De todas formas en llegar lo intento, aunque sea con movil
Julio retrocedió muy despacito, como si estuviera delante de un perro rabioso listo para el combate y deseara ese poquejo de segundos extra para ganar un metro o dos antes de correr en plan película de Chaplin. En el blanco de los ojos se le notó la solidaridad con el joven Rogers, Simmons paseando por ahí y pasando dedos por los muebles era como transparente, pues no podía dejar de mirar la estatua y, cuando Dupont sacó las barritas energéticas, su estómago colgó el cartel de "no hay billetes" y cerró el píloro con cajas destempladas. Tragó por ver si sus gónadas dejaban de estorbarle la garganta y probó a retroceder otro poquito.
Saltó como un tigre cuando comenzaron a moverse todas esas cuerdas y poleas, tal como si se hubiera teletransportado hacia atrás otro medio metro, y ya estaba en medio de la antesala.
Que no era viejo por nada, y siempre en la misma empresa. Y de bedel, nada menos. Una puerta que se cierra, una silla voladora y voces extrañas. Dando un último convite a la curiosidad, recuperó terreno y asomó un ojo para ver qué había quedado al descubierto: ¿probetas? ¿Viejos libros polvorientos? Un poquito más. Se alzó cuan largo era para tomar ángulo, con un ojo en la estatua, que latía en su imaginación. ¿Una escalera hacia las profundidades?
Negó con la cabeza. No, no. Este bedel no quiere trabajar en el infierno. Bendita vulgaridad, con lo bien que estaban el sillón y las zapatillas.
Con la voz ahogada por el miedo y lo forzado de su postura, dijo: señores, yo me voy de aquí. E hizo lo propio, de puntillas primero, y luego a la carrera, tentando con las manos en la oscuridad. Tenía ganas de probar con las ventanas, a ver qué tal se le daba. Y, si las de la planta baja no contaban, siempre podía tirarse desde el segundo piso. Corre que te corre, comenzó a subir las escaleras y...
A lo mejor, todavía terminaba por encontrar la puta bandera esa.
- ¡Os juro que no he tocado nada!
El ruido de los engranajes la verdad es que imponía bastante y por un momento Alexander pensó que la estancia se venia abajo, pero al final solo era un pasadizo que descendia... ¿a dónde?
- ¡Julio! ¡Es solo una puerta vieja! - gritó al bedel al ver cómo salía corriendo de la habitación... gente supersticiosa ¿qué podría pasar? Era solo una vieja casa. El mayor peligro era que se viniera abajo con ellos dentro.
Tenía curiosidad. Daba por perdida la gymkama, pero si esto tenía algún valor para la empresa, aunque fuera meramente publicitario, aún tendría una oportunidad de culminar las dichosas pruebas con éxito.
Pero tampoco le hacía mucha gracia bajar solo.
- Simmons, Rogers, ¿bajamos? Quizás haya algo de valor ahí abajo. - Terminó por avanzar sin comprobar si los demás le seguían, pero bajaba muy lentamente los escalones hacia ¿un laboratorio?
El polvo poco a poco iba aposentándose y revelando el contenido de la habitación.
Desciendo un poco, pero no mucho por las escaleras.
Esto es como un medio turno... acabo de llegar a casa y estoy muerto... si hay más posts mañana por la mañana completo mi acción.
SI hay que hacer alguna tirada, el GM puede hacerla por mi :-)))
Andrew se debatía entre ir con Dupont y salir con Julio. Era como la decisión que le permitiría seguir en la empresa o por lo que sería despedido antes siquiera de tener un contrato oficial. Poleas, cuerdas, mecanismos secretos y salas misteriosas. Aquello tampoco le daba ninguna buena espina.
- Yo, yo... - Dijo mirando a Alexander valorando sus posibilidades.
Se comenzó a rascar el cuello de forma compulsiva y dio un paso hacia atrás.
- Yo, lo-siento - Negó con la cabeza mientras retiraba su mirada de la de Dupont y daba media vuelta.
- ¡ Señor Cruz ! - Gritó mientras salía del sótano escaleras hacia arriba - Espere, voy con usted -
Podría haber puesto alguna excusa, inventarse quizá que iba a buscarlo. Pero sus nervios estaban a flor de piel, y nunca había sido especialmente valiente. Respecto al trabajo. Si al final no le hacían contrato... bueno. Seguro que podría trabajar por una miseria para cualquier otra empresa.
