Jade Lynfor "La Diplomática"
Fue educada desde su infancia para la infiltración al más alto nivel. Le enseñaron a engatusar las mentes de hombres y mujeres para obtener beneficio y no verse implicada emocionalmente. Gracias a esa formación fue destinada hace tres años a Aldera como representante del planeta Allyuen.
No tardó en encontrar a Robert, un joven muy interesado en la rebelión y sus ideas. Hizo que se enamorara de ella y se casaron; lo que dio a Jade cierto renombre dentro de Aldera y el círculo más afín a las ideas Rebeldes. A los pocos meses de casarse se quedó embarazada; y dio a luz a un varón llamado William. Ha estado desde el principio filtrando información al Imperio sobre posibles nuevos grupos de Rebeldes así como de lo que Robert le cuenta; ya que cada día está más metido.
Jade estaba preparada para poder lidiar con una pareja sentimental, pero cuando el joven William nació se dio cuenta que de ninguna de las maneras la formación recibida serviría para eso. Desde que naciera hace ya un par de años se está cuestionando muchas cosas de su actual trabajo en Alderaan, su relación con el Imperio y su futuro...
Zak Atanna "El mercenario"
Destinado en Aldera hace unos dos años se dedica a ofrecer paquetes de seguridad personal. Sus servicios son requeridos casi a partes iguales entre diplomáticos que pasan cortos períodos de tiempo en la capital de Alderaan y entre la familia que gestiona las apuestas en toda la ciudad para "ayudar" a cobrar deudas impagadas de los usuarios del servicio. En cuanto a su relación con el Imperio se encuentra como agente durmiente de apoyo por si alguno de los demás activos imperiales infiltrados necesitara ayuda; aunque desconoce la identidad de ninguno por seguridad.
A Zak lo que le gusta es la acción, y por desgracia los trabajos que lleva a cabo en Aldera carecen en su gran mayoría de ese estimulante. Las escoltas se hacen pesadas y aburridas; muchas veces no son humanos para su desgracia y raras veces hablan de nada que pueda comprometer a la rebelión. Por otro lado, la parte de cobrar deudas suele terminar con el pago antes siquiera de llegar a dar el primer puñetazo de aviso. Los estudiantes suelen ser cobardes y normalmente tienen posesiones con las que saldar las deudas... Son los menos los que deciden escapar del planeta, esos son los que más divierten al guardaespaldas sin dudas, más todavía si son alienígenas.
Andur Jammin "El Piloto"
Piloto consumado del imperio que debido a alguna mala acción del pasado fue devuelto a la academia como castigo. Allí fue reconvertido descubriendo sus posibilidades dentro del espionaje. Lleva solamente seis meses en Aldera, llegando a la par que Lyra Rubzin. Se dedica principalmente al transporte privado dentro de la ciudad así como a viajes entre la ciudad y otras partes del planeta. No tiene nave propia, sino que usa las propias de la empresa para las que trabaja.
En estos seis meses ha ido dejando de lado el racismo imperial; pues ha visto en aquel planeta que el resto de razas de la galaxia no son tan malas como se las habían pintado. Ha descubierto además en un par de Twi´leks no solo el placer de la carne, sino también el cariño que son capaces de ofrecer, así como sus cualidades para escuchar.
Actualmente se encuentra realizando un encargo para un profesor experto, invitado por la universidad. Se encarga de su transporte dentro de la propia ciudad de Aldera; para lo que su empresa le ha facilitado un deslizador terrestre LUX-3.
Andur todavía se encuentra en fase de "asentamiento", para ganarse la confianza de la gente, hacerse un nombre y así poder empezar a conseguir y filtrar información.
Lyra Rubzin "La Mecánica"
Enviada junto a Andur Jammin hace seis meses. Una experta mecánica que fue destinada para sabotear transportes y ocultar balizas de seguimientos en naves importantes para la rebelión. Cuando llegó lo hizo con suficientes créditos que el imperio le facilitó para establecer un negocio de reparación de naves y deslizadores. Además de las naves procura colocar micrófonos en los vehículos privados de los diplomáticos que acuden a ella para las reparaciones.
No ha logrado hacer fortuna, ya que para poder obtener más trabajos de interés y poder entrar en los contratos que le interesaban tiró los precios. Al fin y al cabo el imperio proveerá cuando sea necesario... ¿no?
Lyra ha conocido a otra persona hace poco y ha movido todo su "equipo imperial" a un pequeño almacén que tiene en el anillo Intermediomedio. Es en ese mismo anillo donde tiene su negocio y su vivienda actual.