Partida Rol por web

— Y digo yo ¿No sería mejor enfrentarnos a lo que sea que nos persigue en lugar de salir huyend...

Pero parece que el grupo ha tomado ya una decisión y no hay quien lo pare. En fin...

Sigo forzandome a caminar, dandole al pinrel aunque si por mi fuese, habria levantado campamento hace ya horas.

— Y si, lo cierto es que hicieron una tercera peli de la Bruja de Blair, y tuvo tan poco éxito que... ¿Esto... Kokoro? ¡Pues mira, Sinceramente tambien creo que lo mejor es quedarnos aqui! ¡Machacar a lo que sea que nos persigue antes de que nos machaque a nosotros!

La luz del martillo se cuela por entre los árboles y alcanzan a vislumbrar sombras que se mueven, animales no muy grandes, pero no del todo pequeños, que los rodean amenazantes sin dejarse ver, hasta que unos arbustos cercanos se sacuden.

De allí sale un furioso jabalí de metro y medio cargando violentamente contra Sojiro, atraído por la potente iluminación. Acto seguido empiezan a aparecer más, primero uno a la izquierda de Kei, otro a su derecha, y uno más se acerca peligrosamente a Kokoro, que ni se entera porque se ha marchado al mundo de los sueños y ronronea apaciblemente hecha una bolita en el suelo.

Viendo finalmente el peligro a nuestro alrededor desenfundo la espada y el escudo, poniendome en guardia. Pero al ver que Koko se ha dormido, la sacudo un poco 

— ¡Despierta! ¡Que nos comen!

Tenemos que seguir avanzando, cueste lo que cueste, eso no dejo de repetírmelo a pesar del agotamiento. Sin embargo eso cambiar por completo cuando veo a Kokoro venirse abajo por el cansancio.

—¡KOKO!

Doy media vuelta para ir a protegerla cuando veo aparecer a las criaturas que nos persiguen. Jabalíes. Parecen grandes y fuertes, dan miedo. Normalmente haría uso de mis buenas piernas para escapar a toda prisa, pero jamás dejaría atrás a mis amigos. No, jamás los abandonaría. Pero... ¿en serio han estado toda la noche persiguiéndonos?

—¡BASTARDOS! ¿TAN ABURRIDOS ESTÁIS QUE NOS PERSEGUÍS TODA LA NOCHE? ¡LO VAIS A LAMENTAR!— espeto con tono amenazante.

Una vez solté la advertencia me coloco entre mis amigos y los enemigos, saco mi símbolo divino y la sostengo entre mis manos mientras recito un conjuro.

—¡FEAR!

Encanto mi símbolo mágico el cual se envuelve de un aura carmesí y apunto con ella al jabalí que planea atacar a Kokoro, esbozando una sonrisa temeraria más fruto del miedo que de otra cosa.

No hay caso, Kokoro ha tenido un día largo y agobiante y no se despierta, el sueño la ha vencido completamente.
De pronto la luz del martillo es reemplazada momentáneamente por un brillo carmesí y los jabalíes retroceden unos pasos. Sojiro apunta entonces al que se acercaba a Kokoro para cabecearla y enseguida patina desesperado, con los ojos como platos, tratando de frenar y cambiar de dirección. Cuando consigue detenerse, al instante da media vuelta y se aleja huyendo despavorido.

Los otros dos que acechaban peligrosamente a la muchacha ahora son atraídos por el movimiento y traqueteo de metales de Kei, quien se planta delante de ella para protegerla a toda costa.
Los demás jabalíes continúan el acecho, pero no se atreven a acercarse mucho aún.

Se oye un bostecito y Kokoro levanta la cabeza del suelo, tras encandilarse brevemente con la luz refulgente de Sojiro, se encuentra con esta fea situación.

Uoooh, mi Martillo de la Perdición ha asustado a los jabalíes (y el que amenazaba a Kokoro ha escapado). Se me dibuja una sonrisa de oreja a oreja ante tal resultado.

—¡Vamos, a por ellos, que son pocos y cobardes!

Me siento que me vengo encima y me lanzo a atacar al jabalí que me está encarando, balanceando mi Mojon-lir aputnando a su cabeza. ¡BLAM! Mi Mojon-lir le revienta la cabeza al jabalí, el cual se desploma en el suelo. Algo de su sangre se salpica en mi cara.

—¡Chicos, ya tenemos cena!— exclamo emocionado.

