-Sabemos que andáis metidos en una investigación, y que queremos ayudar. Pero no somos tontos. Los chavales de detrás ríen.- Te ayudaremos con lo que sabemos, Por lo visto este carnicero podría haber salido de "La Sirena" el local de apuestas mejicano. O ser el griego Loco. Un hombre muy raro, que se pasea por el Run con grandes cuchillos. Ahora se reclinan y ponen la mano en forma de cazo.
Lamento la tardanza.
Una vez que los chavales han entrado cierro la puerta y me apoyo en ella. Escucho lo primero que dicen y después añado:
Muy bien muchachos, pero éso es sólo el primer trozo del pastel ¿verdad? No penséis que podeis jugar a juegos de adultos sin saber que os podeis encontrar.
Las dos automáticas del 45 reposan en sus cartucheras, suficientemente visibles como para cegar a un ciego.
Sabemos que sabeis algo más o que esa información tiene más chicha que lo que acabáis de decir. Así que por favor, sed un poco más charlatanes.
Acto seguido dejo entrever un billete de veite dólares.
Hay más de dónde salió éste.
Y se lo paso al primero que ha puesto el cazo.
He cambiado la forma de expresarme a primera persona, además de para probar a ver que tal se me dá, para ver que tal escribo de ésta manera, parece que se vive un poco más el personaje.
-Es verdad que sabemos algo mas; por lo visto un local de tatuajes a recibido visitas informativas. Mas que de trabajos. Pero eso es todo. Si queréis podemos seguir investigando.
En sus rostros se nota sinceridad y falta de maldad.
- Que tipo de gente frecuentaba esa tienda? Dice DB mientras juguetea en sus dedos con un dolar
-Sobretodo, últimamente mexicanos raros. No se les ve mucho el pelo; fuera de su lugar de apuestas.
Mientras sigue jugueteando con el dinero, DB se interesa por lo de mexicanos raros:
- ¿por qué esos mexicanos eran raros??
Eran raros por sus ropas o por sus habitos?
Dice alfred desde el fondo donde habia estado atento a todo lo que decian los "criajos".
-Sobretodo por su ropas; pero todos tienen el mismo tatuaje.
¡¿Es este?! -pregunta Mery Hellen abriéndose paso entre sus compañeros alzando el dibujo que utilizó durante su investigación en la universidad-. ¡Ah! ¿Es este? -jadea alterada.
DB ante l situación no sabe como responder, solo mirando lentamente hacia la dirección de Hellen como diciendo "debemos ver a ese tatuador"
¡Debemos ver a ese tatuador! -Mery Hellen no puede evitar expresar en voz alta las palabras que rondan la muerte de D.B.
Señores -dice tratando de parecer razonable-. Por el momento es la pista más fiable que tenemos…
- Pues no se a que esperamo... En marcha! exclama exaltado el investigador
mira que eres agorera, rondando mi muerte....
Creo que deberiamos probar porque nos estamos estancando aqui sin mover pieza. Comenta Alfred mientras recoge su abrigo y su sombrero.
Bien señores, vayamonos pues.
Digo algo más animado al ver que tenemos un punto por el cual movernos.
¿Quien conduce?
Yo solo puedo llevar a uno… -Mery Hellen mira primero al señor Franchetti e inmediatamente después a D.B., preguntándose cual de los dos tomará la iniciativa para ir con ella. Se encoje de hombros, de manera disimulada, y vuelve a colocarse el verde abrigo sobre los hombros de manera despreocupada.
¡Lista! -dice tomando los documentos de la investigación.
- Contigo hasta el fin del mundo, dice el detective con un cutre retoque seductor, esperando hacer más rgacia que efecto sobre la damisela
Nuestros investigadores volvían a tener esperanzas de un mañana. ¿Llegarían a tiempo? ¿La información era de fiar? ¿Recordarían ser discretos y no sorprenderse de mas muertes "raras"? Todo esto y mucho mas en la siguiente escena. El Tatuador.