- Ralflinder... ¿busca algo en particular? aquí vosotros sois los únicos que "desentonáis", si buscas algo que no sea un dracónido, no lo vas a encontrar amigo mio. Los viajeros que llegan aquí, descansan muy poco tiempo y siguen su camino apresuradamente -
El elfo estaba dando un largo sorbo a su vaso, mientras se inclinaba en una posición inhumanamente incómoda para mirar todos los rincones de la sala. La pregunta tan directa lo sacó de concentración y abrió los ojos de par en par, mientras se acomodaba nuevamente en una postura que no desafiase las leyes gravitatorias. Apoyó ruidosamente el vaso en la mesa y le devolvió a la amable dracónida una sonrisa bobalicona, mientras estiraba ambos brazos, molestando a Daenardan y Tordek que estaban sentados junto suyo Perdón... Perdió la mirada en el aire mientras buscaba alguna respuesta Ehem, estaba mirando si veia alguna muchacha elfa, pero la verdad, es exactamente como dice señorita Daaria.
Tomó un trozo de fruta pequeña, de trazas de colores magentas y verdes, la puso delante de su rostro y la observó. Tras unos momentos intentó ponerse serio con el asunto que tenían entre manos pues ya había divagado suficiente.
Pues... si hemos venido a Kilenia, debemos ajustarnos a su ley. Por ende, el juicio deberá ser dado por su consejo. Observó serenamente, luego se dirigió a Assur de manera reprobatoria Todos los órdenes deben ser respetados: el orden celestial, el orden natural y el orden que cada pueblo elige para sus ciudadanos. No exigiré que los dioses hagan lo que un campesino, ni que el campesino viva como tejón. Cruzó los brazos Así mismo, no podeis repartir vuestro juicio de Kélemvor a los que están vivos solo porque habeis reencarnado gracias al capricho divino. Así como Kélemvor juzga a los muertos, las gentes de Kilenia juzgan a sus congéneres con igual derecho mientras vivan.
Terminó de hablar y selló su opinión con el último trago de su vaso. Saboreó la dulce hidromiel mientras pensaba Vaya, luego de ese discurso van a creer que soy un elfo serio.
Dénaerdán estaba totalmente absorto por la opinión de su "hermano" y a punto estuvo de llorar... pero cuando Ralflinder, su viejo camarada de aventuras habló lo hizo mostrando una luz de esperanza... Pocas veces el elfo hablaba con seriedad, pero cuando lo hacía, no debía de ser tomado a menos.
Es una opinión preciosa Ralflinder... Luego dirigiéndose la mirada a la dracónida y también a Assur continuó: Estamos persiguiendo a un sujeto que está acusado de una acción vil e injusta como es el asesinato... si lo exterminamos nosotros estaremos cometiendo la misma acción vil e injusta y ¿quién nos cazará a nosotros? Incluso si nos regimos por las leyes para llevar a cabo tal acción debemos respetar las leyes hasta el final y ese hombre debe ser juzgado EN ESTE PLANO antes de que pase a otro nivel de existencia.
Dénaerdán también se había puesto en tono serio, como no antes lo habíais visto aún... pero fue sólo un reflejo, pues tras el siguiente sorbo de aguamiel sin alcohol volvía a tener esa sonrisa "característica" en su cara.
El enano había permanecido en silencio, saboreando las deliciosas viandas que se le habían ofrecido para recuperar fuerzas. Con suma atención , escuchó a todos y a cada uno de los presentes. Se permitió una sonrisa cuando observó al elfo eludiendo una pregunta tan directa, pero pronto su mueca cambió cuando las duras palabras del vengador se hicieron presentes.