A lo largo de mi vida me he metido en peleitas. Alguna vez me he peleado con algun matón incluso, y lo he mandado a su casa. Pero esta es la primera vez que tengo un arma. Una de verdad.  Y no solo eso: es la primera vez que tengo que pelear a matar

Pero tengo a mi lado a Soji, y tenemos que cubrir a Koko, que está desprevenida ahora mismo. Así que no tengo más remedio que aparcar mi conciencia, mis pensamientos, y lo que pueda pensar ahora. Es el momento de empuñar a mi espada Yoshitsune, y tratar de eliminar a uno de estos bichos antes de que hagan más daño

— Kurogane... の... Yoshitsune!!!

Parece que yo tambien acierto, así que digo

— Y yo pongo el postre!!! — exclamo tratando de atraer toda la atención sobre mí, en vez de sobre la menudita hechicera, que no se ha comprado ni una armadura

Había tenido un sueño extraño. Estaba en un concierto, mi concierto por supuesto. Mucha gente estaba ahí, con lucesitas de colores en las manos aclamando mi nombre de artista isekai neko-tan, por supuesto frente a una pantalla gigante, pues mi vocación es ser una Vtuber, fabulosa, amada y adinerada gracias a los superchats... ¡Y además estaba recibiendo un Oscar! ¡Y un gramy! ¡Y el premio nobel de la paz!

- Isekai neko-tan -  Digo babeando. 

Pero el sueños llegaba a su fin, escuchaba ruidos de cerdos y a mis amigos bastante ruidosos, poco a poco todo se iba resquebrajando, como si aquella hermosa ilusión me devolvía a la hermosa realidad, arrugo el entrecejo y me doblo como si hubiese sido poseída por un espíritu maligno, antes de soltar un grito.

- ¡No tienen ni un decoro por una dama durmiendo!

La espada de Kei abre en dos al jabalí, mitades que se desploman una a cada lado mientras que Sojiro aplasta el cráneo de otro con su martillo, dejándolo completamente inerte en el suelo.
Kokoro espabila y se encuentra frente a frente con el último jabalí, que entre susto y enojo extiende sus brazos y grita "Magic Shot", al hacerlo se dibuja en su mano un círculo mágico y de su centro se dispara una fina línea que atraviesa el cuerpo del animal y sigue de largo hasta dar contra un árbol cercano, impactando allí y dejando un profundo agujero, pero que no llega al otro lado.

Los tres jabalíes han caído, cuando se acercan a ellos los cadáveres desaparecen con un "¡pluf!", dejando en el mismo lugar donde se encontraban una pata de jamón crudo. Uno de ellos, además, deja un atado de cuero y un colmillo.

Pasado este momento tenso se siente calma y tranquilidad, un sonido roto únicamente por el ruido de los grillos y alguna que otra lechuza.

Contemplo lo que ha caido

"Un Jamón... y es mio ¡TODO MIO! ¡TODO EL!"
"Mi... tessssssoro...."

—¡Bien, hemos ganado!— exclamo alegre.

No es para menos, ha sido nuestra primera pelea en este mundo y no ha salido herido nadie. Desconvoco mi conjuro de miedo y me acerco a los cadáveres cuando éstos desaparecen dejando solo 3 patas de jamón crudas y 2 objetos más. Aquello hizo que torciese la boca contrariado.

—¡Venga ya! ¡3 jabalíes y solo nos dejan una pata de jamón por cabeza!— alzo la mirada al cielo y agito el puño —¡Sois unos tacaños, dioses! ¿Eh? Anda, dos lunas...

Tras desahogarme por el drop tan tacaño que nos ha tocado me giro hacia mis compañeros.

—¿Acampamos por aquí cerca y descansamos? Tengo que entrar en comunión con mi diosa para recuperar los conjuros y toda esa pesca. Y Kei, deja ese jamón, que es para compartirlo entre los tres.

Mientras me abrazo a mi premio digo

— Tres jamonessss. Han sssoltado tres jamonesssss (Y algunas cosas extra) pero esssste es mio, todo él. Mi tessssssorooooo

— Bueno vale, ya está bien de hacer chistes locos acerca de una novela que era buena... pero las hay mucho mejores — digo recordando al grandísimo Isaac Asimov, el hombre que no nos hizo ver la luz, sino que nos hizo querer buscarla, de Carl Sagan el que nos hizo ver más allá de lo evidente, y tambien de Arthur C. Clarke y de Stephen Baxter, genios en si mismos — Tenemos trabajo que hacer. Una fogata podrá espantar a muchos más bichos. Recuerdo haber leido que los lobos no se acercan a las inmediaciones de una hoguera

Aunque si alguien me pregunta donde lo leí, tendré que confesar

— Lo leí en un comic del Pato Donald¹.

