Partida Rol por web

-No necesitamos tu atención, Doc. Necesitamos los dólares que vale tu equipo médico y lo que contenga la mochila de la "rubita" -dice el que suele llevar la iniciativa mientras comienza a avanzar hacia John.

Avance que se ve interrumpido por la palabras de Edel. A las cuales responde, con rostro entre sorprendido e incrédulo, el segundo asaltante que había hablado:

-Jajaja. ¿Pero por quien nos tomáis? ¿Creéis que somos bobos? -pregunta mirando a sus compañeros con gesto bobalicon. -Anda, "rubita" vacía ya la puta mochila si no quieres que nos enfa...

Entonces, casi sin tiempo para terminar la frase, observáis como Isaac, recién entrado de vuelta al refugio, se acerca velozmente por la espalda de los asaltantes, y como con un salto, en el que consigue la horizontalidad de su cuerpo en el aire, consigue abatir a los cuatro asaltantes, que se ven en el suelo, sorprendidos por tan inesperado ataque.

Caroline, tras dar la vuelta al refugio, y comprobar que no existen mas entradas al mismo, observa en el suelo unas manchas recientes de sangre que conducen hasta unos secos arbustos, donde se pierde el rastro.

Sin mas pistas que seguir, todo parece indicar que el panorama del exterior del refugio se encuentra despejado y sin peligro.

Con una furia salida de nadie sabe donde -"Yo sé de donde"- Isaac se abalanza sobre el que parece el jefe en cuanto puede. Sin pararse un instante a reflexionar, sólo piensa en golpear salvajemente, una y otra vez, el rostro de aquellos capaces de aprovecharse de gente que tan mal lo ha pasado y que ha perdido tanto...

La asiática siguió el rastro de sangre hasta unos arbustos, momento en el que perdió el rastro, lo que le hizo entrecerrar los ojos. Una de dos, o el herido había venido de ahí (y había empezado a sangrar demasiado a la altura de los arbustos), o bien era todo lo contrario, alguien había intentado escapar del refugio y después... ¿después qué? ¿Le habían pillado? ¿Se había vendado? Intentó discernir más rastros, pero tras un buen rato, dio una patada a una piedra con un gruñido de frustración. Odiaba que se le escapasen las cosas, y lo peor de todo, odiaba que el otro mariconazo tuviera razón y hubiera sido una pérdida de tiempo.

Vaya pedazo de mierda.

Refunfuñando, se metió las manos en los bolsillos y volvió al refugio. Esperaba que nadie hubiera tocado sus cosas, o un día que apuntaba malo se iba a convertir en uno muy sangriento, especialmente teniendo en cuenta que empezaba a sentir el mono de más cilindros de muerte.

Espero que al menos siguiendo a ese tipo la cosa se anime un poco, o si no me voy a morir del muermo...

John saca el bisturí y se interpone entre los cuatro tipejos por un lado y Edel, Jason y su mochila por otro.

- Edel, busca ayuda. A alguien del refugio. - apremia mirando a la chica rubia. - ¡Deprisa!

Con el bisturí en la mano se mantiene expectante por si alguno de los maleantes sacase un arma.

En el momento en el que Caroline "Mad Dog" Tanaka regresa al refugio, los atracadores se empiezan a recuperar de la sorpresa.

Viéndose ante un hombre armado, y con su líder siendo golpeado salvajemente, deciden darse a la huida, tropezando en ella con la recién llegada Tanaka.

Hay uno que todavía está siendo golpeado salvajemente por Isaac.

John está junto a ellos, bisturí en mano, y Edel junto a John.

Perdona, mi descripción había sido demasiado escasa para tu personaje.

Tras unos segundos de confusión, la asiática frunce el ceño y se planta justo en medio de la puerta, lanzando un patadón con todas sus fuerzas a la entrepierna del tipo que se encuentra más cerca de ella

¡Eh! ¿Hay fiesta y nadie me invita?

