Partida Rol por web

Llegas a la ciudad, el tiempo es soleado, y caluroso, vas a un motel en busca de una habitacion. La desaparicion de gente durante la noche y ciertas marcas en los cadaveres te han echo llegar hasta alli.

Decides ir a un bar que regenta una ex cazadora y donde paran algunos d etus compañeros, queizas ella te pueda ayudar. Gemma era una vieja amiga, dejo su trabajo cuando se quedo embarazada, depues decidio montar el negocio para ayudar a los chicos pero sin implicarse demasiado.

La noche cae, una suave brisa mitiga el calor y entras en el bar, Gema al verte sonrie y se apoya en la barra - Buenos ojos te vean!

Sofía se sonrojó al oír las palabras de Gemma y le dedicó una tímida sonrisa - sí, hace bastante que no paso por este lugar y la verdad es que te hechaba de menos Gemma, pocas personas saben como tu mis... habilidades y siguen a mi lado - su mirada se entrizteció al recordar la lejanía con sus padres, había como un abísmo inmeso entre ellos y la chica había perdido toda esperanza.

Bueno quería comentarte... - dice intentando sacar de su pequeña mochila un dibujo - ando buscando algo como esto - dice mostrándole una de las muchas páginas del cuaderno - espero que sepas ayudarme.

Te pone la cerveza bien fria con algo para picar - ¿Has comido pequeña? - junto cuando lo dice notas como te rujen un poco las tripas. Ella sonrie y se pone a cortar algo de embutido y pan. Despues pone unas patatas a freir.

Te mira sonriendo - Mas te valia venir aqui antes que a cualquier sitio como me enterase de que habias llegado y no fuera el primer sitio por el que pases volveria a la caza jajaja - Gemma siempre s muy dura ocn la gente pero contigo siempre a sido muy buena y amable.

- Gabriel, llegara en un poco, lo mande a por unos pedidos, llego ayer a la ciudad. El te podra ayudar con eso...- Dice mientras mira el dibujo. Ahora que lo piensas su hijo tendra mas o menos tu edad un niño rechoncho que se dedicaba a tirar de tus trenzas cuando erais pequeños. En el bar hay muy bien ambiente, algunas timbas d epoker gente en el billar.

Sophía come lo que Gemma le prepara con tanto amor, casi es como su madre, ya que por desgracia de eso casi carece. Le resulta tan delicioso que apenas para a respirar, lo que le provoca un poco de tos pero con beber un poco tiene suficiente.

Crees que tu hijo, Gabriel, ¿sabrá que significa ese dibujo? - dice con la boca llena sonrojándose por su comportamiento - lo siento, es que tengo un poco de hambre - puntúa.

No le hacía gracia el volver a encontrarse con él, no le recordaba con buen agrado, el que le tirara del pelo la molestaba en demasía por lo que intentaría estar el menor tiempo posible con él, lo justo para que le dijese el siguiente paso para seguir con su caza. Ahora mismo estaba dando pasos en falso, con la ayuda de ellos es posible casi seguro, encontrar a ese monstruo.

Preguntale a el... - te contesta. Notas un aliento en tu nuca y como te susurran - ¿Y esa mueca de ascoo ante mi nombre? - Cuando te giras ves a un chico apoyando una caja de cerveza sobre la barra. Esta fibrado y tiene varios tatuajes por el cuerpo su cara de chico malo lo delata pero al girarse te sonrie como cuando erais pequeños.

Ves que tiene dos marcas una en un brazo y otra en el abdomen, claramente garrazos de hombre lobo seguro. Tras dejar la caja se acerca a ti - Mama una cerveza bien fria.

Esto... yo... si, es que... - habla titubeando ante la imagen, es lo último que esperaba encontrar a ese chico, ella esperaba algo más... diferente, Sophie tranquilizate, estás haciendo el ridículo, se reprocha respirando hondo e intentando soltar más de una palabra seguidas - lo siento, mi mueca era... - se queda callada no sabe que decir - lo importante es esto - dice rápidamente para cambiar de tema y le muestra el dibujo, no puede evitar mirarle es todo un sueño hecho realidad excepto por esa sonrisa que no puede hacerle olvidar su infancia.

Espero que puedas ayudarme, ese monstruo está matando a mucha gente y tengo que hacer algo - sus palabras mostraban la pena que tenía guardada en su interior, le hubiese gustado ser normal, como todo el mundo, pero ese "don" como lo llamaba su psicólogo estaba acabando con su sueño, tenía que volver a dormir tranquilamente y por eso tenía que desparecer ese molesto monstruo - dime que sabes de qué puede tratarse y cómo puedo encontrarlo.

