Stan comienza a escuchar las palabras del barbudo con cierto alivio, pues temía que no volviese a hablar jamás bajo el extraño influjo de Keks. Después, a medida que las palabaras del vagabundo salen en una desenfrenada catarata, los ojos de Stan se entrecierran al tiempo que su cerebro se esfuerza por separar la paja del grano.
El relato del viejo le deja con más preguntas que al principio, y al mismo tiempo conmovido. Si lo que dice aquel hombre es cierto, quién sabe los sufrimientos que habrá tenido que pasar o los terrores que habrá vivido. Quizás su aparente locura sea fruto del sufrimiento. Quizás fue su locura previa la que lo salvó de esa oscuridad de la que habla. Quizás solo un cerebro previamente alterado por una percepción deformada de la realidad puede soportar ciertos tormentos sin caer en el abismo. Por ello, las asustadas súplica de Dusan le conmueven.
-¡Tranquilo! ¡Tranquilo! No te haremos daño, hemos venido para evitar que esa oscuridad mate a otras personas. Le posa con cuidado la mano derecha sobre el mugriento hombro de él. -Seguro que después podrías venir con nosotros y dejar la isla. Dejar isla Terror. Sí, apuesto a que te gustaría viejo. Podremos pagar el pasaje, no hay problema. --Dice mirando a los otros.--Y dime Dusan, qué es esa oscuridad de la que hablas? ¿La reconocería si me encontrase delante de ella?
Robert presenció toda la escena con el hombre de la flecha clavada en la pierna con los ojos bien abiertos y ligeramente alucinado.
No sabía quien era ese tipo, por supuesto, pero le extrañaba que un ser humano hubiese podido sobrevivir a tantos peligros como parecía que había allí, él sólo y sin ayuda.
Se acercó ligeramente a Keks y al hombre para mirarle más de cerca.
Iba con las manos extendidas hacia arriba en señal de paz y hablaba en voz baja para no ponerle nervioso.
- Tranquilo, amigo, aquí nadie quiere lastimarte.- Después miró a Stan y asintió con la cabeza- Por supuesto que podrá venir con nosotros, de hecho, dejarle aquí es prácticamente lo mismo que una muerte segura, tarde o temprano.- Volvió a dirigir la mirada al hombre- Será un placer que seas nuestro guía, nos vendrá bien alguien que conozca la zona.
Sin embargo, tenía algo muy claro. Había visto alguna vez la locura en la mirada de algunos hombres, y no pensaba quitarle la vista de encima en ningún momento. Nunca se sabía como podían reaccionar ante nada.
- Si, si-si, si - decía contento mientras señalaba al este - Yo os muestro el camino que siguieron los hombres enmascarados hacia la ciudad dorada y a cambio vosotros me sacais de aqui. - La pregunta de Stan sobre la oscuridad le sorprende, mira a su alrededor. De no ser por los continuos rayos morados estariais inmersos en una profunda oscuridad. Todo allí parecía realmente oscuro. Se puso de nuevo a patalear y a gritar, pero esta vez no duró mucho - Yo conozco, conozco muy bien, sobreviví por conocer la zona. Soy un buen guía. Conozco bien por donde ir. Pero es peligroso. Oh, si. Muchos peligros puedes encontrar en la isla. ¿Y vosotros? ¿Estais aqui para detener a los enmascarados o para robar el oro? ´- dijo muy serio. - Soltadme, si, soltadme. Si no no puedo guiar. No puedo. Asi no puedo.
-Estamos aquí para detener a los enmascarados, Dusan. Para detenerlos. Luego saldremos todos de ésta isla maldita. No queremos robar a nadie
Desde luego no quiero nada procedente de ésta isla maldita.
Una vez Keks comprobó que la herida se cerraba, producto del varitazo, se concentró en las emanaciones mágicas, por si había alguna procedente de Dusan que indicara que estaba hechizado o encantado.
A continuación, con mucho cuidado procedió a liberarlo.
-Ya puedes guiarnos, Dusan, luego, en el combate, quédate atrás.
A ver si podemos alcanzar a los Razmirianos antes de entrar en la ciudad y liquidarlos ahí. Solo tendríamos que marcharnos después. Sigue soñando Keks.
Andrej observa de cerca al extraño personaje, estaba acostumbrado a las traicioneras tácticas de los razmiranos así que lo mejor sería vigilar a ese tipo de cerca...
Dusan se rascó la cabeza aceptando las premisas del oráculo. Levantar el brazo significó una nueva oleada de mal olor que les impregnó las fosas nasales.
