Partida Rol por web

El dinero de Tio Timothy (Inconclusa)

Episodio 1 - La mansión

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01/03/2009, 20:51
Lily Duncan

Silenciosa, me siento también en el sofá, y aunque chasqueo la lengua ante el interés de los demás, no puedo evitar preguntar también.

- ¿Está listo el testamento?

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01/03/2009, 21:26
Jack Duncan

Caminando al lado de los infinitos libros, tocándolos y torciendo la cabeza para leer sus títulos en el lomo, pasa un rato hasta que llega el abogado, se toma su tiempo y es el ultimo en sentarse...

-Por mi podemos empezar

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02/03/2009, 11:23
Lord Jeffrey Duncan

Tranquilo en el apacible sillón, Jeffrey se entretiene alzando su bebida hacia la fuente de luz y moviendo la copa en círculos concéntricos para apreciar el color del Brandy que le dispensó el mayordomo. Protocolariamente se lleva la boca del vaso a la nariz e inhala el exuberante aroma.

Con aire de displacencia agrega:

No es que tenga prisa señor abogado, pero creo que nos hemos reunido aquí para algo. Cuando quiera comenzamos con las últimas voluntades de nuetro querido Tío Timoty.

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02/03/2009, 15:47
Fiona Duncan Holmes

Espero sentada cortésmente, con otro de mis delicados cigarrilos en la boca y mi copa en la mano izquierda, a que el abogado empiece.

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04/03/2009, 14:48
Mr. Charles Turner

Charles Turner toma posesión del último sillón que queda por ocupar, se calza unos anteojos redondos y, con aire profesional, abre su maletín en el silencio de la habitación. De él extrae una carpeta, y de su interior una hoja al pie de la cual podeis ver la firma de vuestro tío.

-Señores, estás son las condiciones del testamento, explicadas de forma informal por si alguno tiene dificultades. Las florituras legales podrán consultármelas luego, si tienen interés.

Todos vosotros manteneis el silencio. Sólo se oye el crepitar de la chimenea y el sonido de la lluvia afuera.

-En primer lugar, el señor Duncan ha querido dejar una renta vitalicia tanto a su mayordomo Jamison como a su doncella Henrietta. Así como permiso para poder habitar esta mansión independientemente del propietario de la misma, durante todo el tiempo que deseen oportuno. En todo caso, esa renta se encuentra en poder de nuestra firma, y no influye para nada en el reparto de la herencia, reparto que se hará de la siguiente manera...

El abogado se detiene un momento, verificando que lee bien el documento. En la chimenea restalla una chispa. Por fin continúa:

-El señor Duncan era poseedor, en el momento de su muerte, de una fortuna que ascendía a un millón y medio de dólares. Según su última voluntad, su deseo es que ese dinero, así como el resto de los bienes de su propiedad -bienes como esta mansión- se repartan entre los sobrinos que tantos buenos momentos le hicieron pasar cuando eran niños, a partes iguales.

Se vuelven a oir algunos murmullos entre vosotros, algunos complacidos y sorprendidos al descubrir que la cuenta del difunto era extraordinariamente más rica que cualquier previsión posible, algunos indignados cuando se habla de un reparto igualitario. Sin embargo, todos tienen claro que se trata de una parte muy jugosa.

-Sin embargo -remacha el abogado- Existe una cláusula que establece una condición necesaria y suficiente y en la que el difunto señor Duncan puso mucho énfasis: ese dinero y esos bienes se repartirán únicamente entre aquellos de sus familiares que pasen el fin de semana dentro de los límites de su finca. Cualquiera que, por cualquier circunstancia -y su tío fue muy estricto en esta norma- abandone el límite de las tres millas de la finca, será excluido del reparto de la herencia. En el pueblo cercano mi firma ha apostado a un vigilante. Quiero ser claro en esto: si abandonan, aunque sea por unos minutos, la mansión y la finca circundante, no podrán optar al reparto.

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04/03/2009, 15:21
Harvey Duncan Allen

Bueno, eso no parece ser complicado... ¿dónde está la trampa, abogado? Le digo al notario mientras me paso la mano por el mentón, pensando en que podré hacer con el dinero una vez me lo paguen.

No me dirá que no es gracioso lo que nos propone nuestro difunto familiar. Me persigno. Que en paz descanse.

