Partida Rol por web

Tyriael permanece en el interior del templo, a reserva que ustedes quieran sacarle de ahi

Kilth deja atras el templo y a Tyriael. La noceh, ciertamente ha sido larga, y entre la lucha y la desazon de haber perdido no a una persona, sino prácticamente a dos, al menos por ahora, había calado en su ánimo.

-Descansemos por hoy, tal como sugiere la sacerdotisa. Mañana haremos planes.

El dolor de las perdidas de aquella noche tambien atenazaba el corazon de Nebulus, que exausto dijo:

Si companeros tratemos de dormir algo

-De acuerdo.- Siphenias comienza a guiar a sus compañeros hasta su choza.

Bien, ya en un momento me reuno con ustedes aun tengo algo que hacer.

Si, sera lo mejor, reponer fuerzas y sanar algunas heridas. De cualquier manera no hay mucho para hacer ya. Me pregunto que estara tramando el halfing, pero bueno, seguramente algo exotico y que mi mente humana no pueda comprender.

Mmm...en esto hay demasiadas cosas extrañas. Debemos juntar nuestras cabezas y pensar bastante. Espero podamos ayudar a Tyriael. Mañana mismo, apenas descanse, iré al templo y rezaré a mi dios para que cure a Tyriael.

Hanovan sigue a Siphenias, absorto en sus pensamientos.

El dia esta claro, el sol resplandece y se deja sentir un calor abrazador, la piel esta seca, el sudor sale de sus cuerpos e inmediatamente se evapora. Es necesario veber agua constantemente, para reponer los liquidos perdidos, piensan, asi lo hacen, al acercarse al oasis, un grito ensordecedor sacude la tranquila y desierta calle de Muhar, es una mujer que grita de dolor.

Señor Nebulus, que bueno que le encuentro, debe ocultarse, inmediatamente, no se acerquen, podria ser peligroso - toma del brazo a Nebulus y le da señas de que le acompañen

-Es que no podemos estar un rato en paz?-
Siphenias, malhumorado por el calor y el hartazgo de este pueblo, coge también a Hassan del brazo y le dice con violencia: -Basta con eso. Quién eres, y que es lo que pasa? Nebulus no te seguira solo porque a ti se te ocurre.-

Yo le conozco a usted señor, es el forastero que llego aqui hace algunos meses, y que nunca sale de su choza, mi nombre es Hassan Basras, soy mercader, y me dedico a hacer buenos negocios -se le ve clara preocupacion en su rostro -Hable con el señor Nebulus hace un par de dias, y me invito unos tragos, antes que las creaturas atacaran el carruaje de los gitanos la primera noche...-Hassan se detiene y ve a Nebulus- Los aldeanos andan buscandolos unos para clamar por su ayuda, y romper este maleficio que azota nuestro pueblo, otros para apedrearles, porque ha habido otra muerte, y en el cadaver han encontrado rastros de... no termina de decir la frase cuando...

Los gritos se dejan escuchar en la aldea, algunos aldeanos con palos y machetes se acercan... otros mas, tratan de dialogar con ellos tratando de convencerles, alguna que otra mujer se acerca a ustedes, pidiendoles que alejen los malos espiritus de Muhar para que regrese la calma...

Siphenias echa una rápida mirada al tumulto, y luego se vuelve hacia Hassan: -Si, ya te recuerdo.-

-Creo que lo más prudente sera retirarnos ahora.-

-Luego podrás aclararnos esto, Nebulus, cuando estemos a salvo. O eso espero.-

-Y donde se ha metido ese halfling?- Pregunta en voz alta, apurado por irse de alli.

¿Pero que esta pasando? ¿Porque estos aldeanos desean atacarnos? O, mejor dicho, atacarlos. Y a Nebulus...¿tendrá algo que ver con el gato? Maldicion, espero no ataquen los aldeanso. Los ayudaré a levantar la maldición si puedo, pero no consentiré que me ataquen.

Kilth se dirije a la mujer que se ha acecado.

-Haremos lo que podamos, buena mujer. Ahora, vaya tranquila a su casa, no se puede hacer mas.

-Buena gente! Tranquilizaos!-le dice Hanovan a los pocos que se han acercado demasiado.-No podemos hacer mucho por ahora.-dándose vuelta hacia los otros, agrega en voz baja: -Llevense a Nebulus, no se que esta pasando, pero tiene algo que ver.