Partida Rol por web

                                                                       _Conclusión

                                                 FINAL DE LA AVENTURA

En el hotel se descubrió el cadáver de Dionisio y el secuestro de Tanya tal vez a manos de  los Rusos (pero nunca se pudo demostrar.)

Se llamo a la policía, la prensa no tardo en aparecer,  por la tarde - noche tras confirmar vuestra plaza en la misión un Helicóptero os recogió y llevo a la base de Pruebas de ULISES;  desde allí  un avión (uno de  los más moderno que existen en esta fechas)  Os deja en La Guyana Francesa, el escándalo ocurrido en EL Hierro precipito un poco las cosas...

EN LA ESTACIÓN: 

Una vez en la estación Nicolás Monardes  se pudo comprobar la existencia de  una nueva forma de vida creada por  accidente.

Muchas vidas, tiempo y recursos humanos quedaron atrás con la destrucción de la estación.

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La rueda de prensa os espera, las naciones, y el mundo entero en general  esta expectante.

" ¿Cómo se pudo salir con vida de una situación Así?" , ¿Que paso allá arriba?"

(Aquí os dejo poner como termina esta  historia y de cómo el personaje llego sano y salvo o por contra murió, y los últimos sucesos ocurridos en la última escena , a vuestra libre imaginación )

# ... 

Helene Allende despertó en la cápsula. Al parecer, la capitana Amara Ren había visto su cuerpo alejándose y la rescató a tiempo, aunque ella estaba inconsciente y no recordaba nada a partir de la explosión.

Al llegar a la Tierra necesitó un tiempo para recuperarse físicamente de las numerosas lesiones que había sufrido en aquella misión, así como digerir todo lo ocurrido, aunque más pronto que tarde comenzó de nuevo el tour por las televisiones, donde concedió entrevistas relatando algunos episodios de la misión... al menos los que no constituyeran secreto profesional.

La promoción de la novela derivó en el éxito esperado, para regocijo de su editor, que asumió un tren de vida mucho más esplendoroso. Sin embargo, recibió también numerosas críticas.

Por un lado, se le acusaba de cierta tendencia a la propaganda política. Aquellas críticas eran justas, Leni pagó en su crónica todos los favores políticos que debía. Por muy sutil que hubiera pretendido ser, la política era mala compañera de viaje; pues siempre atraería detractores que la denostarían únicamente por haberse colocado en el lado contrario de la calzada.

Relacionadas con estas críticas, se unían las de aquellos que esperaban una crónica más realista y ajustada a los hechos concretos que acaecieron. Coincidían en que estaba sobrecargada de acción e intrigas y le achacaban una motivación comercial. Si bien era cierto que se tomó diversas licencias en su obra, nunca aclaró del todo cuáles eran los hechos reales y cuáles los dramáticos. Poco sospechaban que la sensación de irrealidad al leer la novela venía precisamente de sus pasajes más fieles a la verdad.

Kowalsky entró en la cápsula detrás de Tryss, cuando su casco estaba a punto de quebrarse definitivamente. Cuando vio a su compañera manipular los mandos para ponerla en marcha se limitó a asegurarse en el asiento para salir de allí lo antes posible.

El recuerdo de lo que había visto en la sala de mandos le acompañaría por siempre y podría ser el fin de su carrera. Por ahora, desde luego necesitaba un buen descanso, su mente se había roto.

Al poco tiempo cayó inconsciente en su asiento, cuando despertó pudo comprobar que no todos habían conseguido llegar a la nave, preguntó por la estación, había sido destruida por completo y la posibilidad de que el bicho llegase al atierra eran muy escasas. Los datos le importaban muy poco, ahora solo pensaba en descansar.

Cuando llegó a la tierra las presiones por contar lo ocurrido llegaron de muchos frentes, pero Sammuel se escudó en su locura transitoria para dejar de ser interesante para las autoridades, llegó a conseguir que le vetaran en cualquier acto publico relacionado con la misión. Para las autoridades Sammuel había perdido el juicio en el espacio, permitirle un retiro temporal a cualquier lugar apartado era la mejor opción para todos, por supuesto, el ya tenía elegido su destino.

La descompresión y el esfuerzo de sujetarse a la nave fue demasiado para un hombre de ciencia como Andrew Harlan. El espacio se cobró su vida y puso punto final a su locura de una vez por todas. Mientras daba vueltas por el espacio y veía cómo el indicador de oxígeno bajaba lentamente, se percató de sus errores, de sus fallos, de sus fanáticas estupideces. Por suerte, ni toda su locura junta había conseguido que sus locas ideas salieran adelante.

Se perdía para siempre en el espacio infinito con el verdadero pendrive lleno de información acerca de cómo se había creado esa monstruosidad que había infestado la estación espacial. Sonrió pensando en cómo había forcejeado Leni por llevarse una memoria vacía. ¡Qué idea había sido darle el cambiazo! Especialmente ahora que todo ese desastre mortal estaba a punto de morir que él y desaparecer.

La vida de un científico debe ser tranquila, llena de observación y paciencia, algo para lo que el alterable y enloquecido Harlan nunca hubiese valido. Quizá conozca en la muerte la paz que tantas veces le faltó en vida.

