Partida Rol por web

Y así fue, como ambos llegaron al camarote de Jhon. La puerta estaba abierta y la habitación revuelta. Todavía se escuchaban voces de hombre en su interior y Kate se escondió detrás de Jhon asustada. Albert salió de la habitación frotándose la cara rudamente con sus manos hasta que los vio.
-Entonces, ¿se ahogó?-Preguntó con sorna, identificando los cabellos de Katherine bajo el sombrero.-¡Detengan a este hombre!-Dos fornidos caballeros salieron del camarote y arrebataron al amor de su vida de las manos a Kate.
-¡NO!-Gritó. Pero Albert la agarró de la muñeca con tanta fiereza que le hizo retorcerse de dolor para después propinarla una buena oleada de guantazos con su mano, al derecho y al revés.
-¿Cómo te atreves, maldita zorra?-Vociferaba muy enojado, sin parar de abofetearla. Katherine acabó con la cara tan hinchada de los golpes que apenas lograba abrir los ojos del todo mientras era conducida a su camarote. Allí, Albert la echó violentamente contra la cama con las voces de Mary a su espalda pidiendo clemencia.-¿Sabes con quien estaba?-Espetó Albert furioso de sus insultos.-¡Con tu amorcito!-Mary se echó hacia atrás y muy disgustada se echó a llorar. Y allí mismo, la violó sin compasión toda la tarde.

Mientras caminaban por la cubierta jonh no podia evitar de tanto en tanto lanzar miradas nerviosas hacia atras esperando ver a albert seguido por un par de gorilas buscando llevarse a katherine,al final se calmo cuando se dio cuenta que sus miedos eran totalmente infundados. Kath estaba junto a el pero ni siquiera su madre hubiera sido capaz de reconocerla con aquellas pintas ademas si los estaban buscando mezclarse entre la multitud era la idea mas sensata al menos hasta que todos se convencieran de que la muchacha se habia precipitado hacia su muerte y entonces la dejarian en paz.

Le habia prometido a kath que le dejaria enviarle una carta a su madre cuando estuviera a salvo pues para cuando eso pasara ni todo el oro de aquel bastardo podria arrastrarla de vuelta hacia el,ahora estaba a salvo y el no iba a permitir que nadie volviera a hacerle daño. Cuando le parecio que ya habian pasado un tiempo prudencial jugando al escondite en la cubierta pusieron rumbo de regreso a su habitacion para llegar en el peor momento posible,parecia como si un huracan hubiera pasado por alli y lo que era aun peor los perpetradores aun seguian alli dentro y se los cruzaron de frente. Sin lugar donde correr jonh intento ocultar a kath detras de el pero albert se dio cuenta de quien era mientras se lo restregaba en la cara con aquella asquerosa sonrisa de el, estuvo a punto de lanzarse a golpearlo pero un par de gorilas lo retuvieron antes de que pudiera hacer nada mientras el tomaba a katherine y empezaba a golpearla de una manera salvaje-maldito cobarde,acaso te da miedo pelear como un hombre-le grito antes de que un puñetazo de uno de aquellos sujetos le sacara todo el aire de los pulmones, el frasco que llevaba en su mano se cayo dispersando crema y fresas por todas partes mientras aquel sujeto le pegaba un par de veces mas en la cara antes de dejarlo alli tirado en el suelo.

Un par de esquirlas se le clavaron en la mejilla y podia sentir un ligero hilo de sangre correrle por la cara pero nada le dolia tanto como aquella impotencia de no haber podido hacer nada mientras se la llevaban.

Ya había pasado la medianoche. Kate se despertó dolorida, buscó en la habitación alguna persona. Pero estaba sola. Se levantó perezosamente y tambaleante. Se sujetó a la cama para no caer y llegó hasta la ventana para ver la oscura e inmensa mar.
-Jhon-Musitó lastimera.

Fue hasta la puerta, no tuvo que hacer fuerza para abrir la puerta. En el salón no había nadie. Sentía nauseas, estaba mareada, le dolía la cabeza y también sus genitales. Albert había hecho lo que quería con ella, se había salido con la suya pero Kate, más que nunca, estaba dispuesta a morir antes de que le volviera a poner las manos encima.