Acelerando el paso trató de dar alcance a Julio.
Una especie de biblia satánica atrajo su atención durante unos cuantos segundos, acercó su mano dudando de si abrirla y leer un pasaje al azar. Se encontraba John valorando sus opciones cuando el sonido de multitud de engranajes y una construccón arcaica atrajo toda su atención.
Aquello era fascinante, el sonido de un mecanismo de relojería a lo grande, tal vez el interior del big ben sonaría así... Sin embargo no sólo era el mecanismo lo que le atraía, si no todo lo que acabó por desvelarse ante su rostro. Poco se detuvieron desde entonces tanto Julio como Andrew, en un alarde de raciocinio decidieron que aquello era lo máximo que estaban dispuestos a tragar quedándose él solo con el compañero de sus sueños.
—Genial— celebró para sus adentros mientras miraba a la dupla alejarse, miro entonces al camino oscuro que se abría frente a él. De todos era con el que menos congeniaba y allí estaban los dos, planteándose seriamente bajar hacia aquello, hacia la oscuridad y hacia lo desconocido.
—Te voy a ser sincero... No me hace ni puta gracia bajar ahí, pero tampoco me lo hace esta iglesia ni salir al exterior que vete a saber que hay allá además del frío... Venga Alexander, ¿qué sería lo peor que podría pasar? ¿Pasar frío?
Al asomarse Dupont por las escaleras pudo oír algo lejano e inquietante. Era como si algo enorme se arrastrara y debía estar en algún lugar ahí abajo. No se veía el fondo de las escaleras ni con la linterna pues estas no bajaban rectas sino en una especie de espiral. El sonido se oía lejano, lento y pesado, pero de a pocos parecía acercarse.
Julio corrió primero a oscuras hacia las escaleras y trató de subir por ellas. Subir un par de peldaños rápido fue fácil, pero al cuarto la madera cedió. Aquellas escaleras de madera debían llevar allí mucho tiempo como para que el paso del mismo no hubiera jugado en su contra. El bedel cayó rompiendo los cuatro peldaños más bajos de aquella escalera.
El becario decidió seguirle, presa del pánico ambos, pero solo consiguió frenar la caída del bedel haciéndole de cojín. Ambos acabaron doloridos en el suelo por el golpe y las escaleras no parecían ya una opción para subir al piso superior. Cierto era que no estaba tan lejos pero habría que buscar otra forma de conseguirlo.
Y con esto hacen dos turnos hoy. Mañana será el último por vuestra parte y también el mío dando final a todo. Gracias por hacer posible el turno extra, chicos.
La curiosidad luchaba contra la prudencia en el interior de Alexander. Había algo allí abajo, algo que se movía. Se le erizó el vello de la nuca al recordar las palabras de la niña... bestia reptante.. ¿y si fuera verdad...?
Ya no creía que la empresa hubiera dedicado tanto esfuerzo de ambientación por una gymkama, sería vergonzoso dedicar tantos recursos a una cosa así en la situación actual de la misma. Pero entonces... las voces de la niña... podrían ser ¿ciertas? Se consideraba una persona racional, de hecho lo suficientemente racional como para centrarse en sus objetivos personales por encima de cualquier consideración emocional. Pero ya no estaba tan seguro.
Simmons estaba a su lado. No era la mejor compañía y además no tenía nada claro si le estaba sugiriendo continuar adelante o retirarse como sus dos mas prudentes... o cobardes... compañeros.
Apenas había avanzado un par de peldaños cuando un fuerte ruido le sacó de sus pensamientos.
- ¡Andrew! ¡Julio! ¡Algo les ha pasado! - gritó a Simmons mientras daba la vuelta para ver que le había pasado a sus compañeros, sin tener en cuenta que John iba sin linterna y que, o lo seguía rápidamente o se quedaba a oscuras frente al tramo descendente de escalera.
Llegó rápidamente al lado de sus compañeros para comprobar que la escalera, en tal mal estado como el resto de la capilla, había cedido bajo el peso de ambos al intentar salir a la estampida de allí. Eso era un problema ¿cómo saldrían ahora?