- Debemos ir al "sitio" primero, sí. Esta cerca del pantano. Seguidme, sí. Debeis tener cuidado con las temperaturas. Los rayos. El clima y eso, sí. Nunca sabe donde pueden caer los rayos. - Señaló un árbol cercano que estaba completamente quemado. - Podrían caeros en la cabeza. Hace daño cuando te cae en la cabeza. Mucho daño. - dijo.
Salió a paso apresurado.
Os costaba seguirle, se movía de manera muy ágil entre las ramas y entre los pantanos. Y pronto os llevó hasta lo que parecía una entrada de una cueva.
- Este es el sitio. Es seguro, no atacan las criaturas, o atacan poco. Realmente no es seguro, pero la isla no es segura. Dentro de lo inseguro esto es lo seguro, aqui no suelen venir. Por eso es el sitio. Entrad, invitados. Entrad. ¡Vamos!
Se dirigió hacia su interior a paso seguro. Sin pestañear y sin pararse un segundo.
BOOM Nocturno!!!! A la primera hora que se vayan a dormir les atacan 7 Terror Frogs.
Motivo: Encuentro diario?
Tirada: 3d100
Dificultad: 25-
Resultado: 138 (Fracaso)
Motivo: Encuentro diario?
Tirada: 3d100
Dificultad: 25-
Resultado: 91, 45, 14
Exitos: 1
Motivo: Monstruo?
Tirada: 1d100
Resultado: 28
Motivo: 1d8 Terror Frogs
Tirada: 1d8
Resultado: 7
Motivo: Hora
Tirada: 1d8
Resultado: 1(+16)=17
Motivo: Rayo de energía
Tirada: 4d100
Dificultad: 2+
Resultado: 59, 39, 99, 54
Exitos: 4
Motivo: Tormenta Huracanada
Tirada: 2d100
Dificultad: 20-
Resultado: 100, 41
7 Terror Frogs
XP 400 Each
NE Medium Animal
Init +1; Senses low-light vision, scent; Perception +3
Defense
AC 12, touch 11, flat-footed 11 (+1 Dex, +1 natural)
hp 15 (2d8+6)
Fort +6, Ref +6, Will –1
Offense
Speed 30 ft., swim 30 ft.
Melee bite +3 (1d6+2 plus grab) or tongue +3 touch (grab)
Space 5 ft.; Reach 5 ft. (15 ft. with tongue)
Special Attacks pull (tongue, 5 feet), swallow whole (1d4 bludgeoning damage, AC 10, 1 hp), tongue. Darkvision 60´
Aura fear (as fear spell, 20 ft., Will save DC 9)
Statistics
Str 15, Dex 13, Con 16, Int 1, Wis 8, Cha 6
Base Atk +1; CMB +3 (+7 grapple); CMD 14 (18 vs. trip)
Feats Lightning Reflexes
Skills Acrobatics +9 (+13 jumping), Perception +3, Stealth +5, Swim +10; Racial Modifiers +4 Acrobatics (+8 jumping), +4 Stealth
Ecology
Environment temperate or warm marshes and aquatic
Organization solitary, pair, or army (3–8)
Treasure: none
Special Abilities
Tongue (Ex) A giant frog's tongue is a primary attack with reach equal to three times the frog's normal reach (15 feet for a Medium giant frog). A giant frog's tongue deals no damage on a hit, but can be used to grab. A giant frog does not gain the grappled condition while using its tongue in this manner.
Abilities negative energy absorption (Su; heals 1 hit point for every 3 points of damage that negative energy attacks would otherwise deal; a terror creature gets no saving throw against negative energy effects)
Immune fear effects
Giant frogs have razor-sharp teeth lining their mouths. They are 6 feet long and weigh 200 pounds.
Andrej se queda mirando las cercanías de la cueva, cualquier indicio que hubiera quería conocerlo...
Me tomo 10 en Supervivencia para buscar huellas y ese tipo de cosas.
A menudo sitio nos ha venido a traer. Pero ¿y si por una vez confías en alguien?, Keks. ¿Tanto te costaría?.
-Espera. Con calma.-Keks levantó su maza, que sólo había sujetado con la mano del escudo para conjurar o empuñar la varita. Poco a poco la cabeza metálica del arma empezó a brillar con una luz blanca, y viva, intensa pero fría.
-Te seguimos, Dusan. Espero que la confianza que depositamos en tí no esté desencaminada. ¿Nos dijiste que nos llevabas a la puerta para detener a los enmascarados. ¿No?.
Keks se dio la vuelta y susurró a sus compañeros. -Mantened los ojos bien abiertos.
Light al arma.
Siguiendo a Keks, se adentró en la caverna y al igual que su amigo, murmuró unas palabras y los ojos de la serpiente de su cayado comenzaron a brillar emitiendo una luz blanca.