- ¡Oye eso lo tienes que compartir! - Gruño despertando por fin algo mas cuando huelo el olor del jamón, ese aroma delicioso... me lo imagino en una paila con huevos y mis ojos brillan con intensidad.

Entonces caigo en cuenta que me había quedado dormida y que a mi alrededor había sido un campo de batalla, me rasco la cabeza. 

- ¿Pero que diablos ocurrió aquí? - Pregunto volviendo un poco a la realidad - ¿Por que nos tenemos que mover? Déjenme seguir durmiendo, me duelen las piernas... desalmados. 

—Debemos administrarlos para no pasar hambre más adelante por si las moscas. Porque creo que nos hemos perdido y no sabemos cuándo encontraremos el camino— explico antes de girarme hacia Kokoro —Ha pasado que hemos derrotado a los jabalíes que nos perseguían. Y no planearás dormir así tal cual, en el suelo pasando frío. Al menos espera a que montemos una hoguera en un lugar más o menos resguardado si no queremos volver a ser perseguidos por otra cosa.

Me parece que la pobre no entiende aún nuestra situación. No estamos en nuestras casas precisamente.

— Y tanto como perdernos, no estamos TAN perdidos. Piensa que sólo tenemos que seguir caminando hacia el este. Y si no podemos ver el sol, siempre nos podemos guiar por el musgo, que crece al norte, o por los anillos del tronco cortado de un árbol

>¿Que? Tambien venia en los comics de Donald

Tal y como ocurrió en la tienda de Aisa, cuando deciden quedarse con los objetos que dejaron atrás los jabalíes, éstos desaparecen y saltan en la sección del inventario en la ventana de estado.

En esa misma ventana de estado, Sojiro pincha en su equipo de aventurero y de allí sale un submenú con diferentes opciones, de la cual elige "tienda de campaña" y el numerito 5 junto al ítem pasa a ser un 4, indicando los usos que le quedan. Se toman el tiempo necesario para montarla y para encender una fogata.
Inspeccionando las patas de jabalí descubren que la calidad no es ni buena ni mala, pero que bien cocinadas podrían sacarlos de un apuro, no será sano comerlas crudas así como están. El colmillo no parece algo demasiado valioso, pero la piel sí, está en perfectas condiciones, lista para ser curtida.

Las raciones consisten en carne seca y queso, también unas galletas integrales demasiado duras y secas como para estar apetitosas, nada de manjares exquisitos, pero se irán a dormir con la panza llena.

Sólo haría falta decidir los turnos de guardia antes de irse al sobre...

—Enhorabuena, pero no creas que todo será así de fácil, apenas han comenzado.

Ves a Orphea sentada en la rama de un árbol con las piernas cruzadas, ni idea tienes de cuánto llevaba allí, no la viste aparecer ni acercarse, tan sólo allí estaba.
—¿Y bien? ¿quieres que te conceda conjuros de nuevo? Ya sabes lo que tienes que hacer. —Con un gesto con la cabeza señala tu ventana de estado que abriste para usar el equipo de acampada.

Los demás le hacen caso omiso, es muy probable que sólo tú seas capaz de verla y oírla.

Me quedo mirando la situación, tratando de discernir la realidad

- Bueno, supongo que estaría bien que me pusiese en guardia - digo ofreciendome - El asunto será hacer un refugio para pasar la noch... ¡WHOA!!!

Y si, lo de que del Inventario Mágico de Soji aparezca una tienda de campaña me ha pillado de improviso

-Esto... ¿No tendrás dentro un Hollywood Foster's Burguer? Ya sabes, la compañía de restaurantes que creó el mismo Schwarzenegger-
Y acto seguido me pongo a mirar en vuestras espaldas, en plan "Holaaaa, Señor Governador Schwarzeneggeeeeeer"
- Fijo que el gran Arnold podría convertir estos jamones en raciones tan sólo poniendolos al fuego. Mirad, mirad...

Pero si, me ofreceré para hacer la última guardia. La del que ve amanecer.