GAbriel sonrie y te mira un pococ extrañado - No recordaba que fueras tan vergonzosa jajaja - Mira lo que le enseñas y se queda pensativo... - Mmmm... no se... pero... hace dias que en un publo de aqui al lado estan desapareciendo niños de su habitacion sin dejar ratro, todas las ventanas y puertas cerradas y aun asi desaparecen como si se esfumasen...- comienza a comer un pococ de lo que os pone Gema que te ha mirado de forma compice - Si quieres me puedes ayudar e investigamos esos mientras...¿Te parece?

Aunque un poco ruborizada afirma ante la proposición de acompañarlo - está bien, si no hay problema en ello, me gustaría acompañarte y ayudar en lo que pueda - dice mirando al chico sin poder evitarlo aunque tenía una lucha interior por ocultarlo pero sin mucho éxito, Sophía, ¿y qué pasa con Devon?¿Ya le has olvidado? Se reprocha, por lo que en lugar de mirar a Gabriel mira a su madre - muchas gracias Gemma por la comida, prometo pagarla cuando consiga algo más de dinero, pero es que... tengo también que encontrar un sitio donde quedarme a dormir... y los hoteles no son gratis de momento - sonríe aunque sin muchas ganas y con los ojos un poco húmedos, recordar la partida de casa de sus padres sin apenas ahorros ni rumbo fijo era duro.

¿Cuándo salimos? - pregunta algo más impetuosa intentando evitar el tema monetario.

- Como que Hotel! Tu te quedas en casa y ya mañana os vais a investigas ¿Entendido? - Grabiel asiente con uns simbolo militar como si Gemma fuera un alto oronel y se rie despues terminandose una cerveza. - Asi que cuadno quieras irte le dices a Gabriel que te lleve y punto. - Deja dicho antes de irse atender una mesa.

Sophía se sonroja un poco por la amabilidad que muestra siempre Gemma con ella, la trata tan bien que nunca sabe como demostrar su agradecimiento - muchas gracias, de verdad, por todo - casi se pone a llorar cuando piensa que Gemma es el tipo de madre que querría haber tenido, le duele no querer a sus padres, pero es lo que se merecen, ella no se merecía parecer una loca, por que no lo estaba pero eso es muy difícil de entender cuando no te pasa lo mismo.

Pues cuando quieras nos vamos - dice muy contenta cuando termina el último bocado y sorbo de refresco - en realidad, tengo ganas de acabar con alguno de esos monstruos... - continúa colocando en su rostro una hermosa sonrisa aunque tímida.

Gabriel asiente y te ofrece  su brazo mientras saliis fuera, te sube a un Ford mustang negro y vais hacia su casa. al llegar ves que esta igual que en tus recuerdos, con mas flores quizas.

El abre la puerta haciendo ademan de que pases y cuando estas dentro pasa cerrando, sin poder evitarlo te vas fijando en los pequeños detalles como que en los bajos de las puertas hay como salo pegada y en las ventanas igual. Hierbas colgadas en la parte de arriba de los ventanales y la chimeneea...

Era una casa muy peculiar y encantadora, si ella hubiese hecho eso su madre la hubiese mandando a un psiquiatra directamente, sin preguntas o información referente al tema, odiaba escuchar la frase, ¿no puedes ser normal? ¿Qué es la normalidad? Se preguntaba ella, no había conocido a nadie "normal" en su corta existencia. Estar absortos por la caja tonta no veía ella que fuese normal o llamar al reverendo Hills para que le hiciese un exorcismo, no es de gente normal hacerle pasar eso a tu hija, o eso creía ella.

Sus pensamientos la hacían divagar mientras deambulaba por la casa recordando cada rincón, cada floritura... No era consciente del tiempo o de donde se encontraba Gabriel en aquel momento. De repente, volvió en sí al ver un pequeño agujerito en la pared, recordaba como entre Gaby y ella habían intentado cazar al ratón sin mucho éxito y no pudo evitar reír al recordarlo, esas chiquillerías que quedaban un poco atrás, ahora ambos son más maduros.

Muchas historias tenía aquel hogar y quería ver tanto en tan poco tiempo... pero ya tendría tiempo ahora tenía que preocuparse por ayudar a Gabriel en lo que pudiese - ¿por donde empezamos? - dice degradando el ritmo al verle de nuevo era tan guapo que no podía evitar tales reacciones.