Llegó hasta la puerta, sólo para comprobar que estaba cerrada con llave. Buscó un teléfono y llamó a atención de habitaciones. Pudo contactar con un botones y decirle que la habían dejado encerrada sin querer. No le costó mucho convencerlo y minutos después se encontraba fuera del camarote para ir a buscar a Jhon.

La señora harlaw finalmente se acerco a el una vez los matones se hubieran ido y lo ayudo a levantarse mientras le limpiaba las heridas que se habia echo en la cara, se sentia tan inutil como un niño y simplemente se dejo estar como si fuera una marioneta a la que le hubieran cortado los hilos. Al verlo en aquel estado tan derrotado la anciana le propino finalmente un golpe en la mejilla-si deseas algo debes luchar por obtenerlo-le dijo tratando de sacarlo de aquel pozo de autoculpa para que se pusiera en movimiento y recuperara a su amada.

Una vez se hubo vestido y cambiado de nuevo jonh fue a la parte mas baja del barco a buscar a la mafia, no queria tener nada que ver con aquellos sujetos pero si albert tenia a los marineros del barco en su bolsillo entonces el tambien tendria que consegurise algo de musculo para que lo ayudara,el lider de aquel grupo simplemente se le rio en la cara sin importar cuanto dinero le ofreciera y lo echo a patadas con la risa aun zumbandole en los oidos,mientras caminaba de regreso a su habitacion intentaba planear otras medidas de accion, kath y aquel sujeto no se casarian hasta que bajaran del barco por lo que su unica opcion era esperar al descenso y llevarsela alli mismo ante la vista de todos. Necesitaba planear aquello si queria que funcionara pero quizas jussuf y algunos de los tios de las calderas estuvieran dispuestos a prestarle una mano.

Tan inmerso estaba en sus pensamientos y planes que casi no vio a la muchacha delante de su camarote por lo que estuvo a punto de chocarla antes de ver que se trataba de kath,ahogo un grito y la beso en los labios antes de tomarla de la mano y empezar a moverse a la seccion mas baja,si ella habia escapado necesitaban mantenerse en movimiento o los volverian a apresar.

-¡Oh, Jonathan!-Exclamó cuando pararon un instante para tomar aliento. Se besaron ardientemente, y Kate acabó llorando contra su pecho amargadamente. Cuando consiguió tranquilizarse, se secó las lágrimas con la manga.-¡No quiero seguir viviendo sin ti! ¡Prefiero morir! ¡Por favor, Jonathan! Me tiraré por la borda, no quiero volver a caer en manos de... de...
Volvió a echarse a llorar sin consuelo.

Corrieron de manera frenética sin siquiera mirar a donde estaban llendo, se movían sin otra dirección que el instinto de la presa acorralada que les decía que continuaran corriendo sin volver la vista atrás. Finalmente se detuvieron en un oscuro corredor en las entrañas de la nave con sus maltrechos pulmones incapaces de dar un paso mas, ella se lanzo sobre el y jonh le respondió con la misma pasión entremezclando los besos con jadeos mientras luchaba por besarla y recuperar el aliento al mismo tiempo, pero cuando terminaron de besarse la pasión dio lugar al llanto mientras el no podía hacer otra cosa que no fuera abrazarla mientras intentaba calmarla-no dejaremos que eso vuelva a pasar-dijo el mientras acariciaba su cabello, casi la huahua perdido dos veces ya y la próxima vez podian no ser tan afortunados.

Kate y Jonh se pasaron buena parte de la noche y la madrugada esquivando a matones y policías a bordo. Más de una vez escucharon la voz de Albert entre las sombras, desesperado por encontrar a su prometida esquiva.

Ya era tarde cuando la sirena del barco empezó a sonar. Un temblor hizo que la gente gritase de puro terror y los pocos que estaban dormidos se despertaron.

-¿Qué está pasando?-Preguntó Kate cuando se encontraban en la parte más baja del barco, en la maquinaria mientras los operarios corrían de un lado para otro, dando gritos.