- ¿Estáis bien? - Observó a sus compañeros buscando alguna herida o rotura, pero parecía que todo había quedado en un susto. Miró a los restos de la escalera, no podrían usarla para salir de allí.
- Esto es un problema, o salimos por aquí o tendremos que buscar si hay salida por las escaleras descendentes. - prefirió no hacer mención a lo que había escuchado allí abajo, pero por su cara se veía claramente que, incluso para él que había empezado a bajar, no le hacía ninguna gracia tener que usar aquel camino sin opción de retirada.
- Quizás podamos alcanzar el piso superior si uno se sube a caballo encima de otro. Bastaría con que uno subiera y buscase algún madero largo o una viga caída para sustituir el tramo de escalera ¿Alguien tiene una cuerda o algo parecido?
Una vez más observó a sus compañeros, mirando quien pesaba menos para que fuera aupado por el resto.
Pues es una pena que sea el último post... la verdad es que personalmente me quedo con ganas de más.
Me ha gustado mucho la experiencia y me alegro de haberos tenido como compañeros, espero que nos encontremos en futuras partidas por Umbría :-)
Supongo que luego sabremos quienes somos.
- Buena idea - Dijo Andrew ante las palabras de Dupont. Quien sabe si movido por las ganas de salir de aquel sótano primero y de la casa después o porque realmente lo pensaba. - Vamos, agáchate, ayúdame a subir y os lanzaré el madero que puse para que no se cerrara la puerta -
Intentaba alcanzar la escalera superior, sin ánimos para mirar a la entrada de la iglesia, todavía con la visión de aquella talla en su mente. Incluso se había olvidado del mecanismo secreto. Quizá abriese alguna puerta para salir de allí. Si eso era algún lugar en donde se celebraban reuniones clandestinas puede que hubieran pensado en una vía de escape secreta. O quizá abriese un pozo y todos cayeran al nido de una enorme serpiente que se enroscaría en sus cuerpos hasta asfixiarlos, sin llegar a matarlos... lo justo para conservar el calor y poder saborear así mejor su carne.
- ¡¡ Vamos vamos !! - Se apresuro a decir tratando de apartar los agoreros pensamientos de su mente.
Tirada de Protagonista
Motivo: Agilidad
Dado principal (1d6): 2 = 2
Dado salvaje (1d6): 5 = 5
Total: 5 = 5
Dificultad: 4
Resultado: Exito
Dejo tirada de agilidad por si las moscas. Si por lo que fuera no pudiéramos llegar a la escalera me tiro a la piscina y activo el mecanismo de la pared. Lo dejo por aquí que al ser el último turno no se si tendremos ocasión de hacerlo :P
Julio como ruido de fondo de su jadeo, Julio escuchaba las palabras de sus compañeros. Entonces recordó el madero atravesado en el vano de la trampilla.
¡El travesaño! Te aupamos y agarras el travesaño. Lo abrazas fuerte y dejas las piernas colgando. Te usaremos de cuerda, yo soy ligero, ayudadme para que no cargue con todo mi peso. Luego ya seremos dos a tirar. ¡Vamos! ¡Vamos! ¡Pensad en la bandera! ¡La bandera está fuera de aquí!
Después de todo, la mierda esa de la motivación simbólica si que servía para enfocar la voluntad del grupo y toda esa parafernalia psicológica que les habían soltado.
¡La bandera! ¡La bandera!
¡Venga, otro turno! ¡No hay güebs!
Mientras todo aquello se iba sucediendo en el exterior John se encontraba dividido entre el instinto de supervivencia y una innegable curiosidad por lo desconocido. Sin embargo aquella curiosidad no estaba exenta del miedo a lo desconocido... De repente advirtió que había bajado dos peldaños más desde la marcha de su pretencioso compañero.
—¿Hola? —preguntó antes de detenerse. Se dio cuenta entonces de que no veía una mierda y las únicas dos fuentes de luz que había intactas... Se las habían llevado.
Entonces como si un atisbo de razón le abrazase, empezó a correr escaleras arriba.
—Os ayudo —dijo intentando aupar al más mayor de los que allí estaban, a Julio quién lo tendría más difícil de incorporarse si se quedaba atrás.