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04/03/2009, 17:23
Jack Duncan

Con las piernas cruzadas, el codo sobre el apoya brazos y el dedo pulgar, índice y corazón sosteniendo su cabeza

-Ja, que gran cliché hacer esto por parte del tío... pero sera ciertamente divertido pasar dos días en esta casa

Para luego pasarse los dedos por su bigote, mientras mira de reojo a quien tenga de lado

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04/03/2009, 20:09
Lily Duncan

Con una mano reposando en mi vientre, y la otra bajo mi barbilla, digo en voz suave:

-¿Qué puede tener de complicado pasar unos dias en la misma casa donde tantos veranos hemos pasado de niños? Conocemos esta casa, cada rincón.... No entiendo que esa clausula suponga un problema para ninguno de nosotros.

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04/03/2009, 21:01
Elizabeth Duncan

Sin embargo, Elizabeth sí se muestra inquieta: -¿Tiene que ser este fin de semana? Es inviable que sea cualquier otro? -dice, con una mirada de súplica, al abogado. -Tengo un viaje, no es capricho -dice, esta vez, a sus primos. -

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05/03/2009, 18:10
Fiona Duncan Holmes

Pues a mí me parece una idea genial pasar un fin de semana todos juntos recordando viejos tiempos. Es más, deberíamos montar un pequeño guateque para celebrar nuestro reencuentro. -digo, con gran entusiasmo.

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05/03/2009, 18:16
Lord Jeffrey Duncan

Entonces, señor abogado. ¿Tiene que ser este fin de semana?sin perder la compostura Jeffrey se muestra inquieto por semejantejante situación, pero dada la parte alíucuota resulta más que interesante cumplir la voluntad del viejo tío.

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05/03/2009, 19:23
Sydney Duncan

Sydney se mantuvo callado y distante al ver que a nadie parecio gustarle su idea de una fotografia familiar.

Tras su segunda copa dejada en una mesa cercana, sento con el resto en la bibliotoca y dejo que los demas se pusieran en evidencia, inevitablemente el tambien tuvo que intervenir.
-Ideas absurdas de un viejo furibundo, supongo. Al menos la cena huele bien.-Susurro para quien pudiera escuchar a su alrededor
-Por mi no hay inconveniente pero necesito ponerme en contacto con alguien para avisar de que no podre volver esta noche, ¿Como piensan solucionarme ese problema?-Pregunto mientras sacaba brillo a sus lentes, aparentemente el no estaba en absoluto preocupado.

Notas de juego

¿No pensamientos? Que pena... con el juego que dan... Y pueden poner nerviosos al resto :D

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06/03/2009, 15:13
Elizabeth Duncan
Sólo para el director

Notas de juego

Actualiza, coño! O tendré que darle la razón a Korsa!

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09/03/2009, 23:18
Mr. Charles Turner

-Bueno, señor Sydney, la voluntad del señor Duncan cobra vigencia tras la lectura de su testamento -sentencia el abogado guardando de nuevo sus papeles en el maletín-. Si saliera usted, o cualquier otro de los sobrinos del área correspondiente a la finca -que son aproximadamente unos tres kilómetros de radio centrado en la mansión-, quedarían expulsados de la herencia. Yo me quedaré aquí para comprobarlo, y debo avisarles, damas y caballeros, de que mi firma ha tomado otras medidas pertinentes en colaboración con la policía para mayor seguridad.

-Tiene que ser este fin de semana, señor Jeffrey, en efecto -responde, sintiéndose extrañado ante la cuestión de Harvey Duncan- ¿Trampa? Me temo que no le sigo, señor Harvey.

Charles Turner se alisa los plieges de las perneras del pantalón, aun sentado en su sillón, con las palmas de las manos.

-Es posible que el mayordomo Jamison pueda ayudarle, doctor, si el pobre hombre accede a conducir a pesar del temporal hasta algún edificio con cable telefónico.

El abogado os mira espectante, y finalmente se levanta, dada la ausencia de más preguntas. Concluyendo la lectura del testamento. Todos respirais aliviados, ahora que todo esta claro y el dinero repartido, si bien quizás no con justicia -pensais algunos- al menos bien equitativamente. Por la puerta entra el sustancioso olorcillo de la cena, y en breves minutos, quien más quien menos, terminais siendo escoltados por la criada Enriquetta hasta el salón, donde os espera el mayordomo y una epicúrea cena pantagruélica que casi parece digna de un mismísimo Lord Inglés con miasmas.

