Hace frío. Mucho frío.
Estábais descansando. De hecho, un merecido descanso. Entonces llegó alguien, os arrancó de vuestras raices y os llevó a este lugar desconocido para manteneros encerrados. Pero algo le salió mal y ahora podéis huir. Siempre y cuando evitéis a los cazadores, que acaban de llegar.
Una partida de Haunted House. Los personajes son personas normales en una situación mortal, con toda la vida por delante.