve el abanico enérgicamente mientras mira a los lados intentando recordar con detalle.

Pues lo cierto es que, sobre todo, hablamos de poesía, es una de mis aficiones y él procede de una familia que es famosa en Rokugan por ello y ya sabéis que cuando hablas de algo que te apasiona el tiempo pasa volando.

Mira preocupada al cielo. Querido primo, me temo que se está haciendo muy tarde, quizás deberíamos retirarnos a nuestras habitaciones... ¿Sería mucho pedir que me escoltarais hasta mis aposentos?

23:00 Horas

Matsu Keiki, paseando por el jardín se encuentra con Ashaina Chiyoko y Doji Kenzo que se dirigen a la residencia.

Isawa Rokumaru, Soshi Madoka, Togashi tetsuo e Hida Heinosuke están, supuestamente, en sus habitaciones así como el resto de samuráis.

23:30 Horas

Te diriges a la habitación de Mirumoto Tako.

Es una habitación similar a la tuya en muchos aspectos, sólo que aquí están las pertenencias personales de Mirumoto Tako el cual en su marcha no se las ha llevado. Hay un futón enrollado, un arcón, un porta daisho vacío y un porta armaduras, donde sí está la armadura del Dragón. Además hay una mesa con todo lo necesario para escribir y una ventana que da a los jardines.

Al abrir la puerta para empezar a caminar hacia el cuarto de Mirumoto Tako, Soshi respiró profundo e intentó vaciar su mente de distracciones. Desde que Shosuro dijo que de alguna forma había confiado en ella, el fantasma de Amami, quien también le había elegido personalmente a pesar de ser un prodigio y ella una shugenja por debajo de la media, le perseguía, pero sabía que si hacía esto tendría que sacar esas distracciones que sólo la confundirían de su mente.

Con mucho cuidado, Soshi se acercó a la habitación de Mirumoto y abrió la puerta muy despacio, casi haciendo que el marco de madera se deslizase como una seda, y entrando a la habitación antes de cerrar la puerta tras de sí y también la ventana por si alguien veía a través de la misma.

Primero lo primero, empezaría revisando la habitación, especialmente el arcón y la mesa para escribir para ver si Mirumoto había recibido alguna carta o algo por el estilo que lo obligase a salir de su habitación.

—No os preocupéis, no digo que hayan tenido nada que ver—. Dijo acompañando sus palabras mientras negaba con la mano para quitar importancia a sus propias palabras. —Lo que si estoy seguro de que quería aprovecharse de dicha ausencia. Es simplemente que Mirumoto-san parecía uno de los competidores mejor preparados y es extraño que se marchase tan de repente, pero también es cierto que cuando tratas con un Dragón nunca se sabe en que está pensando.

—Pues sí, parece que el tiempo ha pasado volando mientras hablábamos—. Dijo sonriente mientras usaba las palabras de la propia Chiyoko. —No solo no es mucho pedir, sino que será un placer acompañaros.

Al cruzarse con el León le dedico una mirada cómplice, estaba seguro de que este no paseaba simplemente, sino que seguía con sus pesquisas sobre lo que estaba ocurriendo.

—Buenas noches Matsu-san, espero que estéis pasando una agradable velada. Nosotros nos retiramos ya, puesto que se está haciendo tarde, espero que nos veamos pronto para continuar con nuestra conversación de antes.