-No se que me preocupa más Keks, que este hombre nos traicione o el hecho de estar tan locos como para estar siguiendo a un loco.-
-Poco loco me parece para haber estado mucho tiempo en éste lugar, ¿Tu o yo estaríamos mejor, Xan?. Veamos que nos enseña Dusan...
Yo es que tengo curiosidad, mi personaje es caótico y eso :p
No ves huellas ni nada que te llame la atención.
¿Entiendo pues que solo Keks y Xan entrarán detrás de Dusan?
No parece haber nada extraño, quizá si sea un refugio de verdad...
Andrej sigue a sus recién encontrados compañeros.
Robert avanzaba con todos los sentidos clavados en lo que ocurría a su alrededor. La situación se había vuelto un tanto extraña cuando su guía se había puesto a caminar entre la maleza como si fuese una calzada perfectamente pulimentada. Por suerte, los compañeros que iban siguiéndole eran experimentados, y pudieron seguirle el paso, aunque costosamente.
Ahora empiezo a entender que haya conseguido sobrevivir en esta tierra...
Escuchó las palabras de Keks y de Xan y tuvo que asentir para sus adentros. Realmente no era un lugar en el que la consciencia pudiese considerarse como un rasgo común.
Inspiró aire y suspiró.
Entró en la cueva que supuestamente era segura, dentro de la inseguridad, y con la espada bien agarrada, trató de seguir concentrado a los peligros que pudieran encontrarse.
Stan da un par de pasos inseguros y luego decide entrar en la cueva, más que nada para no quedarse solo en el exterior. No es que le encante la idea de adentrarse en una oscura cueva de la Isla Terror, guiado por un demente y en la persecución de una peligrosa secta de adoradores de Razhmir, pero a fin de cuentas, también tiene cierta curiosidad por ver qué les enseñará Dusan. Una vez que se decide no escuchar la voz de la prudencia, que sin duda aconseja alejarse de islas y lugares así, no se puede detener los instintos con los que todo aventurero aprende a tratar.
Por miedo que tuviera a entrar, era peor quedarse sola en el exterior de la cueva. Por ello, Morgana entró junto a los demás al interior de la cueva.
Parecía que era el lugar donde habitaba Dusan, y pronto todos los miedos desaparecieron. Dentro, estaban todas las posesiones del hombre: un par de roídas mochilas, una espada corta rota, una manta mohosa, un odre de agua y un escudo pesado de madera que había perdido la mitad de su circunferencia.
Un barril, en el fondo de la estancia, tiene en su interior una gran cantidad de tubérculos, hojas y carne seca cuyo origen no podeis ni imaginar.
Wait...
Mientas os habla, Dusan llenó las dos mochilas con carne que parecía putrefacta, se colocó el escudo en la espalda y la espada corta rota en la cintura. Entonces, agarra el odre de agua y apuntandoos con él comienza a relataros:
- Las criaturas que por aqui habitan son muy tenebrosas, si. La oscuridad las posee y las corrompe. No son animales y bestias normales. Son terror y miedo. Como la Isla, la Isla del terror. Oh, ya lo creo. Esas criaturas hacen que quedes paralizado por el miedo. Y además están los rayos. Que no os caiga ninguno en la cabeza o podríais morir. Y los huracanes. Alguna vez me pillo un huracan en un combate, si mientras combatia contra las criaturas del miedo y es horrible. Horrible porque el comabte es dificil con el huracan. Esos vientos no te dejan moverte y las criaturas no lo notan y te comen como te despistes. Es peligroso salir ahi afuera. Pero hay que defenderse y saber defenderse sí. - Se golpeó el escudo con la otra mano. - Ya podemos irnos. Estoy listo. Listo para guiaros. Listo para irnos. Puedo defenderme, pero a mi esas criaturas me dan miedo. Es mejor llenarse de excrementos el cuerpo y tratar de esconderse. Plantarle cara no es facil. Y ademas dan miedo. Mucho miedo.
Se acecó a la puerta con intención de guiaros lejos, hacia los pantanos que divisabais en el horizonte desde la posición elevada de la entrada a la cueva.
¿Qué miedo puedes ser mayor que el de la muerte? Y aún así le creo...
Andrej se sume en sus pensamientos mientras mira de cerca al hombre.
Yo lo sigo mirando bien a todos lados.
-De acuerdo Dusan. Te seguimos. Pero si nos encontramos con criaturas, tendremos que combatirlas, si tratamos de huir se cebarán en los más débiles.
Keks volvió a repetir el mantra que llevaba diciendo todo el camino. -Todos, no perdáis ojo de vuestros compañeros y tratad de cubrirlos aunque el miedo les posea. Cubriros unos a otros. Así aguantaremos. Así podremos exterminar a esos razmiranos y largarnos.
Ahora es cuando lamento no haberme traído una varita de quitar el miedo...
Go go go