Café Race

Café Race

Descripción

Juego sencillo para 2 a 5 jugadores y con una temática muy coñera. Estás en el trabajo y suena el timbre del descanso para el café. Fernando se levanta rápidamente de su silla para ser el primero en llegar y que le dé tiempo a volver. Eduardo, Diego, David y Álvaro le siguen. Con el café en la mano, todos vuelven escaleras abajo. Ahí es donde comienza el juego. Nuestros avezados trabajadores tendrán que volver corriendo escaleras abajo procurando que no se les caiga el café y el cruasán. Es tan importante ser el primero en llegar como llegar con más café que los demás.

Comentario

No todos los días tiene uno la grata experiencia de probar un juego de tablero "made in spain" que merezca la pena. Café Race es uno de estas excepciones; un juego creado por Francisco Franco Garea que debuta así con buen pié como autor de lo que espero, sea una gran serie de éxitos en el mundillo de los juegos de tablero.

Lo más curioso del juego es su mecánica.

Como podemos ver en la imagen, el tablero de juego son básicamente, las escaleras que llevan de la máquina de café a la oficina. Cada escalón es una casilla y los descansos están divididos en tres casillas.

Al principio del juego, uno de los jugadores deberá tirar tantos dados negros como jugadores haya. Entonces, se echa a suertes quien es el primero en actuar. Este jugador, sacará a subasta uno de los dados a su elección (es decir, el resultado de cada dado obtenido en la tirada anterior). Empezando por el jugador de su izquierda, cada uno usará el dado de su color para marcar la cantidad que puja. A dicha cantidad, le llamaremos en adelante, "impulso". La puja se resuelve a una vuelta. Sucesivamente, se van sacando los siguientes dados a subasta hasta que cada jugador tenga adjudicado un dado negro. Entonces, se resuelven las acciones, empezando por el que tenga el dado negro con el valor más alto, luego el que tenga el impulso más alto, luego el que esté más rezagado y luego el que tenga menos café en su taza y en caso de que persista el empate, será la suerte la que lo determine.

Secuencialmente, se van aplicando todos los movimientos y al final de cada uno, los currantes habrán de hacer una tirada de agilidad para evitar que se les caiga el café. La dificultad de la tirada es la suma del dado negro que han movido y el impulso. Si se falla la tirada, el jugador perderá uno de los cinco contadores de café (o cruasán) de que dispone. Si el movimiento termina en una de las tres casillas de uno de los descansos, se evita la tirada.

El problema viene cuando hay un atasco y Alvaro se encuentra en su carrera conque Diego y Fernando van corriendo delante y ha de frenar para evitar llevárselos por delante mientras intenta mantener su café en su sitio; en cuyo caso, tendrás que hacer una tirada de agilidad adicional para evitar que se te caiga el café.
Y por supuesto, tampoco es bueno pasarse de largo no vaya a ser que en tu carrera, te pases la oficina de largo.

Así, entre saltos, carreras, codazos y empujones, el juego transcurre de manera fluida y divertida.

En definitiva, se trata de un juego sencillo, que se juega en un escaso cuarto de hora y que tiene la jugabilidad suficiente para que resulte entretenido y altamente adictivo. El orden en el que se vayan subastando los dados es fundamental porque va a determinar cuanto habrá de mover cada uno, en qué orden y la dificultad de las tiradas de agilidad. Además, hemos de tener en cuenta las barreras, tanto a la hora de hacerlas como a la hora de evitarlas.

Como mayor pega, decir que el juego se hace un poco soso con menos de cuatro jugadores.

Opiniones