Partida Rol por web

Sí,

Megan volvió sola y convertida en alguien totalmente diferente.Las muertes de su hija y su esposo la destrozaron por dentro y jamás pudo volver a sonreír.Vivió sola,rodeada de todos los lujos que Luca había dispuesto para ella,lujos de los que no disfrutó pues no tenía con quien

Jamás volvió a estar con un hombre pues guardó luto por Luca el resto de sus días al igual que por la dulce y bella Becky,su pequeña,su niñita,su razón de existir,sin ella,nada valía la pena.Usó gran parte del dinero de Luca para fundaciones benéficas a nombre de los dos y dejó un testamento en el que se indicaba claramente que tras su muerte todos los bienes debían ser entregados a distintos orfanatos.

Pasaron los años y aunque debía haberse marchado para que nadie sospechase,en realidad no le hizo falta.Había dejado de salir hacía años y cada cierto tiempo cambiaba a los criados por lo que realmente hacía más de doscientos años que nadie la veía.A veces paseaba sola por la noche,perdida en una pirámide que nadie más podía ver,sólo ella.Viajó mil veces al mismo lugar pero nunca se atrevió a entrar,sus cadáveres debían haberse convertido en polvo hacía ya mucho tiempo pero eso no lo hacía más fácil.

Cuando comprobó que no podía morir enloqueció,ella quería reunirse con sus dos amores y ahora ya no podría hacerlo.Recorrió mundo,visitó países que nunca creyó que iba a ver,intentó escapar de sus recuerdos de cualquier modo pero en realidad no quería olvidarlos,no podía.Dejó de viajar y se encerró en casa,donde fue dejando que su aspecto decayera.No podía envejecer pero nadie la obligaba a estar presentable.Sus pelos se convirtieron en una maraña que nunca peinaba y sus ropas fueron pasando de moda,algo que en otro momento la hubiera enfurecido.Ahora le daba igual,para ella los días pasaban,asomada en una ventana de su enorme y solitaria mansión,rodeada de las fotos y los recuerdos de Luca y Rebecca.Y así,convertida en una sombra,decidió realizar su último viaje.Consiguió una pistola y partió sin nada más que eso y la ropa que llevaba puesta.Su jet privado le evitó incómodas preguntas sobre el arma y sobre su loco aspecto

Y llegó al lugar.Habían pasado más de doscientos años y sin embargo ella lo recordaba como si fuera ayer.Y el lugar la recordaba a ella,estaba segura.Nada había cambiado,la magia de ese lugar lo mantenía apartado y oculto a los curiosos.Decidida y riendo como una loca,Megan corrió,pistola en mano,al encuentro de los suyos,aquellos que habían quedado encerrados en aquel horrible lugar.No le hacían falta mapas,conocía el camino.Con los ojos enfebrecidos y una sonrisa enajenada la mujer llegó a la sala de los gatos,aquella en la que empezó todo,aquella en la que se separaron de Nerthus y al volver la anciana se había transformado.Y aquella en la que su marido y su hija se quedaron,atrapados por las bestias que allí habitaban.Le dio igual hacer ruido,entró casi corriendo,riendo a carcajadas y despertando a los felinos que se prepararon para abalanzarse a ella,algo que hicieron pero que ella no notó pues el disparo en la sien hizo que su cabeza reventara y cayera muerta al instante,con media sonrisa aún grabada en su otrora bello rostro.Por fin estaba con ellos.Había tardado,pero ahora sí descansaría en paz