Ah, Akane sí que hacía preguntas que sabía responder. Kousuke asintió con la cabeza como si lo aprobara mientras organizaba sus notas.
-Una pareja curiosa...-musitó, olvidando que una de las integrantes de dicha pareja estaba presente con ellos.
Cuatro en total
Con el intercambio de pistas por parte de Akane Ryuguu concluido, el salón volvió a sumirse en ese peculiar silencio que solo se da cuando todos están demasiado concentrados… o demasiado confundidos como para hablar. April Ligito, aún en pie junto al gran ventanal del salón, observó a los detectives. Uno a uno, habían ido cerrando el círculo. Y ahora solo quedaba uno.
Dirigió su mirada hacia Noa Kokutan, el último en la ronda.
Con un tono suave, pero cargado de una intuición difícil de ignorar, April habló al grupo:
-Bien… solo queda Noa.
Pausó por un segundo, casi como si estuviera sopesando sus propias palabras. Entonces, con un leve temblor de emoción —contenida, porque April no era de soltar dramatismos baratos—, continuó:
-No sé por qué, pero tengo el presentimiento de que este será el último intercambio. Que después de esto...
Su mirada recorrió a los presentes con intensidad.
-...el crimen podrá resolverse. O al menos, estará todo sobre la mesa para que alguien, al fin, lo haga.
Suspiró, pero esta vez no de agotamiento, sino de expectativa. Se permitió un instante de esperanza. Quizás, después de tanta confusión, puñetazos a la cuarta pared, pistas robadas y detectives disfrazados de mapache… la verdad, por fin, estaba al alcance de la mano.
-Noa, adelante. Es tu turno.
Kousuke (ha decidido romperle una botella de champagne en la cabeza al generador de tiradas, como hizo con el pobre Jilliam Wustice)
Hanzawa-san
Mamoru Ai Yastis
Kyoka
Akane Ryuguu
Noa "Kokutan"
Sorcha McKay