Su rostro tornó serió y su ceño se frunció levemente, mas las palabras de su compañero elfo había sido tan correctas como si de un enano se tratase. dando un ultimo trago a su jarra, golpeteo con cierta fuerza para llamar la atención de los presentes:
- Mis bienqueridos camaradas...-comenzó en tono afable:-... en verdad os digo que me llena de orgullo encontrarme entre gente tan dispuesta a deshacer entuertos y hacer justicia.- se limpió el bigote con un leve movimiento de su mano zurda y continuó:- mas debemos ceñirnos a lo que se nos requiere y no tomarnos la libertad de ajusticiar tan arbitrariamente.- mirando a sadow.- ...Tampoco la impaciencia nos llevará lejos, muchacha.-
El enano desentumeció su articulaciones,estirándose un poco, mientras dirigía su mirada al llamado Denaerdan y a su compañero Ralflinder:
- Mis señores, me descubro ante vuestras palabras, quizás por un momento, la esencia de Moradin os ha tocado e impulsado a soltar esas perlas de sabiduría. Sabed que contareis, con mi humilde apoyo para hacer cumplir un juicio justo.-
Revisando por ultima vez su jarra ,intentando inútilmente encontrar algo mas de liquido, preguntó:
- Mi preciosa dama draconida, aunque no comparto tanto vigor como mis jóvenes compañeros, os pido cortésmente que nos dirijamos a la entrada de dichas cloacas, no sin antes de recibir vuestras instrucciones al respecto de las misma...-
Tras estas palabras, Tordek cruzó sus brazos ante su pecho mientras se reclinaba lentamente en el respaldo de su silla, aguardando una reacción por parte de alguno de los presentes...
Con los brazos cruzados y cara severa escucho una parte y otra y creyó que ya era hora de intervenir.
Bien, esta discusión se ha de acabar aquí y ahora. Nuestro parte de la operación de es ejercer la justicia si no de entregar al prófugo a ella, y ha de ser entre los suyos, y no ante nuestro juicios. Pero en verdad os digo, que quisiera escuchar su parte antes de entregarlo, hay cosas que me escama Mira a Daante y a Daaria y luego sonríe
Valga la redundancia al tema. Así que si estáis preparados y dejáis a parte vuestra lujuria y discusiones dialéctica que no es el momento ni nos lleva a nada, partamos pues. He dicho. Si alguien no esta de acuerdo con alguna de la parte de la accion encomendada al Gremio, es libre de irse, pero os recuerdo que no estamos por beneficio propios.
Daante había escuchado con atención cada una de las palabras allí dichas, le sorprendió la entereza de cada uno con su determinación, estaba claro que era un grupo muy capaz y con las ideas claras para con su objetivo, poco más podía decir ante lo dicho asta el momento, pero lo que si sabía es que intentaría coger al acusado con vida, y si pudiera ser sin violencia mejor, aunque eso nunca podía esperarse de un animal que es acorralado y perseguido, con lo cual sería una tarea algo complicada.
- Las pruebas nos indican que fue culpable, pero no somos quienes para dar un veredicto de muerte al encontrarlo y sin poder explicar los motivos o sin que se pueda defender ante la acusación, nadie vio como lo hizo por lo tanto hay posibilidad que algo se nos escape, le daremos caza con la intención de capturarlo con vida, a mi parecer si pudiera hablar con el antes de enfrentarnos sería ideal, pero eso estará en sus manos. Se quedón unos segundos pensando, recordando...- He visto a los hombres castigar con pruebas a otros hombres y criaturas, y saberse después que no habían sido ellos, y el daño ya estaba hecho, nunca va bien precipitarse en las decisiones, lo mejor es encontrarle y averiguar el por que de todo...
Se levantó de su asiento cuan grande era dispuesto a partir...
- Estamos perdiendo un tiempo valioso, cuanto más tardemos más ventaja tendrá para desaparecer...
Dénaerdán se levantó tan rápido que sin querer tiró lo que quedaba de su bebida por encima de la mesa. Velozmente puso su capote encima de la bebida que se extendía por la superficie del mueble para detener el derrame... pero al hacer tal cosa sólo consiguió tirar la bebida de Tordek sobre el enano*
Perdón, perdón... Dénaerdán se limitó a limpiar como pudo la mesa y el resto del estropicio provocado, mientras iba murmurando:
Torm bendice a los compañeros que van a aguantar mi torpeza...