El tiempo pasa y la bebida y la velada fluye rápida y burbujeante en el cándido salón, con un mayordomo Jamisson mucho más relajado -ahora que ha quedado claro su futuro-, y rodeados de familiares. Pronto llegará la hora de acostarse, y una cómoda y suave cama con sábanas de seda sería bienvenida por cualquiera, rico o no, teniendo en cuenta el sumamente incómodo y larguísimo viaje en coche que separa toda urbe de esta aislada y solitaria casa construida en mitad de ninguna parte.

Notas de juego

Si alguien quiere hacer algo antes de irse a dormir, puede expresarlo.

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10/03/2009, 01:58
Harvey Duncan Allen

Bueno, queridos familiares, con vuestro permiso me voy a dormir a mi habitación. Les digo a los presentes mientras me limpio la boca con una servilleta de tela muy fina y me levanto de la mesa.

Ha sido un placer compartir esta comida con vosotros, pero estoy muy cansado y prefiero ir a dormir. Además, debo mirar algunos papeles. Tengo algunos terrenos para vender y pocos compradores... el mercado de la tierra es muy agobiante. ¡Ja! Recuerdo que en unos terrenos que he vendido hace unos meses han encontrado petroleo... ¿Os lo podéis creer? ¡Petroleo! Espero que los terrenos colindantes sean tan beneficiosos como los que he vendido.

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10/03/2009, 02:29
Sydney Duncan

Sydney estaba contrariado, no tenia intencion de marcharse, pero tampoco hacer salir al viejo Jamison, y por lo visto no quedaba ningun joven criado a quien encomendarle la tarea.
-Muy bien, supongo que tendre que tomarme unas vacaciones este fin de semana. Esperare que mi secretaria se ocupe de todo, ya sabe donde estoy y las razones de no poder presentarme son obvias. ¿A no ser que usted puede hacerme ese flaco favor, que me dice?-Le hablo a aquel serio abogado mientras traian el primer plato tras retirar los entrantes, la cena era tal y como la recordaba; un manjar para el paladar, aunque por las miradas de los presentes parecia que no todos disfrutaban con ella.

Mientras esperaba convencer a aquel abogado con palabreria incluso ofreciendo su propio auto para ir hasta la "cabina" mas cercana, pidio un buen Coñac, no le importo la marca aunque el bueno de Jamison se la recordara, y mientras agitaba su copa dejaba que el silencio consumira el tiempo, aun pesativo.
-Que duermas bien querido primo.-Despidio a Harvey con un tono un tanto soez mientras encendia un buen puro.

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10/03/2009, 09:18
Lord Jeffrey Duncan

La pitanza dispuesta por Henrietta colma las expectativas que puse cuando vi su amplia sonrisa a la entrada en la mansión.

Mis felicitaciones a la cocinera, manjares dignos del mismísimo palacio de Buckinham. Siempre es un placer degustar sus guisos queridísima Henrietta.

Acabados los postres Jeffrey saca su reluciente pitillera, extrae uno de sus preciados cigarrillos continentales y vuelve a cerrarla con un sonoro:

¡CLICK!

Apurado el cigarrillo lo apaga lentamente en el cenicero de marfil que oportunamente le había facilitado Jamison:

En fin, está claro que no podremos contactar telefónicamente con nadie, así que con el permiso de ustedes me retiraré a la biblioteca para escribir una misiva a mis compañeros de Bridge, me temo que no les gustará en demasía mi ausencia.

Haciendo un gesto reverencial con la cabeza, Jeffrey se levanta de la mesa y se dirige a la biblioteca.

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11/03/2009, 09:58
Director

Notas de juego

Tira Discusión, Sydney.

Jeffrey se va a la biblioteca, solo.

Harvey a dormir. En principio con los otros cuatro.

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11/03/2009, 11:45
Sydney Duncan
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: Discusion
Dificultad: 20-
Resultado: 85 (Fracaso)

Notas de juego

U__U Con 20% tu diras.

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11/03/2009, 12:37
Director

Notas de juego

Jeffrey, llegas a la biblioteca. Donde todo sigue tal cual lo habeis dejado

¿Qué haces?