Ren entró por el túnel de acceso, una vez asegurada la escotilla, se apoyó contra ella, respirando agitadamente, arriesgándose a un shock por hiperventilación. Ignoró las llamadas de Kowalsky y Tryss, que desde la cabina estaban preparando la cápsula para abandonar aquella estación de horror. Un escueto "Estoy dentro" había sido su única respuesta.

Pasaron unos angustiosos segundos en los que los rostros de sus compañeros de tripulación desfilaron ante sus ojos, recordó lo vivido en una sucesión de imágenes. ¿Había alguna posibilidad? Tendrían que maniobrar, volver a acercarse a la estación, el tirón de la tierra ya era demasiado fuerte, gastarían demasiado combustible... accionó el comunicador:

-Tryss, Kowalsky, veo a Allende.

Mientras escuchaba la respuesta de Tryss, vio a través del grueso cristal a Harlan. Se debatía junto a la criatura, en un momento dado, perdió el asidero, el espacio lo reclamó. Amara cerró los ojos y se encaminó al puente de mando.

***

Antes de llegar a la Tierra habían decidido una historia que contar. Sería muy difícil explicar todo lo que habían visto o habían creído ver en la estación. Resguardados en el interior de la cápsula parecía todo tan irreal.

Allende, como novelista que era, pergeñó una muy buena historia. Tenía flecos y algunas lagunas, pequeños huecos y contradicciones que usaron inmisericordemente en los interrogatorios a los que fueron sometidos ya de vuelta en ULISES.

En ULISES sabían que ellos sabían más de lo que habían dicho pero no lograron ponerles en evidencia sin revelar lo que ellos sabían a su vez.Les dijeron que los datos de la caja negra y del disco duro que habían cogido a Yun Li, o a lo que la encarnara, estaban totalmente corruptos, inservibles.

Evidentemente, ninguno de los supervivientes se lo creyó.

Después de la cuarentena, les recetaron un par de meses de vacaciones... en complejos separados y bajo vigilancia discreta, mientras toda la historia se iba reescribiendo.

Luego dieron algunas ruedas de prensa. Kowalsky seguía de baja, quiso apartarse de todo. Amara, disciplinada, acudió siempre, pero era imposible sacarla nada que mereciera la pena. Fueron Tryss y, por supuesto, Allende quienes se convirtieron en el centro de los focos.

Duró poco.

Luego les dejaron volver a sus vidas.

Leni Allende escribió una novela, muy polémica, que apasionó u horrorizó a quienes la leyeron. Evidentemente, Amara no la leyó.

Se llamaron algunas veces, conversaciones breves, sólo para saber que estaban bien pero lo fueron dejando. Kowalsky no quería saber nada. Allende era una estrella.

Perdieron el contacto.

Pero, inevitablemente, por San Patricio recibían una postal de Tryss

Tryss arrancó la capsula antes de que se viera atrapada por aquella cosa que no sabía explicar bien que era, Kowalsky entró dos latidos de su corazón antes de que le pudiera la presión aunque jamás lo admitiría.

Con amara a bordo todo fue más fácil y por eso fue la primera en ser recogida, además kowalsky se había desmayado, fruto de estrés, de la presión o de alguna herida que con el traje no podía ver. 

La comunicación con Amara y con Allende hizo que pudieran recogerlas a tiempo, pero cuando tocaba el turno a Harlan estaba demasiado lejos, la radio se corto y con el sistema de comunicaciones infectado por aquel troyano, no pudieron usar los sensores de su nave. Sin visual ni comunicación de radio todos los esfuerzos fueron futiles. Nunca un silencio le había hecho tantísimo daño. Un daño que llevaría consigo irremediablemente muchísimo tiempo.

Tryss no recordaría todas las partes de la discusión que tuvieron para pactar sus versiones. Estaba afectada. Hizo un esfuerzo por retener la versión final, pero apenas participó de aquella conversación.

Abandonaron la capsula a su suerte, para bajar con los datos fueron hasta la estación espacial, no se anclaron, pues no querían correr el riesgo de llevar aquello consigo. La capsula reventó en la atmósfera. 

Al tocar tierra todos sabían que probablemente sería su última misión, ninguno había acabado bien psicologimanete. Tryss jamás estaría segura de haber hecho bien al empujar a la china al espacio y eso le genero diversos conflictos morales que hicieron que tomara un puesto en tierra y no hablara nunca más de aquella experiencia.

No leyó el libro de Allende por no revivir aquello. Kowalsky por el contrario solo azuzaba su culpa, culpa por lo de la tripulante Yun Liu(pues sospechaba que le había visto hacerlo) y culpa por haber estado a punto de abandonarlo. Pero de vez en cuando recordaba a la capitana Amara, pues de no ser por la extraña calma que le había transmitido aquella mujer pese a sus peculiaridades creía que no lo hubiera conseguido. Dado su estado nervioso cuando la encontró en el espacio.

Y así se encienden las luces de la sala, el lugar huele a palomitas y a chuches.

Las letras de los guionistas, actores, etc llenan la pantalla. la gente va saliendo.

Durante mucho tiempo se acordarán de los momentos más dramáticos y emocionantes.

Algunos comentan que va a ver una segunda parte. 

Algunos dudas de las segundas partes y otros están ansiosos por verla comenzar.

La sala de vacía.

      EL TELÓN CAE.

                                     LAS LUCES SE APAGAN.

Todo comienza, todo termina...