El barco entero parecia un hormiguero que hubiera sido removido con una varilla, por todas partes veian hombres de gestos fruncidos y expresiones severas que parecian estar buscandolos, corrian como dos ratas sin tiempo para pensar o descidir a donde se dirgian simplemente buscando el proximo escondite antes de que otra patrulla pasara cerca de ellos. Durante aquellas horas de delirio y agotamiento jonh creia oir la voz de albert susurrandole desde la sombras burlandoce de el diciendole que le arrebataria a katherine tan facilmente como lo habia echo con anterioridad y que no habia nada que pudiera hacer para evitarlo, kath parecia temblar como si ella tambien fuera capaz de oir esa voz incluso en medio del estruendo que producia su sangre al correr por sus venas intentando desesperadamente mantenerlos en movimiento, hacian demasiado ruido estaban a punto de descubrirlos solo un segundo mas y todo aquello terminaria.

Al final su frenetica carrera los llevo hasta las entrañas del barco, en medio de la sala de calderas el vapor se acumulaba como una enorme manta y el calor que lamia las rojizas paredes hacia parecer que se encontraban en el mismisimo infierno,tal vez habian muerto de agotamiento y ahora estaban en su ultima morada,sudando frio a mares john escucho un terrible estruendo y de repente el barco comenzo a sacudirse como un animal que hubiera sido herido de muerte-nada bueno-dijo el sujetandole la mano mientras intentaban apartarse del camino de los operarios preguntandose que nueva desgracia estaba por caerles encima.

Katherine se apretó contra Jhon asustada.
-¡AGUA! ¡¡AGGUAAA!!-Gritaba un operario mientras corría.
-¡¡NOS HUNDIMOS!!-Gritó otro.

-Debemos salir de aquí.-Le dijo Kate temblando de miedo.-O morimos a manos de Albert o ahogados. Y prefiero luchar.

Pensaba que habian tocado fondo, que ya nada peor podia sucederles en aquel momento pero al parecer el destino tenia otras ideas. El sonido del agua corriendo por los pasillos y el terrible silencio que le siguio les dijo que los motores acababan de apagarse, se hoyo a hombres gritando y muy pronto se hoyeron los pasos apresurados de aquellas mismas personas que corrian tratando de ponerse a salvo ante el inminente desastre que parecia cernirse sobre el barco.

Una vez mas empezaron a correr tomados de la mano mientras sentian como la fria agua del oceano les tocaba ya los pies, se suponia que aquel barco era inhundible como era posible que aquello estubiera pasando. La voz de kath parecio recuperar algo de su aplomo mientras corrian tratando de buscar un terreno mas elevado mientras el agua seguia entrando a borbotones por los agujeros en el casco-no tenemos muchas otras opciones-dijo mientras subian las escaleras con el agua por detras-con algo de suerte la confusion nos permitira llegar a los botes salvavidas y ponernos a distancia-dijo queriendo creer que la mayoria de la gente en la parte de arriba aun no habia notado el desastre que se les venia encima, tenian que moverse rapido y aprovechar la situacion antes de que el desastre los pusiera entre la espada y la pared.

A kate no le hacía ni pizca de gracia salvar su pellejo a costa de los demás pero por una vez, quiso ser egoísta y siguió a Jhon, pasillo tras pasillo. Cogidos de la mano con la humedad en el cuerpo, el frío en los huesos y las lágrimas en la cara. Estaba aterrada, temblaba de frío y sólo ideas negativas se le pasaban por la cabeza. Pero se dejó guiar por su amado por la travesía más peligrosa que estaba pasando, llamada vida.

Después de correr, de quedarse sin aliento de que todos los músculos del cuerpo dijeran ¡basta! Consiguieron llegar a la cubierta. La gente había comenzado a ponerse los chalecos salvavidas, las barcas ya flotaban en el agua sin apenas gentío, sólo con sus joyas y maletas. Kate observaba como Albert, Mary y su madre bajaban en una balsa con otras diez personas cuando bien podrían ir casi treinta.

-¡Oh, Dios mío!-Exclamó horrorizada al ver como la gente comenzaba a dejar de ser civilizada. Peleándose por subir a los barcos, sobornando al personal, todo era terrible y como venida de la nada. Empezó a escucharse un violín. Kate buscó con la mirada el origen hasta que dio con un muchachito que se había quedado rezagado para poner fin a su vida con un poco de música-¿Qué vamos a hacer?-Preguntó a Jhon horrorizada mientras no podía dejar de mirar al niño.