Parece típico, pero todo sucede bien deprisa. Isaac aparece inesperadamente volando listo para pelearse contra todos esos tipos, John, bisturí en mano, me pide que salga corriendo a por ayuda… y el colmo es cuando llega Tanaka, que considero que de haber estado ella esos tipos ni se habrían acercado. Para cuando llega, los maleantes se largan con las caras y el orgullo magullados por la paliza que les ha dado Isaac, tropezándose con ella y con su patada de despedida. ¿Dónde habrá aprendido Isaac a pelear así? ¿También será exmilitar como Tanaka? Al menos nos han sacado de la tensa situación. Todos han aportado algo, de una manera u otra. Mi gran aportación a la causa ha sido una cara más pálida de lo normal, viendo en qué líos nos podemos meter sin abrir la boca. ¿Es que todo el mundo va preparado para partirse la cara? Parece lo normal, vaya.

Salgo de mi ensimismamiento, respirando hondo.

"De menuda nos hemos librado"

- Empezamos bien… Creo que será una buena idea moverse de aquí cuanto antes. No quiero que vuelvan con todos sus apestosos amigos de nuevo.

Isaac se levanta de golpe, dejando en el suelo al grandullón, en bastante mal estado. Tiene los nudillos magullados y llenos de sangre, tanto propia como ajena, tiembla violentamente y tiene los ojos empañados por las lágrimas. No lamenta lo que ha hecho, ni es miedo, ni nada de eso. No es la primera vez que le pasa. Cada uno libera la tensión como puede. Hay quien se vuelve eufórico... y a Isaac le pasa esto. Echa una rápida mirada a los demás para comprobar que están bien. Luego se retira a una esquina apartada, donde se encoge y trata de calmarse.

Una vez que los cuatro tipejos han huido John se acerca a Isaac.

- ¿Estás bien? - pregunta mientras busca posibles heridas. - Déjame ver.

El joven se agacha junto a él y le examina los nudillos que están en carne viva. Una vez que se cerciora de que las lesiones no son más graves se vuelve a incorporar.

- Te curaré más tarde pero Edel tiene razón. Deberíamos irnos antes de que vuelvan.

Y ya que estamos, podríais explicarme qué cojones ha pasado la asiática estaba de todo menos exultante mientras se dirigía a su mochila, las manos en los bolsillos He encontrado un rastro de sangre que sigue hacia unos matorrales, es posible que fuera de tu novio, rubita, por lo que nos podría indicar una dirección a seguir. Es eso, o es alguien herido, y supongo que Doc querría verle añadió, finalmente, mientras se echaba la mochila al hombro, acercándose de nuevo al resto. Ni de coña les iba a dejar salir corriendo sin ella: esos tipos tenían una diana en la frente, y eso siempre traía consigo todo tipo de situaciones en las que, para qué negarlo, se sentía como en casa De todos modos, estoy de acuerdo, lo mejor es salir cuanto antes. Si hay algo seguro es que si dejas escapar al enemigo siempre vuelve y en mayor número...

-Wow, ha sido espectacular. Esos tipos trataban de atracarnos y cuando más tensa estaba la cosa, apareció Isaac por la espalda y tumbó a los cuatro saltando sobre ellos. A continuación John sacó su bisturí e Isaac se ensañó a puñetazos con el que parecía el líder. El resto, al ver el panorama, se dio a la huida, y fue cuando tu regresaste.

Sin decaer en su emocionada explicación, James continuó:

-Tenéis razón. Debéis partir cuanto antes. Solo permitidme que os de un par de últimos consejos -cof, cof- la ruta más rápida para llegar a Washingtown D. C. es por carretera. De aquí a Boston, de Boston a Hartford, luego New york,  Philadelphia y de ahí ya a Washingtown D. C.

James estaba hablando muy rápido, demasiado para el estado en el que se encontraba, por lo que tras un imprescindible respiró concluyó.

-Una vez allí id al barrio de Bethesda, donde podréis encontrar a Denis, una persona que os podrá ayudar a infiltraros en uno de los mítines de Simon Wright.

Dicho ésto, se sintió como liberado, como si ya hubiese cumplido su cometido. Pero aún así decidió añadir algo mas:

- No os preocupéis por mi, estaré bien. Habéis trabajado bien en equipo, y lo importante es que tratéis de desenmascarar a Wright lo antes posible. Antes de que haga mas daño del que ya ha hecho.