Mi infancia no fue facil. Mi madre me tuvo con 16 años, dejo el instituto y se traslado a vivir con mi abula para uir de las miradas acusadoras y los reproches paternos.
Practicamente fue mi abuela quien cuido de mi hasta los 8 o 9 años, cuando fallecio debido a un achaque de la edad. Despues de eso tuve que aprender a cuidarme sola. Mi madre no aceptaba su situacion ni sus responsabilidades, se comportaba como una adolescente y cada semana me presentaba a un novio nuevo.
De entre los novios de mama los habia buenos, que trataban de comprar mi afecto con juguetes o golosinas, que me ignoraban y tambien tuvo de los malos, a los que se les escapaba la mano en mas de un sentido. Pero, de entre todos ellos, hubo uno al que llege a considerar como mi padre. Se llamaba John y mi madre no le aguanto mas de tres semanas, era demasiado noble para ella, decia que la hacia sentirse inferior.
Despues de cortar con el yo segui viendole, tenia un taller mecanico y me enseño a repara coches y motocicletas, me converti en su ayudante y confidente. John era un buen hombre pero todos pensaban lo contrario. Abandono a su familia dejando a su mujer con un niño muy pequeño entre los brazos. Pese a todo, lo hizo por su bien.
John era un cazador de vampiros... y yo su ayudante.