Janet miró como sus compañeros se alejaban. Por fin estaban en casa, por fin habían salido de aquella pesadilla medieval, y nadie había resultado muerto. Con tantas cosas extrañas que les habían pasado y con tatos seres con les que se habían enfrentado, aquello le sorprendió. Pero ya estaban en casa.
- Si hubiera tenido que volver a bañarme en aquel barreño, le arranco la cabeza a alguien... Se estremeció un instante.
- Señores. Dijo Janet dirigiéndose a sus compañeros. - ¿No había alguien que tenía que invitarme a un spa? Tengo que quitarme el olor a estiércol de caballo del traje... Y se olía el hombro con cara de autentico asco.
Si lo llego a saber hubiera configurado la armadura para un espacio para dos con hidromasaje, Janet, querida. Me temo que sólo puedo ofrecerte el Spa privado de mis aposentos en mi mansión de California...Me siento tan avergonzado...
- Con eso tengo más que suficiente Tony, y si le añades una botella de champán, seré la mujer más feliz del mundo. Obsequiando a Tony con una mirada juguetona - No soportaría otra copa de cerveza caliente... Añadió mientras sonreía feliz de volver a estar en casa, con todo los lujos que eso comportaba.
Tony sonrió girandose hacia el resto de Vengadores.
¿Que puedo decir? La suerte me acompaña!
Cogió a Janet de la cintura y encendió los propulsores de sus botas.
-Señores, señora...Nick, nos vemos en la próxima crisis mundial. Prcuren que no vuelva a caer en jueves, me perderé otro capítulo de Padre de Familia!
Y...con eso se termina la aventura. Muchísimas gracias muchachos, un placer!!