Llegar a la cubierta fue toda una odisea en si mismo pero tan pronto como llego alli jonh sintio que se le caia el alma a los pies. Habia sido estupido de su parte pensar que contarian con tiempo de ventaja antes de que el resto del pasaje se diera cuenta de lo que estaba pasando pero jamas hubiera creeido que las cosas se pondrian tan mal, los botes salvavidas eran una cantidad irrisoria dada la cantidad de gente que habia en el barco y para colmo de males la gran mayoria ya habian zarpado casi vacios con gente mas preocupada por salvar sus posesiones terrenales que a otros seres humanos. En medio de aquel caos alcanzo a ver a la familia de kath subida en uno de aquellos botes pero albert estaba con ellos lo que descartaba cualquier posibilidad de subir alli.

Busco con la mirada de manera frenetica pero a cada segundo la gente se apiñaba aun mas buscando salvar su propio pellejo igual que ratas asustadas, en medio de aquel infierno sin embargo podia escuchar la dulce melodia de un violin, por un segundo giro la mirada y se encontro con un muchachito que estaba alli tocando con expresion indiferente como si se hubiera rendido a su destino, kath no le quitaba la vista de encima y no era muy dificil ver lo que estaba pensando-usar la cabeza eso es lo que haremos-dijo mientras una idea se encendia en su cabeza al ver el instrumento-vamos muchacho no querras morir aqui verdad-dijo mientras tomaba al muchacho del brazo y empezaba a correr en direccion al salon vidriado, era evidente que kath no se iria sin ese chiquillo.

Una vez alli se alegro de ver que el gran piano aun seguia alli-vamos ayudame a empujar-dijo mientras empezaba a empujar el enorme piano en direccion a la cubierta, si no tenian un bote inventarian el suyo propio.

Katherine tiró del piano junto a los otros dos.
-¡NO!-Rugió.-No saldrá bien, pesa, se hundirá. Y no tenemos tiempo para desarmarlo.-Le explicó a Jhon mientras le volvía la cordura.-Necesitamos algo de madera que no pese. Las tumbonas, las puertas,...

La música seguía tocando. El muchacho se había apartado de la pareja, había decidido morir, se unió a la banda de música del salón de primera clase, que tocaban una melódica canción mientras los gritos y empujones los envolvía. El barco comenzó a hundirse, a inclinarse. Kate se agarró de la mano de Jhon, preocupada. Iban a morir pero por lo menos lo harían juntos y libres.

Intento mover el piano pero aun aplicando toda su fuerza no fue capaz de moverlo un solo milímetro. Fuera lo que fuera que había alli adentro kath tenia razón en que no podría soportar su peso en el agua.

El sonido de la música solo lo ponía aun mas frenético pues parecía que aquellos hombres se habían dado por vencido incluso antes de haber intentado, que clase de humano se rendía de aquella forma sin luchar hasta el ultimo momento-saldremos de aquí te lo prometo-dijo al sentir como katherine se agarraba de el evidentemente resignada a su destino. Cientos de personas se movían frenéticas alrededor de ellos a medida que el barco comenzaba a zozobrar por la herida en su casco, a medida que el barco de hundía la madera gemía y se astillaba lanzando proyectiles a diestra y siniestra, uno de estos salió disparado en la dirección de jonh con tan mala suerte que el aparejo que tenia de enrosco en su brazo y comenzó a arrastrarlo en dirección al agua-este es nuestro boleto de salida-dijo mientras tomaba a kath y al niño con su violín y salta al los 3 al agua helada. Al principio sintió que perdía el aire pero su instinto lo obligo a moverse mientras los 3 se subían a la plancha de madera atada a su brazo-tenemos que alejarnos o la succión nos matara-dijo tiritando mientras tomaba el violín y obligaba a sus brazos a remar en dirección a los botes salvavidas.

Me siento en una esquina de la tabla, suplicando a Dios que podamos avanzar lo más rápido posible antes de que el barco se hunda y nos engulla con él. Cierro los ojos y trato de concentrarme en mis oraciones y súplicas pero son tantos los gritos y los ruidos del barco que se me hace imposible no poder retener las lágrimas.
-¡Jonathan!-Le llamé cuando vi que del barco sólo quedaba unos metros.

