Partida Rol por web

-Ya le queda poco! Togepi, usa poder pasado y termina con él de una vez!- Le animo, esperando que no volviera a fallar

Togepi estaba bastante motivado gracias a tus palabras, sin embargo aquello no fue suficiente para que el ataque impactara, si había un problema con Poder Oculto es que en determinados objetivos era dificil de acertar, sin embargo aún no podía darse por vencido, el combate lo tenía practicamente ganado, a no ser que Happiny hiciera algo innovador.

El malherido pokémon, aprovechó que observó de nuevo el ataque de Togepi para copiarlo, antes no pudo hacerlo por haberse quedado dormido, pero aquello no iba a seguir así ahora. Cogió fuerzas de donde casi ya no había e intentó devolverle el ataque al Togepi de Izasu, y aunque estuvo cerca, siguió sin ser capaz de impactarle.

Gruño un poco, los ataques de Togepi fallaban continuamente, definitivamente necesitaba que prendiera un ataque más preciso o le costaría mucho trabajo los próximos combates. -Sigue ahí, Togepi, tiene que caer!!- Dijo, animando a su pokemon

Finalmente y con un último esfuerzo, Togepi logró hacer que su ataque impactase contra Hippiny. La sensación de alegría fue enorme tras comprobar que el pokémon salvaje había caído abatido, no estaba muerto pero había perdido totalmente la consciencia.

Esta había sido tu primera victoria en un combate pokémon, ese recuerdo sería difícil de olvidar.

-Yay!- Alzo en brazos al pequeño Togepi con una sonrisa alegre cuando el happiny cayó inconsciente, sonriendo contento. -Bien hecho Togepi! Tenemos que seguir así!- Dijo, mientras Togepi movia sus manitas alegre por ser el centro de atención de su entrenador y recibir un cariñoso abrazo. -Eres el mejor- Dijo, acariciandole entre los cuernecitos. -Ahora vamos a buscar otro rival.-

Mientras celebrabas con Togepi su victoria, decidiste seguir echando un vistazo a los alrededores para comprobar si veías algún pokémon contra el que seguir luchando, y parece que tu petición se había cumplido puesto que a escasos metros de donde luchaste contra Happiny viste un Bulbasaur moviéndose de un lado a otro

Parecía que estaba intentando mordisquearse el bulbo que tenía en el lomo, quizás estaba esperando a soltar alguna semilla para así alimentarse, desde luego mostraba mucha actividad.

Notó movimiento por el rabillo del ojo, girándose al ver a un Bulbasaur muy juguetón girando sobre si mismo intentando mordisquear su espalda. Rió un poco al ver como lo intentaba sin mucho éxito, risa que fue coreada por Togepi, que se acercó al Bulbasaur con curiosidad. -Espera!- Dijo, agachándose para coger a Togepi, pero retrocediendo un poco. -Mmm...Togepi, usa Bostezo...- Le ordeno con un susurro, así se aseguraría de capturarlo.

Aprovechando que Bulbasaur estaba distraído, Togepi pudo realizar su Bostezo con mucha facilidad sin que detectaran su presencia. Aquello provocó de nuevo aquel estado previo al sueño al pokémon tipo planta, el cual dio un pequeño bostezo en cuanto se percató de la presencia de Togepi, sin embargo pareció que ver al pokémon de Izasu hacerle algo extraño también le enfureción, eso te recordó mucho a la reacción de Cyndaquil y sobre todo a como terminó aquella pelea.

Bulbasaur con un movimiento brusco enderezó sus patas y echó una mirada desafiante a Togepi, después pudiste ver como el bulbo del lomo del pokémon comenzaba a brillar, como si estuviera absorbiendo la energía solar que había alrededor en un día tan soleado como hoy ¿se trataría de un demoledor ataque?

Sacó una pokeball cuando el bostezo acertó, esperando tranquilamente a que el pokemon planta se durmiera, sonriendo al ver que cargaba energía. No le daría tiempo a atacar antes de caer redondo al suelo y si togepi podía evitar daño, eso facilitaría seguir buscando un equipo pokemon. -Togepi, alejate y preparate para esquivarlo por si acaso.- Dijo, atacar de todos modos solo pondría en una posición más vulnerable al pequeño. Se apartó el también para evitar que le diera de refilón.

Zlatan se acercó prudentemente a la piedra para observarla antes de tocarla. Era una piedra muy extraña y no sabía si debía tocarla o no.

Tal y como se veía venir, Bulbasaur cayó presa de la técnica de Togepi, hasta el momento parecía que Bostezo era infalible. Bulbasaur ahora dormía, su bulbo dejó de brillas, seguramente tras perder la concentración.

A simple vista aquella piedra no parecía ningún tipo de amenaza ¡tan solo era una piedra! pero...

de repente, en el momento que aquella roca notó el calor de tu mano acercándose, comenzó a moverse. En un abrir y cerrar de ojos la "piedra" se desenterró dando varios giros sobre si misma ¿pero qué demonios pasaba?

En ese instante comprendiste que lo que tenías ante ti no era un objeto, ¡se trataba de un pokémon! pero sin lugar a dudas era artificial.

Cuando bulbasaur se durmio, le tiró una pokeball, seguro de que de ese modo la captura no presentaría ningún problema, acariciando también la cabeza de Togepi como recompensa por un trabajo bien hecho

Gracias a la confianza que te daba ver a Bulbasaur dormido, supiste que la tarea sería mucho más sencilla que cuando intentaste atrapar a Mareep o a Togepi, sin embargo hasta que no escuchaste el click de la pokéball no te aseguraste de que Bulbasaur iba a ser tu nuevo pokémon

¡Enhorabuena!

Recogió la pokeball con una sonrisa satisfecha, recogiendo a su vez a Togepi. -Ya tenemos otro compañero, Togepi.- Dijo, sonriendo suavemente mientras caminaba un poco. En un rato sacaría a Bulbasaur de su pokeball, seguramente aún estaría dormido por el efecto del bostezo, así que buscaría algún pokemon más y despues iría a ver a Zlatan

Zlatan se sorprendió al ver aquel pokemon resurgir de la nada. No podía desaprovechar la ocasión de atraparlo. Miró a su pequeño Cyndaquil y le dijo.

-Adelante Cyndaquil, ve a por él, tenemos que capturarlo y unirlo a nuestro equipo.

-Ten cuidado Cyndaquil, no sabemos si es muy peligroso nuestro rival, debemos andar con ojo.-Era el primer combate que realizaba y sentía nerviosismo como era de esperar. No quería que su pokemon saliese muy malherido, y tampoco lo deseaba en el contrario. Aun así, era lo que tenía que hacer.-¡Estallido Cyndaquil!