Sonrió por las palabras del chico, incluso con la mejor de las voluntades había aprendido que no siempre era fácil mantener aquellas palabras, hubo un tiempo en que el había sido así, pero con frecuencia se habían mezclado asuntos de interés para el gobierno de sus tierras, con asuntos personales y los desacuerdos en el como gobernar se acababan tornando desacuerdos personales y al final diferencias irreconciliables.
Sin proponer se lo el tenía mala sangre con un caballero cuyas tierras ni si quiera eran colindantes a la suya, una víbora de veneno ponzoñoso que trataba de mermar su reputación según parecía para cubrir su propia incapacidad, quien lo diría, a sus años y con enemigos; el tiempo de ser impetuoso, reír fuerte, enfadarse rápido y solventar los enfados a puñetazos habían pasado y ahora solo restaban perseguirse con miradas furibundas y comentarios ácidos por los salones de los demás.
Añoró los tiempos en que el también creía que se podía vivir tranquilamente con un código tan sencillo como el que proponía ser Owain.
Por todo lo demás otros más notables hablaban de sus asuntos y el permanecería en un discreto segundo plano salvo que la conversación le diera pie a intervenir o se tornara personal y le disculparan para tratarla a solas.
Motivo: percep
Dificultad: 10
Tirada (2): 9, 1
Guardados (2): 9, 1
Total: 10, Éxito
espero a que me digas que me doy cuenta antes de postear amigo! Esta partida me encanta ojala pudiera ser de ritmo mas alto. Un abrazo.
¡uhmmm! Miraba al criajo con cara suspicaz, aunque era improbable que se lo hubiera inventado. De quien debías protegr a la señora?
Tirada oculta
Motivo: Astucia (memoria)
Tirada: 3d6
Resultado: 6, 3, 2
Aunque Lord Manfred te parece sincero en su deseo de amistad, te viene a cabeza algoque te dijo el Maestre antes de dejar Nido del Cuervo. Que los Dondarrion están pasando un mal momento, y por ello la alianza matrimonialcon ellos fue poco provechosa.
- ... Yo... pues de... la mala gente... - farfulla el patán. Miente como un bellaco. Si lo entregas a Lord Golan Grandison, tu anfitrión, lo más probable esque lo ahorque.
- Es uno de los esbirros de Ser Morlyn. ¡Nos estaba espiando!- dice la chica.
Por cierto, la doncella Lyvian tiene el mismo apellido de soltera queDoireann.
Analiza lo escuchado mientras recuerda las palabras del sabio maestre de su casa, sin lugar a dudas aquel hombre anciano y casi calvo poseía una fina comprensión de las mentes y modos de la nobleza.
Y por supuesto, como buen Cuervo iba a hacer lo mejor para los suyos.
En ésto que encontré a Eddan galanteando no muy lejos de mí y a duras penas pude reprimir el lanzarle una mirada dura de reprimenda por hallarse tan distraído. Pero oí que la chica Staedmon hablaba de espionaje y bellaquería.
¿Porqué Ser Morlyn mandaría a un chico a espiaros, milady? ¿tiene algo contra vos acaso? Me dirigí al chico con suavidad pero firmeza. Será mejor que no farfulleis embustes o se os atragantarán.
el calor me tiene el cerebro frito y se me pasan las horas sin acordarme que debia el post x_x
Me encontraba sioportando las patrañas de ese patán, que debía creer que había hollado entre palacios toda mi vida. ya Pensaba en retorcerle amablemente la mano cuando apareció la señora Doireann y al verla comprendí con rubor que no había estado prestando atención a lo que le ocurría. Un nudo se formó en mi garganta y estómago presagiando que si n ahora, más adelante se me echaría encima una considerable tormenta.
- Raymon y yo hemos estado prometidos desde niños, mi señora, y nos amamos. Mientras mi hermano mayor seguía vivo, mi padre no se opuso a casarnos cuando tuvieramos edad. Pero cuando m hermano murió hace poco y ello ha envenenado hasta el mismo aire para mi padre. Ahora soy yo la heredera y dice que sólo un guerrero puede conservar nuestro feudo frente a nuestros ambiciosos vecinos, y Raymon solo un niño. Morlyn Coilann pretende ahora mi mano. Está obsesionado conmigo. Sus sicarios mesiguen a todas partes, y dicen que él pretende desafiar a Raymon a un duelo en el torneo y hace ganarme. Pero si algo le pasa a mi amado, yo moriré también.