Escucho lo que me contestan Rafa y Maria, pensaba esperar a que Chuk opinara pero lo de Nerea es urgente.
– Creo que lo de la pequeña es mas delicado y alguien debe preguntarle. – Mirando a Maria, – de paso contesto una de tus preguntas. Hace sólo unas horas se me habría contado entre los desafortunados. Sin familia directa, pareja ni he tenido nunca hijos. Ahora irónicamente soy de los afortunados en ese aspecto.
Girando la cabeza hacia todos los demás mientras hablo. – Le tendremos que preguntar por su familia y donde vive. Pero debe ser alguno acostumbrado a tratar con niños. Con su edad no creo que estuviera sola en el metro por lo que alguien muy, muy próximo a ella debía acompañarla. Debería encargarse alguien acostumbrado a tratar con pequeños.
Estoy a punto de preguntarles si alguno tiene hijos pero es una cosa que puede hundir a cualquiera de ellos si los tienen.
Centrándome en Rafa, – Tienes razón, no perdemos nada picando a las puertas mientras bajamos, creo que nos han debido oír subir y bajar pero… Lo de forzarlas, yo nunca he sido capaz de abrir un candado sino es con un soplete que lo derrites. Cuando de adolescente estudiaba electricidad todos íbamos con nuestra caja de herramientas con su candado. Habían un par que eran capaces de abrirlos apenas introduciendo un diente de sus llaves, – señalándome, – yo no. Por otro lado me parece que todas las puertas son de buena calidad. Ha golpes con la palanca nos podemos pasar horas y siempre que no tengan alguna plancha de acero. Abajo sólo es una que forzar y después abrirlas con las llaves.
Ahora miro a Maria.– La puerta del garaje debe poder abrirse manualmente en caso de emergencia. No es una caja de seguridad que si se va la luz debe quedar bloqueada. Cuando hay una emergencia lo primero que salta es la corriente eléctrica o sino los bomberos la cortan. Seguramente nos hará sudar y los que la abran manualmente quedaran en peligro ya que harán ruido. Sería mas seguro dentro de un vehículo y con el mando a distancia. Si logramos equiparnos y decidimos salir yo me ofrezco para ser uno de los que abran la puerta, evidentemente desconociendo Madrid no puedo ser uno de los conductores.
– Si, disculpa, Maria, estaba centrado en la garita, pero teniendo armas debe tener una de las puertas mas seguras aunque fuera solamente por exigencias de la ley. ¿Por cierto lleva pistola el guardia de abajo?
Pensando mejor sobre la pequeña. – Lo mas seguro para la niña sería que se quedará aquí mientras nosotros buscamos cosas pero debemos tener en cuenta también lo que ella quiere. A lo mejor no quiere de ninguna manera quedarse sola después de lo que ha pasado. Si la dejamos sola a la fuerza podría buscar otra solución… – no acabo de decirlo pero me quedo mirando significativamente la barandilla de la terraza.