Una voz sale de tras de una de las puertas, justamente del fisgón de la ventana de antes.
"-Vayanse aquí no pintan nada, será mejor que se marche".
De enfrente al escuchar la voz del viejo, otra vieja alcahueta parece que se asoma, esta interesada en ver a los forasteros y en las palabras de su vecino de enfrente diciendo que se vayan...
No tenemos nada, somos gente sencilla, márchense. Una cabeza asoma por la ranura de la ventana, os ve con ropajes caros y llenos de armas. Vuelve a desaparecer.
En la aldea si que se podía ver, algunos gatitos, algún pulgoso perro. Incluso un rábano de ovejas con su perro pastor, un poco más allá.
Pero la gente se había metido en sus casas a vuestro paso. Incluso uno de ellos desde el refugio de su casa os invitaba a marcharos.
No se apreciaban grandes bienes ni articulos caros. Sus enseres eran de madera y barro.
Las casas tampoco eran muy grandes por lo que se podía ver por fuera.
Al parecer tienen lo justo para ir viviendo... Animales que daran lana, algo de leche y puede que algun vegetal o tuberculo en un huerto... No creo que el Nigromante, digo bajando la voz, quiera nada de ellos, mas alla que suministros si se acerca por aqui...
Alguien le parece buena idea preguntar si necesitan algo? si podemos ayudarles? o mejor pasamos de largo y que se las compongan?
Estamos en el Acto 3.
Este lo dejamos aquí...