Motivo: tirar bebida de 1-Ralflinder, 2-Assiur, 3-Daante, 4-Daaria, 5- Tordek, 6- Heimdall, 7- Sadow , 8-vuelve a tirar
Tirada: 1d8
Resultado: 5
*A decisión del máster si quiere poner TS Reflejos :D
Haciedo caso omiso de la torpeza del malhadado deva le dirigo unas palabras:
Denaerdan...nadie nos cazara pues si has escuchado bien esta en busca y captura(vivo o muerto).
Ya he dejado clara mi postura, sin embargo me atendre a los deseos de Daaria que es quien nos ha llamado.
Heimdall tiene razón ya deberiamos ponernos en marcha.
Mientras comía y bebía tranquilamente, los compañeros del gremio que han venido a ayudar en el problema, discutían por como atajarlo o mejor dicho, cómo resolverlo. Hay diferentes opiniones, todas válidas, pero Heimdall decidió intervenir. Como era de esperar, el humano paladín dejó las cosas claras y el otro dracónido que estaba sentado a la mesa, indicó lo mismo que él. Pero el razonamiento más convincente que escuchó fue el del Deva de color azul - Que razón tiene este ser, si ejecutamos al que se supone ha ejecutado a Erag... ¿en que nos convierte eso a nosotros? -
- Señores, todas las opciones que aquí se están exponiendo son totalmente válidas y seguramente el consejo no se antepondría en cualquier decisión, pero lo dicho por el Deva me ha llegado hasta el alma... No seré yo quien se tome la justicia por su mano, ni tampoco voy a hacer que vosotros lo hagáis. - comentó en tono firme - así que desde ahora, y creo que la mayoría estáis de acuerdo, iremos en busca de Arnan para entregarlo al consejo vivo y que sean ellos los que ejecuten su veredicto - Tras eso, quedó unos instantes en silencio.
En ese pequeño instante, también estuvo escuchando las ansias que tenían los guerreros para empezar ya - Amigos, coman y beban tranquilamente, lo que viene a partir de ahora va a ser divertido, pero nos va a exigir lo mejor de nosotros, pues las cloacas no son nada fáciles. Desde mi mas tierna infancia hasta ahora, las cosas han cambiado ahí abajo, se todos los entresijos, pasadizos y caminos de ahí abajo, pero no se exactamente que nos encontraremos, así que relajaros un poco y descansar, que el camino ha sido largo - tras eso, la guapa dracónida se levantó e hizo un pequeño gesto con el hombro en forma de coqueteo al elfo que se estuvo sentando en la silla de forma extravagante - ¿que verá este elfo en este gesto? ¡es solo mover un hombro!.... no entiendo a estos elfos salidetes..... - Si me disculpais, voy a la barra a aclarar las cuentas con el dueño... en seguida vengo - y se dirigió a la barra.
Bueno chicos, si gustais rolear algo más, no os cortéis. La escena está en su final. Este finde iré preparando la siguiente, donde va a reinar la acción, la sangre, los golpes.... espero que los encuentros sean de vuestro agrado, es mi primera partida inventada y espero hacerlo bien (intentaré no dilatarme en exceso en las descripciones, pero no prometo nada :P )
Las palabras de Daaria acaban y yo vuelvo a mi introspección habitual, intento calmarme y degustar las viandas, pero los movimientos de cortejo del elfo y la draconida me distraen...hasta cuando estos mortales se dejaran llevar por sus bajas pasiones? me pregunto interiormente, en fin supongo que es su naturaleza, han de reproducirse no como los seres de naturaleza divina como mi raza.
Aguardo ansioso nuestra partida, pronto los enemigos sentiran la furia divina.
El elfo se quedó mirando por un momento a la dracónida cuando se levantó y le hizo aquél gesto con el hombro. Cualquier cosa que hubo pensado al respecto se la guardó y tomó otra fruta de la fuente, se recostó sobre el respaldo de la silla, que por cierto le quedaba evidentemente grande, y le dió un gran mordisco.
Mientras masticaba y degustaba comentó, sin dirgirse a nadie en particular Quempf fuenaf estmpamf eftaf... tras lo cual siguió en su tarea de disfrutar de aquellas viandas sin demostrar demasiados modales.