Remo,remo como si su vida dependiera de ello. Por un momento olvido los gritos y las suplicas incluso el frío que helaba su cuerpo pasaba a un plano secundario mientras movía el pequeño instrumento intentando alejarse del barco.
Sus músculos parecían arder pero aun así se obligaba a continuar en un intento por ponerlos a salvo, escucho la voz de kath detrás de el y un segundo después no hubo mas que silencio mientras el barco finalmente desaparecía en las oscuras aguas, las balizas de los barcos de rescate brillaban unos metros mas adelante como estrellas en el oscuro tapiz del océano-ya todo ha terminado-le dijo a kath con lagrimas en los ojos mientras soltaba el violín para abrazarla, ahora solo tenia que llegar a un bote y esperar que los rescataran.

Tras un abrazo que pareció devolverle el calor continuo avanzando con nuevas fuerzas hasta chocar con un bote donde unas caras familiares los observaban, al parecer la familia de katherine había preferido salvar sus maletas antes que a otras personas.

Kate fui la primera en sorprenderse al encontrarse cara a cara con su madre que rápidamente empezó a derramar lágrimas de impotencia y dolor. Mary no tardó en imitarla pero Albert clavaba la mirada en Jonathan como si supiera un duelo a muerte.

Mary se acercó al borde para tenderle la mano a su prima. Y esta accedió, dando paso al chaval del violín. Ella fue después. Cogió un par de maletas con indiferencia y las tiró al agua para dejar sitio a Jonathan. Que ayudado por Mary tambien se salvó.

Katherine no tardó en vengarse. Pues cogió otra maleta y después otra y las dejó sobre el tablón que les había salvado la vida. Se acercó a Albert y con mirada furicunda le indicó que subiera al bote. Tres veces se lo pensó hasta que a la cuarta, simplemente, recibió tan fuerte empujón que cayó al agua irremediablemente. Nadó hasta la balsa improvisada y Kate tomó un remo para apartarlo del bote.
-Buena suerte.-Le deseó. Y remó hacia el resto de botes para evacuar el suyo y volver a por supervivientes.

El encuentro con la familia de katherine fue bastante mejor de lo que esperaba, casi temió que lo arrojaran de vuelta al mar pero para su sorpresa fue la misma mary a la que el había engañado tan cruelmente quien lo ayudo a subir, si bien su cara no era la mas amistosa nada podía compararse a la cara de albert en cuanto vio a su oponente sano y salvo. En otra situación hubiera empezado a vociferar pero sus amigos mafiosos no estaban alli para ayudarlo, por un momento sopeso la posibilidad de darle un golpe en la cara pero katherine se ocupo de el actuando con mas determinación de lo que nunca la había visto-recuerdame nunca hacerte enojar así-le susurro al oído mientras agitaba la mano a su pedazo de madera que se alejaba con albert subido encima.
Sin perder un momento tomo el segundo remo y se enfilaron de regreso al barco para buscar sobrevivientes-se que no es el mejor momento pero seria un honor que me concediera la mano de su hija señora duchamp-dijo mientras miraba a izquierda y derecha buscando otras personas que se hubieran aferrado a trozos de madera u otros objetos similares, sabia que la búsqueda podía ser inútil pero necesitaban mantenerse concentrados si querían sobrevivir.

Consiguieron salvar varios supervivientes, casi tres decenas más. Cuando empezaron con su bote, otros botes más se unieron a ellos, y cuando las sirenas de los barcos de salvamento empezaron a sonar, la esperanza en los supervivientes se iluminó en sus caras. En uno de esos botes, Katherine vio a Albert, y aliviada se fundió en un abrazo con Jonathan.

Llegaron a Estados Unidos de forma distinta a como se habían embarcado. La madre de Katherine accedió al matrimonio con el joven pues su hija se había vuelto una mujer fuerte y convincente. Y dueña de su vida.

Katherine siguió tocando el violín, tocando el piano. En USA tuvo la mayor fama que jamás había soñado, Jonathan se dedicó a sus dibujos, y la fama de Kate no ensombreció la suya. Se casaron, y vivieron felices cuando su pequeña hija nació, fruto de su amor. Fueron más que felices. Y juntos sobrevivieron a los tiempo, sobrevivieron al Titanic y fueron inmesamente felices.