Algo hizo huir a Dupont del borde de las escaleras que descendían, decidió ser un buen compañero y ayudar al resto a salir de allí. El pánico se había apoderado del sótano, pero no solo eso sino que la curiosidad de Simmons hizo que se asomara también hacia las escaleras que aún descendían más en aquel lugar. Era como si el descenso a aquel infierno no tuviera fin.
Mientras se organizaban y esforzaban por subir rápido por las maltrechas escaleras, algo había hecho lo propio a sus espaldas por las otras. Su llegada fue precedida por un sonido cada vez más cercano.
Y cuando por fin notaron que había allí algo con ellos, fue demasiado tarde. De alguna forma aquella cosa monstruosa. Demasiados ojos, demasiadas bocas. No podía ser real y sin embargo allí estaba delante de ellos.
¡El monstruo reptante os atrapó!
Dijo la voz infantil y lo último que oyeron fue aquella risa de niña. Todo lo que había querido aquella voz desde el principio era alimentar al shoggoth que se escondía en las grutas bajo la casa.
Aquella misma tarde, antes de que anocheciera, ya se había dado por acabado el juego de dinámica de grupos. Nadie daba un duro por el grupo de Simmons, Dupont, Rogers y Cruz. Un equipo tan mezclado y tan pintoresco se debería haber rendido y vuelto a casa a los cinco minutos. Seguro que estaban tomando una cerveza en algún lugar o vagueando en lugar de buscar la bandera. Bandera que encontró la ex secretaria de Hayes padre, ella ni participaba, solo pasaba por allí para dar ánimo a los grupos, qué casualidad.
Durante días nadie los buscó, en el trabajo todo fue igual. Para cuando se les dio por desaparecidos oficialmente a los cuatro, la empresa ya había firmado sus despidos debido a su nulo trabajo en la dinámica de grupos y su ausencia.
~FIN~
Pues esto se acabó.
Muchas gracias por participar y ha sido un placer dirigiros. Mucha suerte para las puntuaciones y os deseo lo mejor.
Una cosa para aclarar: el mecanismo de la pared lo activé yo, no quería obligaros a ninguno a hacerlo así que hice que pasara sin más. Es lo que abría la pared al laboratorio de alquimia. Siento sin el algún momento pude liaros en mi explicación.
Pues decir que un placer haber jugado con vosotros. Al final ya ni me acordaba que estábamos concursando xDDD
Buen trabajo chicos, hemos muerto como se esperaba y roleado como mejor hemos podido. Y ya una duda, ¿Podremos conocer a nuestros compañeros de roleo (máster y jugadores) pasadas las votaciones o se quedará en el más misterioso secreto? Es por poner positivos y eso :P
Jeje, buena partida. Gracias a todos, yo también me lo he pasado muy bien. Luego, cuando se falle el concurso, se desvelarán todos los misterios y se quitarán todas las caretas, sip. Eso creo :)
¡¡Ha estado guay la partida!! Eso sí, creo que sí en lugar de ser de dos semanas hubiera sido de un mes... Se podría haber desarrollado un pelín más la historia.
¿Podremos conocer a nuestros compañeros de roleo (máster y jugadores) pasadas las votaciones o se quedará en el más misterioso secreto?
Sí, Chemo hará todo público al acabar.
Se podría haber desarrollado un pelín más la historia.
Justo, es un módulo cortito pero os he tenido que llevar un poco a correprisas al final. En un mes el módulo es jugable entero.
Y cuando por fin notaron que había allí algo con ellos, fue demasiado tarde. De alguna forma aquella cosa monstruosa había conseguido colarse por el hueco de las escaleras. Demasiados ojos, demasiadas bocas. No podía ser real y sin embargo allí estaba delante de ellos.
No puedo editar pero tuve una errata, releí y no tenía sentido mi media frase.
Como comenté esta mañana, me ha sabido a poco, pero me lo he pasado muy bien...
Una pena terminar muertos... casi podíamos haber subido y ver al monstruo debajo nuestro y haber salido por patas... de todas formas un buen final :-)
Y es cierto que no te planteas estar concursando, al final es una partida más de umbría, solo que mucho más rápida e intensa.
¡¡ Nos quitaremos las caretas dentro de poco !!